Los expertos de BlackRock, la gestora de fondos más grande e importante del mundo, se volvieron bajistas con algunos bonos del Tesoro de Estados Unidos por la incertidumbre sobre la política monetaria de la Reserva Federal (Fed).
En concreto, cambiaron la calificación de los títulos de corto plazo de "sobreponderar" a "infraponderar" porque resulta poco probable que el alcance de los recortes de tasas de interés por los que está apostando el mercado se materialice.
Según la principal estratega Wei Li, las especulaciones de que la Fed esperó demasiado tiempo para flexibilizar su política y ahora está obligada a hacerlo aceleradamente para impulsar la economía son infundadas.
"Creemos que los mercados están exagerando un poco al estimar la profundidad del ciclo de recortes de tasas. El ciclo de recortes está comenzando, pero tal vez no tan profundo como los mercados parecen estar estimando", indicó Li, quien agregó que espera que el primer recorte sea de sólo 25 puntos básicos.
A día de hoy, los swaps ligados a la decisión de la Fed del miércoles reflejan una probabilidad superior al 50% de un recorte de medio punto, después de haber descartado casi por completo esa posibilidad la semana pasada. Los inversores están anticipando aproximadamente 118 puntos básicos de recortes para finales de diciembre. Para finales de 2025, proyectan que la tasa de referencia esté por debajo del 3%, frente al 5,25-5,50% actual.
En este contexto, el rendimiento de los bonos del Tesoro a dos años, sensible a la política monetaria, cotizó este lunes cerca de su nivel más bajo desde septiembre de 2022. Aún así, Li no se mostró tentada con esta caída. En cambio, la especialista favoreció la deuda con vencimiento intermedio, en el rango de cinco a diez años, por sus retornos relativamente altos.
Por último, señaló que, aunque los riesgos de recesión pudieron haber aumentado, su hipótesis base continúa siendo que la economía estadounidense se desacelerará en lugar de contraerse. Además, mencionó que los responsables de la política siguen siendo cautelosos ante la "persistente" inflación.