La empresa de transporte por carretera inDrive está analizando productos de servicios financieros en los mercados en desarrollo en los que opera.
Mark Loughran, presidente y CEO adjunto de la empresa, que se incorporó a la misma el verano pasado, afirmó que esta medida permitiría una mayor estabilidad financiera para los conductores de la plataforma.
InDrive se fundó en Rusia y ahora tiene su sede en EE.UU. Gran parte de su negocio se desarrolla en mercados en desarrollo de Asia, África y Latinoamérica, pero el año pasado se aventuró en el mercado estadounidense con un lanzamiento en Miami.
Loughran se unió a inDrive para hacer crecer estas diversas partes del negocio, así como para desarrollar otras nuevas, incluido un programa de 100 millones de dólares para apoyar a las empresas de las regiones en desarrollo.
El paso a los servicios financieros estaría dirigido a los conductores de mercados en los que puede haber inestabilidad y tensiones financieras.
“[Es] para esos conductores de los mercados en desarrollo, cuando les ocurre algo en su familia o quizá le pasa algo a su vehículo o a su moto o lo que sea y necesitan arreglarlo. Hemos empezado a buscar servicios financieros y opciones allí, sólo estamos probando algunas ideas”.
Los planes se encuentran en una fase inicial, dijo Loughran, pero la empresa está estudiando posibles asociaciones en estos mercados con servicios como los préstamos, pensado para conductores y repartidores que necesiten financiación para autos o bicicletas.
"En el lado de los servicios financieros, se trata más de ayudar pensando en el acceso a los servicios financieros, como préstamos a pequeño plazo. Estamos hablando de personas que antes no tendrían ninguna credibilidad bancaria", dijo Loughran.
“No podrían hacerlo, donde tendrían que ir a por un préstamo no es una buena opción para ellos o sus familias. Así que [estamos] estudiando diferentes formas en las que podríamos apoyarlas, lo estamos probando a muy pequeña escala”.
El modelo de prestación de servicios financieros, concretamente préstamos, a las empresas de reparto y de transporte por carretera no es nuevo, ya que en los últimos años han surgido nuevas empresas fintech para abordar ese mercado. Entre ellas se encuentra Moove, activa en África.
"Volvemos a nuestro compromiso de asegurarnos de que ese creciente número de conductores pueda contar con apoyo, sus ingresos puedan ser estables y además les funcione financieramente, que es la razón por la que tenemos el bajo porcentaje de aceptación frente a nuestros competidores", dijo Loughran.
A finales del año pasado, inDrive lanzó un programa de 100 millones de dólares para invertir en empresas de mercados emergentes, en un intento de ampliar su presencia allí y apoyar a las empresas más pequeñas. Mientras que inDrive se ha centrado en gran medida en el transporte y las entregas en estas regiones en desarrollo, se lanzó en EE.UU. el año pasado con pasos tentativos en Miami.
InDrive se diferencia de competidores como Uber y Lyft con su modelo de pujas en el que los pasajeros pueden negociar una tarifa para su viaje en lugar de un precio fijo. InDrive se lleva hasta un 10% en concepto de comisión, dependiendo del mercado.
Loughran dijo que la expansión en EE.UU. sigue siendo incipiente, sin planes inmediatos de entrar en otras ciudades. Más bien, la empresa está perfeccionando el negocio de Miami y recopilando datos sobre su rendimiento.
"Han pasado probablemente cuatro meses o algo así [desde el lanzamiento en Miami]. Es un periodo de tiempo, pero no enorme. Creo que tenemos que seguir con ese modelo y, obviamente, analizar si es sostenible. ¿Seguirá creciendo el año que viene con el mismo entusiasmo con el que empezó? ¿Cómo se ve la rentabilidad?", dijo.
"El coste de hacer negocios en EE.UU. es muy diferente al de otros mercados. Esta es nuestra oportunidad de aprenderlo y asegurarnos de que acertamos con toda la oferta".
La empresa no quiso revelar ninguna cifra de conductores o pasajeros en Miami.
Loughran es un antiguo ejecutivo de Microsoft y Honeywell y se incorporó a inDrive en julio de 2023, mientras la empresa recaudaba 150 millones de dólares en financiación hace casi un año para ampliar la huella geográfica del negocio y sus otras verticales, como el reparto.
InDrive no revela cifras de ingresos, pero Loughran afirmó que la empresa se encuentra "en buen camino" hacia la rentabilidad.
“Ahora se trata de que nos aseguremos de alcanzar el nivel de escala adecuado para que la inversión que hemos realizado en nuestras pilas tecnológicas centrales y todo lo demás pueda ser absorbida por el número de viajes. Tenemos un enfoque muy fuerte en eso, estamos ciertamente en el camino hacia eso, así que yo sería positivo sobre nuestro camino hacia eso”.