La muerte del Papa Francisco sacudió al mundo. La noticia, que se conoció en horas de la mañana, impactó de lleno en la Argentina, donde Jorge Mario Bergoglio nació y forjó su identidad antes de ser electo sumo pontífice en 2013. Tenía 88 años.
Los mensajes de despedida comenzaron a circular de inmediato. En redes sociales y comunicados oficiales, distintos referentes políticos —tanto locales como internacionales— manifestaron su pesar y destacaron el legado que deja quien fuera el primer papa latinoamericano y jesuita en llegar al Vaticano.
Uno de los primeros en pronunciarse fue el presidente La muerte del papa Francisco, confirmada este lunes, sacudió al mundo político y religioso por igual. La noticia, que se conoció en horas de la mañana, impactó de lleno en la Argentina, donde Jorge Mario Bergoglio nació y forjó su identidad antes de ser electo sumo pontífice en 2013. Tenía 88 años.
Los mensajes de despedida comenzaron a circular de inmediato. En redes sociales y comunicados oficiales, distintos referentes políticos —tanto locales como internacionales— manifestaron su pesar y destacaron el legado que deja quien fuera el primer papa latinoamericano y jesuita en llegar al Vaticano.
Uno de los primeros en pronunciarse fue el presidente Javier Milei, quien recurrió a su cuenta personal en X (ex Twitter) para escribir un mensaje breve, pero cargado de contenido simbólico. "Con profundo dolor", dijo el mandatario, "falleció hoy y ya se encuentra descansando en paz. A pesar de diferencias que hoy resultan menores, haber podido conocerlo en su bondad y sabiduría fue un verdadero honor para mí".
En otro tramo, Milei agregó: "Como Presidente, como argentino y, fundamentalmente, como un hombre de Fe, despido al Santo Padre y acompaño a todos los que hoy nos encontramos con esta triste noticia". La declaración reflejó una clara diferencia con las tensiones que existieron entre el entonces cardenal Bergoglio y figuras políticas liberales durante la última década.
Poco después, la Oficina del Presidente difundió un comunicado institucional en el que confirmó el fallecimiento del pontífice y decretó siete días de duelo nacional. El texto oficial también hizo llegar sus condolencias a la familia Bergoglio y a la comunidad católica argentina.
El ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, eligió no extenderse, pero compartió el comunicado oficial y escribió: "Que en paz descanse".
El expresidente Mauricio Macri también expresó su dolor por la muerte de quien consideró "una figura espiritual única en la historia argentina". A través de un mensaje en redes sociales, escribió: "Muy triste por la partida del papa Francisco. Un hombre sabio que predicó la paz y el amor por los más humildes. Su legado quedará grabado para siempre".

En tanto, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, utilizó sus redes para expresar su "profundo dolor" por la muerte del papa. En su mensaje, definió a Francisco como "un porteño que trascendió fronteras y llevó su mensaje de paz, justicia y humildad al mundo entero". También destacó que su legado "seguirá iluminando a muchos" y que el momento representa "una tristeza infinita para la comunidad católica en particular, pero también para toda la humanidad".
En el ámbito legislativo, también hubo repercusiones. El diputado nacional Cristian Ritondo (PRO, Buenos Aires) manifestó: "Qué tristeza tan grande. Se fue el Papa Francisco. Cercano, valiente, humano y argentino. Nos enseñó que la fe se vive con gestos, no con discursos. Laudato Si' y Fratelli Tutti quedan como símbolo de amor, justicia y fraternidad. Hasta siempre".
Las condolencias desde Estados Unidos
El presidente estadounidense, Donald Trump, utilizó su red Truth Social para publicar un mensaje corto: "¡Descansa en paz papa Francisco! Que Dios lo bendiga a él y a todos los que lo amaban".
Su vicepresidente, J.D. Vance, se mostró visiblemente conmovido y recordó una de sus últimas interacciones con el pontífice. "Me alegré mucho de verlo ayer, aunque estaba claramente muy enfermo. Pero siempre lo recordaré por la homilía que pronunció en los primeros días de la COVID. Fue realmente preciosa. Que Dios acoja su alma en la paz".
Repercusiones en Europa
La noticia del fallecimiento también encontró eco inmediato en el Viejo Continente. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, compartió un mensaje conmovedor en el que remarcó la figura de Francisco más allá del credo religioso. "Hoy, el mundo llora la muerte del papa Francisco. Inspiró a millones de personas, mucho más allá de la Iglesia católica, con su humildad y su amor tan puro por los menos afortunados". Von der Leyen envió sus pensamientos a quienes sienten "esta profunda pérdida" y confió en que su legado seguirá guiando a las sociedades "hacia un mundo más justo, pacífico y compasivo".
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, destacó el compromiso de Francisco con "la justicia social, la paz y los más vulnerables". También envió sus condolencias y deseó que "descanse en paz".
Por su parte, el presidente francés Emmanuel Macron escribió: "Desde Buenos Aires hasta Roma, el papa Francisco quería que la Iglesia llevara alegría y esperanza a los más pobres. Que uniera a los hombres entre sí y con la naturaleza. Que esta esperanza resucite sin cesar más allá de él".
El presidente ruso, Vladímir Putin, emitió un extenso mensaje dirigido al clero católico en el que resaltó el "gran prestigio internacional" del papa Francisco. Lo definió como un "fiel servidor de la doctrina cristiana, sabio religioso y estadista", y valoró su compromiso con el diálogo interreligioso. También recordó los encuentros personales que mantuvo con él y mencionó la "interacción constructiva" entre Rusia y la Santa Sede como un legado concreto del pontífice.
Desde Roma, la presidenta del Consejo de Ministros italiano, Giorgia Meloni, fue una de las dirigentes que más tiempo compartió con Francisco en sus últimos años. En su mensaje expresó: "El papa Francisco ha vuelto a la casa del Padre. Una noticia que nos entristece profundamente, porque nos deja a un gran hombre y un gran pastor".
Meloni también hizo referencia a las meditaciones del Vía Crucis y destacó la capacidad del papa de "pedir al mundo el valor de un cambio de rumbo", siempre con un mensaje de reconciliación y justicia. "Despedimos al Santo Padre con el corazón lleno de tristeza, pero sabemos que ahora está en la paz del Señor", cerró.
La presidenta suiza, Karin Keller-Sutter, lo definió como un "gran pastor" y un "incansable predicador de la paz". Subrayó que su calidez humana "no solo ayudó a los católicos" y sostuvo que su legado permanece.
Desde Polonia, el presidente Andrzej Duda mencionó el lema episcopal de Francisco —Miserando atque eligendo— como símbolo de su vocación pastoral. Afirmó que fue un "gran apóstol de la Misericordia", un concepto que, según él, definió toda su relación con el mundo contemporáneo.
Uno de los discursos más emotivos fue el del presidente de Eslovaquia, Peter Pellegrini, quien recordó los encuentros que mantuvo con el papa en dos oportunidades. "El mundo ha perdido a una verdadera personalidad y una gran autoridad moral", escribió. Pellegrini resaltó la "humanidad, humildad y sabiduría" de Francisco, y afirmó que "nunca olvidaré su visión de una nación como un árbol, formando un todo vivo". Para él, Francisco pertenece a ese tipo de líderes cuya influencia trasciende su cargo: "Con su vida y sus obras, ya forma parte de las figuras más significativas de la historia".