16 años dentro de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y una vida realizada en Ginebra, Suiza, son algunos de los logros más grandes de Simón Oswaldo Padilla Moreno, quien visitó nuestro país y pasó por las oficinas de Forbes Ecuador para compartir sus experiencias dentro de una organización internacional. A pesar de que nació en Suiza se define como un ecuatoriano de corazón. Su madre era funcionaria de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y fue una coincidencia que naciera en aquel país. Sin embargo, vivió en nuestras fronteras la mayor parte de su vida y se graduó del Colegio La Condamine en Quito.
“Mis papás son economistas y es lo único que vi en mi casa. Me gustaban los números y era una carrera que me abría muchas oportunidades. No estaba seguro de orientarme por las finanzas o la economía internacional, pero al final esta última me cautivó”. Obtuvo su título como economista en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, realizó unas cortas pasantías en una consultora nacional y se embarcó en un viaje que le cambió la vida.
La Cooperación Belga para el Desarrolló le otorgó una beca para estudiar una maestría en Economía Internacional y Desarrollo en la Universidad Católica de Lovaina, en Bélgica. Luego, la misma institución, le permitió estudiar otra maestría en Economía pura. Padilla rememora que fue una época de muchos aprendizajes y siempre quiso quedarse un tiempo en Europa. El plan inicial era hacer unas pasantías, ganar un poco de experiencia y regresar a Ecuador. No contaba con que la Organización Mundial del Comercio le abra sus puertas para comenzar con una exitosa carrera internacional.
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Padilla ingresó como pasante en la división de investigación económica en Ginebra. Trabajó en algunos proyectos que le permitieron ingresar oficialmente a este organismo, que se ocupa de las normas que rigen el comercio entre los países. La OMC tiene diversas funciones, entre las más importantes están: administrar el sistema mundial de normas comerciales y brindar soluciones para las diferencias comerciales entre sus miembros. Actualmente, la lista supera los 160 miembros que representan el 98 % del comercio mundial.
Este aficionado al deporte y a las caminatas al aire libre, tiene 46 años y se desempeña como Oficial de Asuntos Económicos. “Me moví a la división de Agricultura y Productos Básicos, que (en ese entonces) estaba impulsando un mecanismo para el apoyo y la asistencia técnica sobre los acuerdos de medidas sanitarias y fitosanitarias para países en desarrollo”. Padilla era uno de los cuatro profesionales que ayudaban a que estas economías cumplan con las normas sanitarias para exportar sus productos a diversos destinos. Hoy, este equipo creció a 15 personas y nuestro entrevistado es el segundo al mando.
El objetivo principal del Fondo para la Aplicación de Normas y el Fomento del Comercio es financiar. Hasta el momento ha movilizado más de US$ 100 millones en 250 proyectos, beneficiando a más de 100 países en todos los continentes. “He visto crecer a este mecanismo y hoy manejo el portafolio de todos los proyectos a escala mundial. Funcionamos bajo demanda, los países nos envían sus ideas, vemos si son elegibles y les ayudamos a ejecutarlas”.
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Padilla comenta que, por ejemplo, en Ecuador trabajan a través de Agrocalidad y tienen un plan en marcha para que los productores de cacao puedan cumplir con las exigencias de cadmio en Europa. “También trabajamos con agencias de Gobierno u otras organizaciones como el IICA, la FAO o la OMS. El dinero que recibimos llega de donantes (países desarrollados) y solo apoyamos proyectos pequeños de hasta un millón de dólares y de máximo tres años de duración”.
Este ecuatoriano maneja a la perfección el inglés, el francés y el español. Su cobertura es global. Un día puede estar trabajando con un país de Centroamérica y al siguiente con uno de África. Su meta es ayudar e impulsar el comercio en países como el nuestro, donde cumplir con las normas internacionales puede ser una tarea más complicada.
Para terminar la entrevista, Padilla asegura que nunca dejará de visitar Ecuador y espera tener uno o dos años sabáticos para regresar y apoyar con capacitaciones en nuestro territorio. Por el momento, espera continuar crecimiento dentro de la OMC, de la mano de su esposa, sus dos hijos y su perro Rex. (I)
