En el mundo de las recompras de acciones, las compañías Apple y Berkshire Hathaway de Warren Buffett están alineadas en sus estrategias.
A lo largo de más de una década, Apple mantuvo su histórico plan de recompras, desembolsando más de US$ 573.000 millones desde 2012. A pesar de un tercer trimestre consecutivo de disminución de ingresos, en su periodo más reciente, Apple gastó otros US$ 18.000 millones en este mecanismo.
Esto está demostrando ser fructífero para Berkshire Hathaway. Warren Buffett respaldó abiertamente el programa de recompra constante de Apple, afirmando que "aumentó un poco la propiedad de Berkshire sin ningún costo” para ellos. La estrategia matemáticamente sólida de disminución del número de nominales en circulación enriqueció la cartera del legendario inversor, incrementando su interés en diversos negocios.
Buffett fue un firme defensor de las recompras, incluso en medio de la oposición política en Washington, incluida la propuesta de aumento de impuestos por parte del presidente Biden. En su carta anual, el magnate enfatizó en que las afirmaciones en contra de las autoadquisiciones suelen provenir de personas con una comprensión limitada de la economía.
Actualmente, una notable parte, el 46%, de la cartera de Buffett se concentra en acciones de Apple. A pesar de las críticas que rodean las recompras y su impacto en la inversión en desarrollo de productos, las acciones de la tecnológica beneficiaron a Buffett y a otros inversores.
Aunque las cifras de recompra fueron impresionantes, como los US$ 56.000 millones en los últimos nueve meses, algunos expertos consideran que el efecto puede ser neutro en términos teóricos. Sin embargo, con el crecimiento constante de Apple y su enfoque en esta estrategia como una forma de desplegar capital, es probable que continúe robusta, independientemente de los desafíos de ingresos.
La técnica también afectó positivamente al mercado, con las acciones de Apple en alza. Michael Roberts, de Wharton School, indicó que, en promedio, las recompras impulsan el precio de las acciones y que empresas tecnológicas como Apple tienen la necesidad de devolver el dinero a los inversores de esta forma.
Aunque las críticas políticas pueden persistir, es importante reconocer que tanto Berkshire Hathaway como Apple tienen una base de inversores minoristas, y su enfoque en recompras refleja la confianza en el modelo a largo plazo. Estas acciones no solo ayudaron a Buffett, sino que contribuyeron al atractivo de Apple entre inversores de todos los niveles.