La vida es cuanto menos inesperada. Por eso, hay que ser precavidos y tener unos ahorros que nos cubran las espaldas en las ocasiones que los necesitamos. Sabemos que tenemos que ahorrar, pero ¿cuándo y cuánto? La buena noticia es que si te estás estresando sobre la incertidumbre de si estás ahorrando o no de la forma correcta, significa que estás ahorrando.
Por eso, debes tener en cuenta que hay que priorizar ciertas situaciones a la hora de ahorrar. No tiene que ser todo o nada, tienes que administrarte tus finanzas como creas que es correcto. Pero puedes tener en cuenta estas situaciones para saber dónde poner tus ahorros y dónde no hacerlo.
Fondo de emergencia
Es importante que contemos con un fondo de emergencia en caso de vernos en una situación de desempleo, enfermar, o simplemente si necesitamos realizar un gran gasto. Pero debe ser simplemente efectivo, no inversiones, porque entonces no habrá liquidez y no se contará con la inmediatez que debe caracterizar a este fondo.
Jubilación
Ya sabemos cómo se encuentra las situación de las pensiones. Es recomendable ahorrar el 15% del total de nuestros ingresos para asegurarnos una jubilación agradable y, sobre todo, segura.
Pago de deudas
Aquí se complica la situación. Saldar las deudas es una de las prioridades que deberíamos afrontar, porque siempre va a más y a peor. Sobre todo si contamos con tarjetas de crédito, por ejemplo. Simplemente si hacemos algo tan cotidiano como pagar una hipoteca, o si alguien nos ha avalado. Debe ser una de nuestras prioridades. Por eso es importante crear un plan del pago de deudas e ir siguiéndolo mediante un ahorro mensual.
*Nota publicada en Forbes España