Se acerca el fin de semana y una de las mejores formas de aprovecharlo para descansar es mirando películas. Y para aquellos amantes de las finanzas que no quieren (o no pueden) desconectarse del tema, nada mejor que arrancar con una maratón de cuatro entretenidas películas sobre Wall Street.
El lobo de Wall Street
El lobo de Wall Street (The wolf of Wall Street, 2013), dirigida por Martin Scorsese y protagonizada por Leonardo DiCaprio, narra el ascenso y la caída de Jordan Belfort, el famoso estafador financiero del mercado accionario que triunfó en la década de 1980.
A lo largo de sus tres horas de duración, la película introducirá al espectador en un mundo de dinero, codicia y excesos que, sorprendentemente, fue completamente real.
La gran apuesta
La crisis financiera del 2008 fue tan importante a nivel global como compleja. Afortunadamente, La gran apuesta (The big short, 2015) explica a la perfección qué fue lo que sucedió y por qué.
La película sigue a un grupo de operadores y ejecutivos financieros, caracterizados por Steve Carell, Christian Bale, Ryan Gosling y Brad Pitt, que detectaron a tiempo la burbuja inmobiliaria de aquel entonces y pudieron actuar exitosamente en consecuencia.
El precio de la codicia
Por su parte, El precio de la codicia (Margin call, 2011) también habla sobre la crisis del 2008, pero desde el punto de vista de una empresa de Wall Street que está al borde del colapso.
Para muchos, se trata de la película financieramente más precisa. Pero no por eso es aburrida: está repleta de intriga, drama y hasta algunos toques de comedia.
Wall Street
Wall Street (1987) es un clásico dirigido por Oliver Stone y protagonizado por Michael Douglas y Charlie Sheen que sigue el camino de Gordon Gekko, un superinversor que realiza maniobras sin escrúpulos para ganar dinero en los mercados.
A casi 40 años de su estreno, es considerada una de las mejores películas de este subgénero, y una fuente de estudio para muchos recién llegados al mercado.