En sus tres últimas reuniones, la Fed subió sistemáticamente los tipos 0.75 puntos porcentuales. Con la decisión de septiembre ya tomada, restan dos reuniones más en este 2022, que están previstas para el 2 de noviembre y el 14 de diciembre. La Fed es libre de fijar los tipos cuando quiera, pero normalmente se ciñe al calendario de reuniones, a menos que las noticias económicas sean extremas.
Ninguna de las dos reuniones que se avecinan sorprenderán mucho a los mercados, ya que se espera una subida de tipos en ambas. Aun así, se seguirán de cerca los comentarios que puedan llegar a surgir sobre las direcciones del 2023, especialmente con la actualización de las proyecciones económicas de la Fed.
No hay reunión de la Fed en octubre
En primer lugar, no hay ninguna reunión programada para octubre, aunque las actas de la reunión de septiembre se publicarán aquí el 14 de octubre. Esas actas pueden ofrecer más color sobre el pensamiento de la Fed. La Fed suele celebrar ocho reuniones de decisión de política monetaria al año, por lo que hay cuatro meses en los que no se reúne. Octubre es uno de ellos.
Reunión de la Fed del 2 de noviembre
La Fed fijará los tipos el 2 de noviembre. Los mercados de renta fija implican una subida de entre 0,5 y 0,75 puntos porcentuales en esa reunión. Para ello se tendrán en cuenta una serie de datos económicos de octubre. Lo más importante es que tendremos una serie de datos recientes sobre la inflación, como las cifras del IPC, el IPP y el CPE, que nos llevarán a esa reunión.
Los datos de la inflación son importantes
Esto se debe a que, aunque la Fed tiene una gran cantidad de métricas que vigilar, la inflación es actualmente, con mucho, la principal preocupación de la Fed. En la reunión de noviembre no habrá una actualización de las proyecciones económicas ni una conferencia de prensa, ya que eso sólo ocurre cada dos reuniones. Espere menos color de la Fed en esta reunión y más detalles en diciembre.
Interpretación de los próximos datos de inflación
Con las próximas cifras de inflación antes de la decisión de noviembre, cuanto más baja sea mejor. Sin embargo, la Fed tenderá a mirar más allá.
La Fed ha sido clara al afirmar que las tendencias observadas en los precios, especialmente a partir de los datos del IPC de agosto publicados en septiembre, siguen implicando una inflación en Estados Unidos muy por encima del objetivo del 2% de la Fed. En la actualidad, la inflación anual del IPC se sitúa en términos generales en el 8%.
Expectativas del mercado
Tanto en los mercados de renta fija como en las encuestas de expectativas de inflación existe una expectativa implícita de que las cifras de inflación se volverán más tranquilizadoras en los próximos meses.
Obviamente, la Fed no ha visto todavía esos datos y se mantiene cauta porque no quiere correr riesgos innecesarios de que la inflación se adelante al objetivo durante más tiempo del necesario. Por supuesto, la otra cara de la moneda es que los mercados podrían estar equivocados aquí y, si lo están, podría haber más dolor para los inversores a medida que el año 2022 se acerca a su fin.
Reunión de la Fed del 14 de diciembre
Los mercados anticipan actualmente un movimiento al alza de entre 0,25 y 0,5 puntos porcentuales el 14 de diciembre. Esto supone que los tipos terminarán el año en un rango del 4% al 4,5%.
Esto es algo en lo que parecen estar de acuerdo tanto los mercados financieros como las previsiones de los responsables de la política de la Fed en el momento de escribir este artículo, aunque los mercados y al menos un responsable de la política de la Fed, ven una pequeña posibilidad de que los tipos puedan subir un poco más.
Diciembre está lo suficientemente lejos como para que la Fed pueda cambiar un poco el plan aquí. Hay alguna posibilidad de que la Fed lleve a cabo una subida mayor de la prevista si los datos de inflación en el periodo previo a la reunión no dan ninguna señal alentadora de que la subida de precios está empezando a remitir.
Si ese fuera el caso, es probable que los funcionarios de la Fed pronuncien nuevos discursos que indiquen una mayor preocupación por la inflación en el período previo a la reunión de diciembre, en la línea del discurso de Powell en Jackson Hole en agosto de 2022.
Si vemos una racha realmente alentadora de cifras de inflación, la Fed también podría realizar una subida menor de la esperada, quizá de sólo 0,25 puntos porcentuales, aunque el mercado lo ve menos probable actualmente. Así pues, la cuestión es realmente el tamaño de la subida para la reunión de diciembre. Es poco probable que la Fed, basándose en sus comunicaciones actuales, llegue al punto de querer mantener los tipos estables o bajarlos.
Proyecciones para 2023
En diciembre, la Fed actualizará su Resumen de Proyecciones Económicas y también celebrará una conferencia de prensa, lo que podría dar más pistas sobre cómo puede evolucionar la política en 2023 y cómo ve la Fed las posibilidades de una recesión en Estados Unidos.
Actualmente, las proyecciones de la Fed muestran un aumento del desempleo que sugiere una fuerte posibilidad de recesión en 2023 y algunos responsables políticos prevén una recesión en 2023 de forma más directa en sus proyecciones de crecimiento económico. También hay alguna posibilidad de que Estados Unidos esté en recesión actualmente, dado el estancamiento del crecimiento económico en lo que va de 2022. Veremos la primera estimación del crecimiento del PIB del tercer trimestre en EE.UU. el jueves 27 de octubre.
Vigilando la inflación
Es posible que la Fed no cambie mucho el guión a medida que se acerca el final de 2022. Los banqueros centrales pretenden evitar las sorpresas, y la Fed dedica mucho tiempo a dirigir los mercados a través de sus comentarios y discursos para mantener las cosas estables y predecibles.
Sin embargo, los datos sobre la inflación serán observados muy de cerca y determinarán el libro de jugadas de la Fed en 2023. En las últimas reuniones de 2022, a menos que haya sorpresas dramáticas, lo que habrá que vigilar serán las pistas de Jerome Powell y otros sobre cómo pueden desarrollarse las cosas en 2023.
La otra cara de la moneda es el riesgo de recesión. Por ahora, la Fed se preocupa más por combatir la inflación ya que la economía estadounidense, y especialmente la situación del empleo, es razonablemente fuerte. Si eso cambia, la Fed tendrá que hacer más equilibrios.
Por último, tenga en cuenta que el mercado probablemente ha tenido en cuenta en gran medida las nuevas subidas de tipos previstas para 2022 en este momento. Lo que más probablemente movería a los mercados son los posibles ajustes de los planes de la Fed, o más detalles sobre 2023, donde el mercado está menos seguro de cómo se desarrollará la política monetaria.