La movilidad sostenible genera inversiones en Ecuador. El ejemplo más reciente es el convenio que acaban de firmar la firma china BYD y el grupo ecuatoriano Andor Corporation. La primera es una empresa fundada en 1995 que incursiona en las industrias automotriz, de tránsito ferroviario, energías renovables y electrónica; tiene presencia en más de 70 países. Además vende cerca de 750.000 vehículos al año a escala global.
El segundo actor del convenio es un grupo nacional que participa en sectores de transporte aéreo, inmobiliario, hotelero, centros comerciales, distribución farmacéutica, tiendas retail, alimentos y vehículos.
Stella Li, Vicepresidenta Ejecutiva de BYD Company Limited y CEO de BYD Americas, asegura que el convenio marcará un hito en la expansión de la electromovilidad en Ecuador. Nos animamos a venir a Ecuador porque es un país muy respetuoso con el medio ambiente y donde cerca del 80 % de la electricidad se genera por hidroeléctricas. BYD está en el país hace ocho años y en principio nos centramos más en ofertar buses y camiones eléctricos. Ahora llegamos con vehículos eléctricos para personas particulares, desde la gama básica hasta la más alta.
La ejecutiva de la marca china añade que en Ecuador se importa una gran cantidad de combustible y que existen muchos subsidios. Entonces, si se utilizaran esos subsidios para los vehículos eléctricos, en realidad se podría construir una economía local usando la electricidad que se produce en Ecuador. Creemos que el transporte en el país puede ser 100 % electrificado. Li añade que en BYD no están preocupados por el contexto económico y político del país y que confían en que el gobierno ofrezca nuevos incentivos y facilite la construcción de la infraestructura de carga.
Con el convenio, Andor planea abrir seis concesionarios este año y llegar a 12 el próximo año. Esto significará una inversión aproximada de US$ 20 millones. El grupo tiene proyectado vender 400 unidades para cerrar 2023, lo que representaría ingresos por US$ 15 millones. Y el próximo año la meta es colocar en el mercado 1.600 unidades, con ventas por US$ 56 millones. Además, en los primeros dos años de operación se generarán más de 100 empleos.
En la región, la empresa china también está presente en Brasil, México, Chile, Colombia y Panamá. El año pasado BYD vendió 1,86 millones de vehículos a escala global. (I)