Las remesas juegan un rol clave en la economía ecuatoriana. Según datos del Banco Mundial y la Cepal el año pasado sumaron cerca de US$ 4.500 millones, lo que representó el 3,8% del PIB. Estos datos los conoce muy bien Juan Carlos Medina, CEO y cofundador de Moneyblinks, una fintech de impacto social que surgió en 2021 y que opera en Ecuador desde el 2022.
Medina suma 30 años de experiencia en temas de finanzas inclusivas, fue vicepresidente de Latinoamérica de Vision Fund y luego de la pandemia decidió apelar a su experiencia para pensar en una fintech de impacto. Para concretar la idea, este ecuatoriano se radicó en Nueva Jersey entre enero y julio de 2021 para conectar con la comunidad de migrantes que reside en esa ciudad. Esa estadía fue determinante.
Vi que los migrantes se consideraban invisibles, con temor de ser deportados. Había que hacer algo por ellos, cuenta en una visita a las oficinas de Forbes Ecuador. Entonces ideó una fintech para canalizar remesas entre Estados Unidos y Ecuador. Primero generamos vínculos con líderes de la comunidad de ecuatorianos en Nueva Jersey, hablamos con ellos y entendimos su problemática como migrantes".
Fue un proceso. En agosto de 2021 Medina y los inversionistas obtuvieron la licencia para operar en Estados Unidos. El siguiente paso fue obtener la autorización del Banco Central del Ecuador. El concepto era nuevo y el área de riesgos del Banco Central revisó todo el proceso para saber que se cumplen todos los requisitos.
La licencia en Ecuador se logró en abril de 2022 y en junio de ese año arrancó un plan piloto con 500 usuarios. Medina explica que en principio la aplicación era de usuario a usuario. Con el tiempo fuimos validando nuevos usos, vimos que la gente encontraba la manera para sacarle el jugo. Ahora la aplicación se usa para transferir remesas a varios miembros de una misma familia, por ejemplo.
El impacto fue evolucionando y ahora Monkeyblinks permite hacer educación financiera, educación técnica y asesoría migratoria. Además ofrece un seguro médico para la familia del migrante, durante un mes. Esos servicios son parte del paquete, explica el CEO.
Moneyblinks está compuesta por dos aplicaciones móviles: una para clientes y otra para corresponsales. Además tiene un core operativo de alta seguridad, desarrollado en la nube de AWS con los mismos estándares de seguridad que usan las instituciones financieras y reguladores en Estados Unidos.
La inversión total en el desarrollo de la aplicación supera los US$ 18,5 millones. El dinero se obtuvo como capital semilla en dos rondas de inversión futura de México y Silicon Valley. Medina añade que el aplicativo permite envíos de hasta US$ 1.000 dólares. Es un envío de remesas de personas, de familias, enfatiza Medina. La comisión para un envío de US$ 1.000 es US$ 8,99. Esa comisión permite la operación de la app. Todo desarrollamos en interno y eso nos permite bajar el valor de la comisión.
En la actualidad la app suma cerca de 2.000 usuarios y la meta es cerrar el año con 10.000. Además Monkeyblinks aspira llegar a mercados como México, Centro América, Colombia, Perú y República Dominicana, que mantienen comunidades de migrantes que en total superan los 40 Millones de personas en Estados Unidos.
La aplicación se puede descargar en las tiendas Apple Store o Google Play. El usuario debe crear una cuenta con su información básica e y su cedula de identidad. Luego la cuenta recién creada es validada y aprobada inmediatamente y la persona puede efectuar envíos y pedidos utilizando su tarjeta de débito, crédito o su cuenta bancaria.
El cliente puede enviar dinero a cualquiera de sus contactos en redes sociales, a cuentas bancarias de familiares, o cualquier persona en Ecuador, con la seguridad de que el dinero se verá reflejado como máximo en 10 minutos en su cuenta bancaria, o cobrar en efectivo a través de la red de Servipagos. Las fintech solo tienen sentido si permiten el acceso a servicios financieros a quienes no los tienen, resume Medina y agrega que confía en que Moneyblinks se convierta en unicornio en unos tres o cuatro años. (I)