Si bien la invasión rusa de Ucrania provocó un aumento en los precios del petróleo que sacudió los mercados, las acciones de energía como Occidental Petroleum, Chevron y Exxon Mobil; han superado ampliamente al resto y los analistas predicen que vendrán más oportunidades.
Los precios del petróleo han seguido disparándose esta semana (antes de moderarse un poco el miércoles) alcanzando un máximo de casi US$ 130 por barril después de que el presidente Joe Biden anunciara la histórica prohibición de las importaciones de petróleo ruso.
Muchos analistas predicen que las empresas de petróleo y gas, muchas de las cuales vieron cómo sus acciones tuvieron un rendimiento superior en lo que va del año, están preparadas para una mayor subida a medida que se benefician del aumento sostenido y rápido de los precios de la energía.
Con los analistas todavía optimistas sobre el sector, los inversores minoristas han estado acumulando acciones de energía a un ritmo rápido, con las mejores opciones que incluyen empresas como Exxon Mobil (cuyas acciones representan el 35% este año), Chevron (hasta un 40 %), Marathon Petróleo (hasta un 40%) y Devon Energy (hasta un 31%).
Las acciones de Occidental Petroleum, una de las favoritas del legendario inversionista Warren Buffett, han subido casi un 10o% en 2022, aumentando un 50% solo en las últimas dos semanas después de que la invasión rusa de Ucrania provocara un incremento en los precios de la energía.
Las acciones de Valero Energy, con sede en San Antonio, Texas, que recientemente han sido muy recomendadas por analistas como Morgan Stanley y Barclays, subieron casi un 20% este año en medio del aumento de los precios del petróleo
El conglomerado inversor del multimillonario Warren Buffett, Berkshire Hathaway, duplicó recientemente las acciones de Chevron y reveló una participación de casi el 10% en Occidental Petroleum, por un valor de aproximadamente US$ 5 mil millones, según muestran documentos recientes. Buffett es la quinta persona más rica del mundo, con un patrimonio neto de US$ 117.800 millones, según estimaciones de Forbes.
El conflicto en curso entre los principales exportadores, Rusia y Ucrania, ha causado estragos en los mercados energéticos mundiales, que ya enfrentaban un suministro limitado desde el mes pasado.
