A medida que crece la demanda de productos y servicios ecológicos, así como el interés de los consumidores por proteger el planeta, cada vez más empresas buscan reducir su huella de carbono y adoptar prácticas comerciales más ecológicas. Sin embargo, es posible que muchas no sepan por dónde empezar, y ciertos esfuerzos pueden parecer falsos si no se manejan adecuadamente.
Para ayudar, ocho miembros del Young Entrepreneur Council (YEC) recomiendan varias formas en que las empresas pueden comenzar a ser ecológicas y analizan el impacto que puede tener en el éxito general de una compañía.
1. Empezar a pensar cíclicamente
Las empresas pueden pensar cíclicamente en lugar de linealmente cuando se trata de sus propios procesos de producción. Una empresa de fabricación puede analizar honestamente los desechos generados en su producción y pensar en formas de minimizar o reutilizar esos desechos. Si se hace de manera efectiva, la empresa puede aumentar la productividad mientras ahorra dinero. Dada la mayor educación del consumidor sobre la sostenibilidad y su importancia para que nuestro planeta avance, siempre que los esfuerzos sean genuinos y consistentes, una empresa que persigue objetivos sostenibles creará fuertes lazos con los empleados, los clientes y la comunidad circundante.
2. Volverse completamente digital
Si comenzamos a prestar atención, notaremos que las empresas todavía imprimen mucho, incluso hoy en día durante la era digital. No obstante, eso no es necesario en absoluto. Volverse completamente digital es una solución beneficiosa tanto para el planeta como para la empresa, ya que los procesos completamente digitales contribuyen a una mejor organización, más transparencia, transacciones más rápidas y un mejor trabajo al tiempo que contribuyen a reducir un producto altamente consumido para el cual una gran cantidad de recursos naturales se extrae cada año.
3. Identificar una oferta principal más ecológica
Cada negocio es diferente, así que hay que identificar formas de volverse ecológico dentro de las propias operaciones. Por ejemplo, en la industria de recolección de chatarra, se puede donar y reciclar artículos en lugar de tirarlos al basurero. También podemos ir sin papel y tener todo firmado en una aplicación. Si el modelo de negocio tiene que ver con conducir, se debe considerar invertir en vehículos eléctricos. Si se venden productos físicos, hay que utilizar material de embalaje reciclado. Encontrá la única oferta de tu negocio y volvela verde.
4. Incorporar a los socios de la cadena de suministro
Las empresas deben estar dispuestas a invertir en nuevas tecnologías y procesos y trabajar en estrecha colaboración con sus socios de la cadena de suministro para garantizar que la sostenibilidad sea una prioridad compartida. Debés evaluar cuidadosamente a tus socios de la cadena de suministro y seleccionar aquellos que prioricen la sostenibilidad en sus operaciones, como el uso de energía renovable, la minimización de desechos y la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. En última instancia, los beneficios de adoptar prácticas comerciales más ecológicas pueden tener un impacto positivo en el éxito de una empresa, tanto en términos de desempeño financiero como de reputación de marca.
5. Implementar un programa de devolución
Las empresas pueden reducir su huella de carbono y mejorar sus prácticas ecológicas iniciando un programa de devolución. Esto permite a los clientes devolver productos usados a la empresa en lugar de tirarlos, lo que puede ayudar a conservar las materias primas y reducir el daño ambiental. Esto también ayudará a las compañías a mejorar su reputación y atraer clientes conscientes del medio ambiente. Además, la empresa puede ofrecer incentivos para que los clientes aumenten su participación y lealtad a la marca, lo que en última instancia conduce a un aumento de las ventas y la satisfacción del cliente.
6. Cambiar a energía renovable
Cada vez más personas son cada vez más conscientes de la sostenibilidad y eligen comprar de marcas que son ecológicas y contribuyen positivamente a moldear el medio ambiente. Para las empresas que aún no han adoptado procesos sostenibles, esto significa dar un paso atrás y medir la huella de carbono de su empresa. Entonces, el próximo cambio probablemente recomendado es cambiar al uso de energía renovable para operar la empresa. Si tu proveedor actual no ofrece energía renovable, entonces puede ser el momento de considerar elegir uno nuevo que pueda garantizar que tu energía proviene solo de fuentes renovables.
7. Ser completamente remoto
Moverse o regresar a una situación de trabajo remoto predeterminada para todos los empleados que no necesitan estar en el sitio. El trabajo remoto tiene defensores y detractores, pero pocos discutirían la premisa de que es mejor para el medio ambiente. Después de todo, según el lugar donde vivas, incluso los vehículos eléctricos extraen energía de una red "sucia", y el transporte público no tiene cero emisiones de carbono en la gran mayoría de los casos. Por lo tanto, cuanto menos le pidas a tu gente que se mueva entre semana, menor debería ser su huella de carbono, en igualdad de condiciones.
8. Asociarse con organizaciones ecológicas sin fines de lucro
Considero que una buena manera de comenzar a ser más ecológico es trabajar con organizaciones sin fines de lucro que se dedican a promover la sustentabilidad. Las empresas pueden asociarse con estas organizaciones para obtener más información sobre las mejores prácticas para reducir su huella de carbono y adoptar prácticas comerciales sostenibles. En muchos casos, estas organizaciones sin fines de lucro pueden encontrar materiales, productos y servicios de suministro alternativos que sean mejores para el medio ambiente. Un impacto positivo es que una empresa puede aprovechar la reputación de la organización sin fines de lucro al asociarse con ellos.
*Nota publicada en Forbes US