Paola Torres se define como una apasionada del mundo de la hospitalidad. Su travesía comenzó en la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), donde se graduó en 2014. Desde entonces, su vida ha estado ligada al sector de servicios, trabajando en varios restaurantes de Quito y gestionando proyectos hoteleros de renombre.
"Empecé a trabajar primero en restaurantes", recuerda con una sonrisa. Su experiencia en La Choza, un restaurante icónico de la ciudad, fue crucial en su desarrollo profesional. Pero ella no se detuvo allí. Su carrera tomó un giro significativo cuando se unió a Álvarez Bravo para trabajar en la preapertura de Citimed Hotel, un proyecto hotelero con enfoque médico. "Fue una experiencia súper enriquecedora y luego me quedé como Gerente del hotel durante tres años", comenta.
Posteriormente, decidió ampliar sus horizontes académicos con una maestría en Gestión de Empresas Hoteleras en la Universidad Autónoma de Barcelona, complementada con trabajo en la consultora Magma Hospitality, “que hoy por hoy es Cushman & Wakefield, una de las consultoras más importantes de Europa en temas hoteleros”.
Luego, su paso por México consolidó su expertise en el sector. Como gerente de un hotel boutique en la Riviera Maya, llamado Casa del Puerto y luego en la cadena Velas Resorts, donde gestionó su segmento de grupos y convenciones. Torres se convirtió en una experta en ofrecer experiencias de lujo.
El regreso a Ecuador, impulsado por la pandemia, abrió un nuevo capítulo en su vida. Torres asumió la coordinación académica de la carrera de Hospitalidad y Hotelería en la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), donde ha liderado un proceso transformador. Bajo su dirección, la carrera ganó una acreditación internacional de la Accreditation Commission for Programs in Hospitality Administration (ACPHA), “la acreditadora más importante de EE.UU. en temas de hospitalidad”, afirma. Un hito que coloca a la USFQ como la primera universidad en Ecuador en recibirla y “dentro de Latinoamérica, hay seis otras universidades que tienen la acreditación de ACPHA”.
La acreditación, otorgada por el máximo periodo de siete años, es más que un sello de calidad; es una puerta abierta a más oportunidades para los estudiantes. "Nuestros graduados son reconocidos a nivel internacional, lo que les abre las puertas a empleos globales y programas de postgrado de alto nivel", añade.
Torres también enfatiza en la importancia de adaptar la enseñanza a las tendencias globales. "La hospitalidad está evolucionando. Ya no se trata solo de hoteles y restaurantes; incluye eventos, gestión deportiva, turismo sostenible y más. Nuestro enfoque es ofrecer una educación integral que prepare a nuestros estudiantes para liderar en cualquier ámbito de esta industria".
Para la Universidad San Francisco de Quito, esta acreditación representa un avance significativo en su compromiso con la excelencia académica y la internacionalización. “Estar entre las mejores no es solo un reconocimiento; es una responsabilidad continua para mantener y superar los estándares de calidad educativa”, señala. La acreditación de la ACPHA no solo posiciona a la USFQ en un lugar privilegiado a nivel regional, sino que también fortalece la relación de la universidad con prestigiosas instituciones internacionales, potenciando oportunidades de colaboración y expansión académica. “Nuestro programa de Hospitalidad y Hotelería está rankeado este año como el top 8 de Latinoamérica por el QS World University Ranking”.
Este logro también tiene implicaciones trascendentales para el sector turístico y de hospitalidad en Ecuador. Al elevar los estándares educativos, se prepara a una nueva generación de profesionales altamente capacitados para enfrentar los desafíos globales, impulsando así la competitividad del país en un mercado cada vez más exigente. “Con estos estándares, nosotros garantizamos que más profesionales de alto rendimiento van a ingresar a formar parte de esta industria”, concluye con determinación. (I)