Poco a poco, debido a la suba de tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) y otros bancos centrales mundiales, la inflación está retrocediendo desde los preocupantes máximos del 2022. Sin embargo, todavía sigue “alta”. Aún asi, las empresas de envíos de comida están teniendo un muy buen comportamiento bursátil, lo que no sucede con sus pares de consumo discrecional.
De acuerdo a Jim Cramer, exgestor de fondos de cobertura y actual presentador de Mad Money, el programa financiero de CNBC, la razón del buen desempeño es que la entrega de alimentos a domicilio ya se convirtió en un hábito que los consumidores no quieren romper y por el que están dispuestos a pagar más.
"DoorDash, Uber Eats e Instacart solo pueden presentar cifras como estas porque la entrega de comida a domicilio se convirtió en un hábito arraigado para muchos consumidores, personas que valoran su tiempo tanto como su dinero”, dijo Cramer en referencia a los buenos balances trimestrales de las compañías. “No es de extrañar que la gente no tenga dinero extra para gastar: lo gastan todo en DoorDash”, ejemplificó.
En las últimas semanas, tanto DoorDash como Uber Technologies y Maplebear, empresa matriz de Instacart, superaron cómodamente las expectativas de Wall Street en cuanto a ingresos y beneficios. Y durante la conferencia telefónica con accionistas, Tony Xu, director ejecutivo de DoorDash, mencionó que la retención y la frecuencia eran tan buenas como durante la pandemia.
Por su parte, Dara Khosrowshahi, director de Uber, coincidió en que la entrega de comida a domicilio se convirtió en un hábito muy arraigado para los consumidores. Además, señaló que, cuando el mercado laboral se debilita, más gente quiere manejar un auto para Uber o Uber Eats, lo que también mejora el servicio.
"La gente parece ver la entrega a domicilio como una necesidad más que como algo discrecional, por lo que estas empresas pueden ofrecer grandes cifras cuando los restaurantes tienen dificultades”, concluyó Cramer.