La OMS podría aprobar la vacuna Sputnik V antes de fin de año
Lo anticipó la científica jefa del organismo, Soumya Swaminathan, y también detalló cuál es la principal traba.

Mientras el mundo avanza en el ritmo de vacunación contra el COVID-19, el virus que ya ocasionó la muerte de 4,85 millones de personas y 238 millones de contagios en todo el globo, según Johns Hopkins Medicine & University Coronavirus Resource Center, la Organización Mundial de la Salud (OMS) parecería estar dispuesta a reconocer a la vacuna contra el coronavirus Sputnik V antes de fin de año.

Así lo manifestó la científica jefa de la OMS, Soumya Swaminathan, en diálogo con la agencia rusa RIA Novosti, quien detalló cuál es la principal traba que, en la actualidad, imposibilita la autorización del inoculante desarrollado por el Instituto Gamaleya, de Moscú. “Existen algunos documentos legales que deben ser firmados por ambas partes antes de que el proceso continúe”, compartió la directiva.

“Si los documentos se firman en los próximos dos días, después se reanudará la evaluación, es altamente probable que la inspección también tenga lugar hasta finales del año y el proceso podrá ser completado”, sostuvo Swaminathan.

A principio de este mes, el ministro de Salud ruso, Mikhail Murashko, había asegurado que la OMS destrabó la aprobación de la vacuna Sputnik V contra el COVID-19. La información fue dada a conocer a través de la cuenta oficial del inmunizante, que compartió una declaraciones del funcionario de Vladimir Putin en ese sentido. 

“Se han eliminado todas las barreras para la autorización de SputnikV por parte de la OMS”, aseguró Murashko y agregó: “Solo es necesario resolver los procedimientos administrativos menores. Lo ha confirmado el Director General de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus”.

“La empresa solicitante involucrada en la certificación de la Sputnik V con la OMS tiene que firmar una serie de documentos, presentar algunos trámites adicionales -después de todo, este es un procedimiento administrativo- y esto será revisado”, explicó. 

A mediados de junio, un grupo de expertos de la OMS detectó irregularidades en la producción de Sputnik V en una planta en Ufá (Rusia).

Según un documento publicado en el sitio web de la OMS, la mayoría de las observaciones no están relacionadas con el proceso de fabricación de la vacuna, sino con cuestiones de esterilidad y medioambientales. Los expertos no cuestionaron la seguridad de la vacuna misma, pero a pesar de ello se tomó la decisión de paralizar todo el proceso de validación de Sputnik V.

Poco después, el vocero del presidente de Rusia, Dmitri Peskov, afirmó que el fabricante de Sputnik V había corregido las observaciones realizadas por la OMS sobre el cumplimiento de los requisitos para producir vacunas contra el coronavirus.

En septiembre pasado, el subdirector de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Jarbas Barbosa, anunció que la aprobación del fármaco ruso por parte del organismo internacional se encontraba suspendido a la espera de una nueva inspección de la planta del productor.



"Durante una inspección de una de las fábricas que forman parte de la producción de Sputnik V, se comprobó que la planta no estaba de acuerdo con la aplicación de Buenas Prácticas de Manufactura (BPM)", dijo Barbosa.

Estas BPM son normas de procedimiento cuyo objetivo es alcanzar determinados estándares de calidad en el producto final.

El código BPM fue establecido por primera vez en 1968 por los especialistas de la OMS. En la actualidad la mayor parte de estas reglas se basan en normativas de la Unión Europea o de la llamada Conferencia Internacional sobre Armonización, integrada por la propia UE, Estados Unidos y Japón.

La certificación BPM tiene un carácter más ramificado, así que algunos países, incluido Rusia, cuentan con sus propias reglas regionales de procedimiento.

Hasta el momento, las vacunas contra el coronavirus aprobadas por la OMS son Pfizer-Biontech, Sinovac, AstraZeneca, Johnson & Johnson-Janssen, Sinopharm y Moderna.

*Con información de Télam