Mami-T, la cadena de restaurantes de Guayaquil de comida tradicional, sigue creciendo. La marca decidió innovar su menú y presentar una nueva propuesta gastronómica: Mami-T y El Mar.
El nuevo local será el número quinto de Mami-T, con una carta donde destacan los platos de mariscos y cangrejos. Tiene un diseño inspirando en la playa y el mar, aunque se decidió mantener los detalles que identifican al restaurante, como el techo tejido de madera que fue trabajado por artesanos ecuatorianos, y estuvo a cargo de la diseñadora Janinna Cabal.
Fundado hace 14 años, Mami-T se dedica a rescatar los sabores tradicionales del Ecuador. El primer local se abrió en 2010, en Plaza del Sol, en el norte de Guayaquil, y el nuevo funciona, desde este viernes 24 de octubre de 2024, en Plaza Navona, en Samborondón.
El guayaquileño Omar Andrade, fundador y CEO de Mami-T, recuerda que el restaurante nació en honor a su abuela, fallecida en 2009. Se llamaba Esther, pero sus nietos pequeños no sabían pronunciar su nombre y le decían Mami-T. "Ella nos dejó sus recetas originales y durante este tiempo gracias a la aceptación y al cariño de nuestros clientes, hemos crecido hasta convertirnos en una cadena con varios locales en sitios estratégicos de la ciudad".
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En el menú de Mami-T y El Mar los dos primeros platos que llaman la atención son el pulpo a la parrilla de la abuela y la sopa de mariscos de la abuela, además, están las entradas, los piqueos. Hay una variedad de cinco ceviches de la abuela: criollo, rojo, manaba, peruano, y caribeño. La carta incluye los cangrejos de la abuela, con dos opciones: abuelo comelón (tres cangrejos pura pata gorda) y el cangrejo del nieto (tres unidades, una pata gorda).
En 2018 habían incursionado con otro local con el concepto de Mami-T y El Mar, pero cerró años después. Así que esta es una nueva y única propuesta basada en marisco que se suma a la cadena de restaurantes.
La marca promueve la gastronomía ecuatoriana y la conservación de tradiciones culinarias. "La innovación radica en nuestra capacidad de mantener la autenticidad de los platos tradicionales, y también adaptamos nuestra oferta a las tendencias contemporáneas, combinando tradición con modernidad, en técnicas y presentaciones que caracterizan a nuestra cocina de autor, siempre con los mejores ingredientes".
Actualmente, la cadena de restaurantes genera más de 100 empleos de forma directa, y de manera indirecta aproximadamente 200, donde se incluyen proveedores de los locales, como pescadores artesanales, servicios externos y otras colaboraciones.
El crecimiento sostenido de la cadena ha permitido mantener una facturación saludable a Mami-T, señala Andrade, aunque los números varían según la ubicación de cada local, la facturación de la marca alcanza los US$ 5 millones anuales.
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En los últimos cuatro años, Mami-T ha invertido alrededor de US$ 3 millones en la expansión y modernización de sus locales, que están en zonas exclusivas como Puerto Santa Ana, en Guayaquil, y la apertura del nuevo local, en Samborondón.
Las inversiones han permitido diversificar la oferta y mejorar la infraestructura. La inversión del nuevo local en Plaza Navona de Mami-T y El Mar asciende a US$ 300.000.
Andrade destaca que la propuesta gastronómica tiene potencial de crecimiento a escala nacional como internacional. "Nos encontramos planificando nuestra entrada a Quito y a nivel internacional esperamos llegar a Estados Unidos próximamente. Deseamos en algún momento ver a Mami-T internacionalmente, llevando lo mejor de nuestra cocina al mundo. Los sabores ecuatorianos son cada vez más reconocidos y apreciados". (I)
