Una arquitectura moderna, tumbados estilizados, luces LED, detalles industriales, mucha luz natural y buen gusto, hacen del sitio más acogedor. El Mall del Norte, que se levanta en la avenida Francisco de Orellana, frente a la zona de Vergeles, es el nuevo centro comercial del norte de Guayaquil, que brindará servicio a más de 800.000 personas en su zona de influencia. 

Un ejército de personas trabaja en los últimos detalles. Moviliza electrodomésticos, neveras y televisores gigantes, coloca perchas de ropas y zapatos, viste maniquíes, instala paneles en una isla. Y se esmera en otra decena de detalles en la variedad de tiendas y locales, que funcionarán desde este jueves, 7 de septiembre de 2023, cuando se inaugure este espacio, que concentrará a las tribus de compradores urbanos. 

“El Mall del Norte es una muestra de la confianza de la empresa privada en el país”, enfatiza Víctor Naula Menéndez, gerente general del Mall del Norte. Es un economista que cuenta con una experiencia de más de 35 años en estudios de alta gerencia, turismo receptivo, planificación y marketing de centros comerciales. Es el gerente general de Seruvi S.A. que opera Mall del Sur, City Mall, Village (Samborondón) y ahora Mall del Norte. 

La inversión total del proyecto asciende a US$ 80 millones. El principal inversionista es Corporación Favorita, con US$ 50 millones destinados a la compra del terreno y la construcción de la obra. Los otros US$ 30 millones son los aportes de los arrendatarios de los locales, áreas de diversión y patio de comidas, en todas las adecuaciones de las tiendas. 

“Es la primera vez que se arranca con el 100 % de los locales arrendados”, según Naula. El diseño del 'mall' corresponde al arquitecto argentino Aldo Volpe, quien ha desarrollado otros proyectos en el país.

La edificación se levanta sobre un terreno de 25.000 m2 y tiene 75.000 m2 de construcción de uso mixto, una planta baja y dos niveles más, donde las marcas muestran los nuevos diseños de sus tiendas, más funcionales, más accesibles. A través de los vidrios se observan las nuevas colecciones y los cambios de imagen. Los locales van desde moda, electrodomésticos, tecnología, hogar, servicios, cafeterías, bancos y restaurantes. Entre las marcas anclas están Megamaxi, Juguetón, Pycca, EtaFashion, Totto, Marathon, Estuardo Sánchez y Multicines. 

“El Mall del Norte es un 'mall' familiar, para distraerse, para comprar, pueden venir con los hijos, con los padres, tenemos dos áreas de diversión, el Multicines para jóvenes y el área de mundo mágico, para niños menores de 12 años”. Además, hay una variedad de marcas, que lo distingue de otros centros comerciales por su comodidad, que invita a ingresar y cuando estás adentro empiezas a vivir experiencias. Nuestro slogan es vive tus sueños”, explica Naula.

El Mall del Norte comenzó a planificarse antes de la pandemia, cuando se compraron los terrenos en una de las zonas de influencia de mayor crecimiento urbanístico de los últimos años. La avenida Francisco de Orellana conecta con la Av. Narcisa de Jesús y la Av. León Febres Cordero, que conduce a urbanizaciones privadas, en la zona de La Aurora, jurisdicción del cantón Daule, parte de lo que se denomina el Gran Guayaquil. Este centro comercial también concentrará a clientes de sectores como Samanes y Alborada, de la vía a Daule.

Una de las novedades será la unidad policial que funcionará en su interior, a través de un convenio firmado con la Policía Nacional. El centro comercial proporciona el sitio, con su respectivo equipamiento, a fin de que se preste servicio de seguridad en el lugar y en el sector, ya que ahí se podrán receptar denuncias y custodia de valores.

Parte de la planificación incluyó el estudio de mercado de los potenciales clientes en toda la zona de influencia. Se calcula que al mes circularán aproximadamente 800.000 usuarios. El perfil de los compradores son clase media, familias jóvenes, que están comenzando su familia, y profesionales. También se hizo un análisis sobre las demandas de compras y gustos de la gente, dice Naula. Así se buscó satisfacer las expectativas y necesidades del público que quería cercanía, seguridad, innovación y poder hacer compras cotidianas. Por eso, el objetivo no es tener marcas internacionales, sino ser parte de la vida cotidiana de los usuarios. 

La construcción se realizó en dos años y ha generado plazas de empleo para 2.000 personas de forma directa e indirecta. Y en todos los locales del centro comercial van a laborar 800 personas.  El 'mall' tiene capacidad para 1.000 parqueos, nueve salas de cine y un patio de comidas. (I)