En la región su nombre suena fuerte. No por nada, su expansión en los últimos años ha llevado a esta firma a facilitar, desde su infraestructura, más de 100 millones de transacciones al año y un volumen procesado de US$ 3,5 billones. Tiene oficinas en seis países de América Latina y más de 250 colaboradores. Es Geopagos, especialista en desarrollar la plataforma y redes de pagos digitales, Hoy llega a Ecuador de la mano de Datafast. 

¿Por qué su desembarco puede significar un punto de inflexión hacia el futuro? Para Julián Lisenberg, CRO y uno de los cuatro fundadores de la compañía nacida en el 2013, “Ecuador es uno de los mercados de mayor potencial de la región. Para tener una idea, las economías desarrolladas registran por encima de 45 POS por cada 1.000 habitantes. En Ecuador es de seis. Hay oportunidad de que esto crezca ocho veces en los próximos cinco o 10 años”. Los POS son terminales que los comercios tienen para recibir pagos digitales. 

En mayo del 2020, Forbes Argentina reseñó la trayectoria de Geopagos y de cómo está empresa empezó a desarrollar la plataforma para acompañar a procesadoras de pagos y bancos en su objetivo de crear sus propias redes de comercio. 

“En esencia, es el 'partner tecnológico' de los diferentes jugadores del mercado de pagos que buscan agilizar su camino hacia la digitalización. Dicho de otra manera, Geopagos ofrece su plataforma de cobros con desarrollos y licencias listas y aprobadas para que sus partners se suban a la revolución tecnológica sin necesidad realizar grandes inversiones de tiempo ni recursos”. En síntesis, es la plataforma a partir de la cual se desarrollan soluciones digitales de pagos 'end-to end', contemplando tanto el 'front' (landing page, onboarding, app con diferentes medios de pagos, dashboard, tienda online) como el 'back end' (Backoffice, Core Procesador y Gateway propietario).

Llegar a este punto, de alguna forma, fue el resultado de un encuentro con el azar. La historia de Geopagos comienza cuando uno de sus fundadores caminaba por Nueva York y se dirigió al Apple Store de la Quinta Avenida con ganas de comprar una computadora. El local estaba colapsado, pero, antes de que pudiera arrepentirse, un vendedor se acercó para mostrarle los productos en su propio iPhone. Eligió su Mac y el vendedor le consultó cómo quería pagarla. Tarjeta de crédito, respondió, pensando que lo llevaría a la extensa cola que se ordenaba en el frente. Pero el vendedor simplemente tomó la tarjeta y la deslizó sobre un aparatito que sobresalía de su smartphone. A los cinco minutos, ya estaba fuera de la tienda con su computadora en mano. Parecía magia, pero no: todo había sucedido gracias al mPOS de Square. Fue en ese momento que, viendo el potencial de las soluciones de pagos, decidieron fundar Geopagos para así poder desarrollarlas para Latinoamérica. 

El grupo fundador lo constituyen Sebastián Nuñez Castro, actual CEO, había trabajado 14 años en American Express; Julián Lisenberg (CRO) ya había fundado tres compañías de tecnología, logrando vender dos de ellas, y con una inversión millonaria en la tercera; Raúl Oyarzun (CTO) llevaba un largo tiempo aplicando su experiencia tecnológica en diversas 'start-ups'; y Fernando Tauscher (GCO), abogado especialista en fusiones y adquisiciones, tenía el 'know how' legal y financiero.

Con todos estos antecedentes, Geopagos entra al Ecuador con el gran objetivo de ofrecer oportunidades de mejorar, tanto el uso de los medios de pago digitales, como las cifras de bancarización. Según Lisenberg, en general todas las economías de la región siguen con un 70 y 80% de transacciones en efectivo. Y eso se da porque la gente no está bancarizada. La pandemia ayudó mucho a la digitalización e hizo crecer el 'e-commerce'. Hay datos que señalan que, en este tiempo, en Ecuador se pasó de 200 a 4.000 puntos de pago electrónicos. Entonces el potencial es enorme. Y por eso vemos que a nuestros partners podemos acompañarlos para trabajar en medios de pago que permitan captar a los usuarios no bancarizados y digitalizarlos”. (I)