El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció este lunes que planea renunciar como líder del Partido Liberal y primer ministro, en medio de pedidos realizados dentro de su propio partido durante el año pasado. Los mismos alcanzaron un punto de inflexión cuando las amenazas arancelarias del presidente electo Donald Trump abrieron una brecha entre Trudeau y sus aliados.
Trudeau dijo que dimitirá "después de que el partido elija a su próximo líder", y señaló que "el Parlamento ha estado paralizado durante meses después de lo que ha sido la sesión más larga de un Parlamento minoritario en la historia de Canadá". "Me ha resultado evidente, debido a las batallas internas, que no puedo ser yo quien lleve el estandarte liberal a las próximas elecciones", dijo Trudeau.
Para finalizar, Trudeau dijo que pidió al parlamento que tomara un receso hasta el 26 de marzo para darle tiempo al Partido Liberal de seleccionar un nuevo líder, quien luego asumirá el cargo de primer ministro.
Freeland, aranceles y una creciente debilidad política
La salida de la ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, marcó un punto de inflexión en el gobierno liberal. Su renuncia no solo evidenció fracturas internas, sino que desencadenó una ola de críticas hacia Trudeau por su estilo de liderazgo. Desde entonces, el primer ministro mantuvo un bajo perfil, incluso durante las vacaciones, lo que alimentó las especulaciones sobre su futuro político.
En paralelo, el contexto internacional agrava la situación. Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, asumirá el cargo en cuestión de semanas y ya anunció los planes de imponer aranceles del 25% a todas las importaciones provenientes de Canadá y México. Esta medida, según Trump, se mantendría hasta que se controle la entrada de drogas y la inmigración ilegal hacia Estados Unidos.
Trudeau respondió a estas amenazas afirmando que los aranceles encarecerían significativamente la vida para los consumidores estadounidenses, pero Trump replicó con comentarios sarcásticos en su plataforma Truth Social, donde se refirió al primer ministro canadiense como "el gobernador del Gran Estado de Canadá".
En noviembre, Trudeau y sus asesores se reunieron con Trump en Mar-a-Lago, donde discutieron temas comerciales. Aunque Trump calificó la reunión como "muy productiva", las tensiones no tardaron en resurgir. Incluso, según Fox News, Trump habría sugerido en tono de broma que Canadá podría convertirse en el estado número 51 de Estados Unidos si los aranceles llegaran a dañar la economía canadiense.
Un Partido Liberal en crisis y el ascenso conservador
La salida de Trudeau abrirá un periodo de incertidumbre dentro del Partido Liberal, que ya enfrenta una fuerte caída en las encuestas. Un sondeo reciente de Ipsos muestra una ventaja de 25 puntos para los conservadores, que cuentan con un apoyo del 45%. En contraste, los liberales, liderados por Trudeau hasta ahora, obtienen apenas el 20%. Además, el líder conservador Pierre Poilievre es considerado por el 39% de los canadienses como el mejor preparado para manejar las relaciones con Trump, en comparación con solo el 14% que confía en Trudeau.
Las próximas elecciones federales están previstas para octubre de 2025, pero la presión por un cambio en el liderazgo liberal podría alterar los tiempos políticos. De concretarse la renuncia, comenzaría una lucha interna por el liderazgo en un momento crítico para el partido y el país.
Con información de Forbes US.