Clotilde Delbos nació en 1967 en Francia. Graduada en EM Lyon, una de las Escuelas de Negocios más importantes del mundo, su carrera comenzó en California. Pasó por empresas como PwC, Pechiney Group y Constellium, hasta que ingresó en 2012 al Grupo Renault. Fue nombrada vicepresidenta ejecutiva y hoy, además de CEO de Mobilize, es directora financiera del Grupo y presidenta del Consejo de Ad ministración de RCI Banque, la rama de servicios financieros de la automotriz.
A su vez, forma parte del Board de Alstom y AXA. Es la segunda directora ejecutiva de la industria automotriz a nivel mundial (la otra es Mary Barra, quien en 2014 se convirtió en la primera mujer en alcanzar el puesto de CEO de una automotriz, en este caso de General Electric), y basta su presencia en el escenario para entender por qué escaló tan alto.
En 2019, en uno de los momentos más críticos para la compañía, Delbos fue designada como CEO interina del Grupo hasta que en 2021 asumiera ese cargo el actual CEO, Luca de Meo. En aquel momento, la destitución de Thierry Bolloré fue descrita por medios como la BBC como “un golpe empresarial” y fue Delbos la que se animó a “agarrar la papa caliente” de una compañía cuyo futuro era más que incierto.
Bajo la convicción de que en el futuro las personas, cada vez más digitalizadas, no comprarán autos como lo hacen ahora y solo priorizarán cómo moverse, “nuestro CEO visualizó que había que hacer algo de cara al futuro de la movilidad -remarca-. Por eso surgió Mobilize”.
Al momento de explicar si funciona como una empresa independiente, Delbos bromea con la idea de que se trata de un “animal extraño” que por ahora es una nueva unidad de negocios, que funciona como una startup, pero con la intención de que adquiera su propia identidad. “En este momento es una transición entre el viejo y el nuevo mundo”, explica. Y, en ese camino hacia la electrificación, la ejecutiva se define como la responsable de unir ambos paradigmas.
Si bien Mobilize está presente en los mercados latinoamericanos desde hace más de 20 años a través de las filiales de Mobilize Financial Services, esta nueva marca quiere aumentar su presencia mediante el desarrollo de su oferta de vehículo como servicio para el transporte compartido, las soluciones tecnológicas para entregas y los servicios de alquiler. Esto explica la presencia de Delbos en San Pablo. “Mobilize es una aventura fantástica de cara al futuro de la movilidad, y tenemos planes muy ambiciosos en Latinoamérica”, dice.
Vuelta de página
Mobilize, la primera compañía creada por el Grupo Renault desde cero, pone el foco en los servicios por sobre los autos y en el software, por sobre el hardware, con tres objetivos muy marcados: reducir la brecha entre el uso de un vehículo y su costo (el 90% del tiempo los autos particulares están en desuso), mejorar el valor residual de los vehículos (el cual cae 50% en los primeros tres años) y contribuir a una huella sin emisiones de carbono. Estas metas están alineadas con el objetivo del Renault Group de alcanzar la neutralidad de carbono en Europa hasta el 2040; global en 2050 y en su ambición de desarrollar el valor de la economía circular.
“Queríamos proponer una movilidad más fácil, más accesible, más respetuosa con el medioambiente, por eso pensamos que era necesario crear una marca específica con una nueva mentalidad y forma de trabajar”, cuenta Delbos. Esta unidad brinda una amplia gama de servicios de transporte gracias a una plataforma tecnológica integrada: financiación, seguro, pagos, energía, mantenimiento y reacondicionamiento. “Queremos ser mucho más que una empresa que vende autos, queremos ser una empresa de tecnología –remarca la ejecutiva–. Es tiempo de actuar para que la nueva movilidad sea accesible para todos. El acceso a los autos eléctricos debe ser más fácil, menos costoso y más rápido. Y tenemos que trabajar para cambiar la idea de que esto es algo imposible”.
Sumado a ello, entre las metas, quiere quedarse con el 20% de revenue del grupo de cara a 2030. ¿Cómo lo hará? Según Delbos, la respuesta está en un nuevo modelo de negocios que denominan Vehicle as a Service (VAS), orientado hacia el uso más que hacia la propiedad, e incluye servicios asociados que hacen de la movilidad algo más fácil, accesble, ecológico y asequible.
Mobilize desarrolla sus propios vehículos, 100% eléctricos y especialmente diseñados para un uso específico, compartido e intensivo. A su vez, gracias a RCI Bank and Services, propone servicios de financiación, seguros y pago. Luego, brinda una oferta de servicios relacionados con la energía y la recarga para acompañar a sus clientes (operadores de movilidad, gestores de flota y particulares) en casa, en el trabajo o en una ruta. Y, después, mantenimiento y reparación, para darles una segunda y tercera vida a los autos y aumentar su utilización y su rentabilidad.
En cuanto al público, el negocio está planteado para particulares y para las flotas de tamaño pequeño a mediano, operadores de movilidad de personas (uso por suscripción, carsharing, leasing) y operadores logísticos. Mobilize será una solución para aquellos que no quieren tener un coche de su propiedad. Los concesionarios pasarán a ser centros de gestión donde se ofrezca al usuario distintos tipos de servicio en función de sus necesidades.
La construcción de una marca activista
En cuanto al mercado y la competencia, Delbos hace hincapié en el hecho de que Mobilize representa un ecosistema integral compuesto por lo mejor en tecnología, ingeniería, diseño, servicios y finanzas, potenciado por la experiencia del Grupo Renault. Y hace referencia a la importancia de contar con políticas que promuevan la electrificación: “En muchos países, si no hay un empuje por parte de los gobiernos en el uso de autos eléctricos y la movilidad compartida, las personas no lo harán por su cuenta porque tienen miedo al cambio, no entienden aún el valor de migrar a lo eléctrico o porque hoy siguen siendo más caros”.
Según expresa: “Se necesita que las autoridades promuevan incentivos para reducir costos y para aumentar su uso, por ejemplo, con estacionamientos gratuitos, carriles exclusivos o inversión en infraestructura para que haya más sitios donde cargar los autos”. A su vez, en el caso de mercados como América Latina, una región que según la directiva recién empieza el camino hacia la electrificación, “el primer paso debe ser la educación”.
Desde su visión, “todos tenemos la responsabilidad de hacer la transición a la neutralidad de carbono. Esta nueva era, caracterizada por el intercambio de recursos y la descarbonización, es una oportunidad para unirnos y desarrollar nuevas formas de comportamiento. No importa si somos ciudadanos a pie, empresas, taxis y servicios de transporte o profesionales de la logística, todos somos parte del problema y tenemos que serlo de la solución”.
Por último, comparte su visión sobre el futuro. “La pandemia, la guerra en Europa, la crisis energética y otras cosas que suceden en el mundo hacen que las personas cambien su modo de actuar. Las cosas están cambiando muy rápido y eso nos desafía a reinventar la movilidad constantemente. Nuestra respuesta a eso es Mobilize”. La CEO se propone impulsar el cambio y desafiar el statu quo. Lo colectivo, la pasión, la inclusión y la superación forman parte de los valores que hoy definen a la compañía.