De nosotros depende el porvenir de nuestros niños
Juan tiene 16 años, ingresó a la escuela de sicarios de la mafia albanesa desde los 12 y desde entonces ha asesinado a 45 personas. Es un testimonio que recogió el medio británico The Telegraph y es un reflejo de la realidad de muchos niños y adolescentes en Ecuador. ¿Cuál es nuestro papel en esto? Hacernos de la vista gorda y exigir más seguridad al nuevo presidente. El cambio debería comenzar desde nuestros hogares.