Los problemas en la fintech Wenance, fundada y dirigida por Alejandro Muszak, continúan. Luego de anunciar una reestructuración en el pago de intereses a sus inversores, proceso que aún se está definiendo y que muchos describen como poco claro, la empresa enfrenta acusaciones internas de empleados que afirman haber sido despedidos sin el pago correspondiente por Ley.
Me fui de la compañía recientemente pero no puedo contactarte con nadie que siga ahí porque despidieron a casi todos. Tanto a mis compañeros de sector como a personas que trabajan en otras áreas, le cuenta a Forbes Argentina un ex empleado de la compañía. Y agrega: Se habrán quedado con 20 empleados como mucho y la mayoría de IT.
A través de redes sociales, decenas de trabajadores de Wenance contaron situaciones similares y resaltaron un despido masivo de más de 150 trabajadores que habría ocurrido este lunes. Se sabía desde el viernes anterior pero este lunes mandaron los telegramas. Y ese número es solo en la empresa Big Capital (NdR: señalada como parte del grupo) que pasó de 200 a 20 pero en Wenance es un número mayor. Además hay mucha incertidumbre porque los telegramas indican que van a poder pagar las liquidaciones cuando la empresa tenga fondos, destaca un ex empleado que proporcionó a este medio el documento que le enviaron desde la compañía. En ese sentido, los telegramas también aseguran que "la situación de la empresa se debe a la grave crisis económica que atraviesa el país porque generó que le sea imposible el recupero del dinero prestado".
Forbes se comunicó con la empresa para solicitar sus declaraciones sobre este asunto y comentaron que no hay despidos masivos. Hay mucha gente que se ha ido y otra desvinculada pero no es masivo, indicaron y agregaron que las acusaciones les parecen extrañas y que se dicen muchas cosas.
Por su parte, los trabajadores insisten con el reclamo, incluso aquellos que llegaron a irse antes de los despidos que buscan exponer. En un momento se quedaron sin plata. Ya en junio les costó un montón pagar los sueldos. Pagaron aguinaldo y después el 50% del sueldo. Y como 10 días después el 50% restante. A mi me deben dinero de sueldo y sigo en la incertidumbre si alguna vez lo voy a cobrar, describe otro ex empleado de la compañía.
La situación de Wenance
Todo comenzó a principios de julio cuando Wenance anunció una reestructuración en el pago de intereses a sus inversores. En ese momento, las miles de personas que depositaron dinero allí empezaron a sospechar del accionar y muchas de ellas intentaron recuperar su dinero sin éxito. Además, según se reportó en distintos grupos de Whatsapp creados por este grupo de personas, algunos de los asesores de la empresa dejaron de responder a las consultas.
Desde Wenance señalaron a Forbes que la problemática se originó por un aumento en la morosidad de los créditos que ellos otorgan a partir del dinero que reciben y, por lo tanto, no podían devolver los intereses. Además, destacaron que no se trata de una estafa sino de una reestructuración de los pagos para cumplir con los inversores.
Desde entonces, hubo un ida y vuelta entre Wenance y sus inversores ya que la empresa asegura que el 85% de ellos aceptó una reestructuración en los pagos. La misma se iniciaría en julio de 2024 y sería a doce meses con una tasa anual del 8% y cotización de dólar MEP. Mientras tanto, para aquellos que depositaron menos de $ 3 millones, sería a doce meses desde agosto y negociando con cada uno de ellos. Sin embargo, gran parte de los damnificados aseguran no haber recibido ninguna propuesta.
Todo este contexto genera aún más incertidumbre entre los inversionistas que no saben si recuperarán su dinero. Si bien no hay claridad sobre el mismo, se estima que Wenance tendría tres fideicomisos con un total de $ 30 mil millones. En un principio, se pensaba que la empresa no podía afrontar pagos de intereses por $ 700 millones, pero actualmente se cree que la reestructuración es por el total acumulado.
En los últimos días también se informó que dentro de los grupos de inversionistas de Wenance hay gente proveniente de España, Uruguay y otros países de América.