Hoy, un apagón eléctrico masivo afectó a una buena parte de Europa, generando caos en el transporte público, hospitales, servicios de telecomunicaciones y sistemas básicos de infraestructura. Países como España, Francia, Alemania, Italia, Finlandia, Países Bajos, Reino Unido, Andorra y Portugal registraron fallas graves a partir de las 12:35 horas, según los reportes oficiales.
Aunque las causas del corte aún no han sido esclarecidas, desde Red Eléctrica de España se informó que "se encuentran activados planes de reposición del suministro eléctrico en colaboración con las empresas del sector".
Más allá de las afectaciones sociales y logísticas, el impacto económico es igualmente severo. Considerando el Producto Interno Bruto (PIB) nominal de los países afectados, las pérdidas conjuntas por cada minuto sin electricidad ascienden a aproximadamente US$ 29,84 millones.
Esta cifra surge de sumar el valor económico generado cada minuto por estas naciones, según sus últimos datos de PIB 2024:
- Francia: 6,01 millones de USD/min
- Alemania: 8,87 millones de USD/min
- Italia: 4,51 millones de USD/min
- Finlandia: 0,57 millones de USD/min
- Países Bajos: 2,33 millones de USD/min
- Reino Unido: 6,93 millones de USD/min
- Andorra: 7.680 USD/min
- Portugal: 0,58 millones de USD/min
La afectación fue especialmente crítica en España, donde el apagón dejó sin servicio al metro de Madrid y a múltiples hospitales, además de interrumpir la operación de empresas de telecomunicaciones como Movistar, Vodafone, Jazztel, y servicios digitales como WhatsApp e ING.
El incidente pone en evidencia la vulnerabilidad de la infraestructura energética europea ante eventos de alta magnitud y abre interrogantes sobre la resiliencia de los sistemas de contingencia en sectores estratégicos.
Si el corte se prolongara por tan solo una hora, el costo combinado podría superar los US$ 1.790 millones. Un escenario que refuerza la urgencia de revisar y fortalecer los protocolos de respuesta ante emergencias eléctricas a nivel regional. (I)