Nuevamente, un resultado electoral imprevisto sacudió al mercado financiero argentino que abrió este lunes con un gran pesimismo y fuertes correcciones en todos sus activos. A la luz de los hechos, los agentes financieros veían con mejores perspectivas un cambio de signo político, aún con la incertidumbre que transmitía el programa de Javier Milei.
Luego de una baja inicial, el dólar volvió a saltar un 16% para cotizar en $1050 en el segmento blue y un 6,7% en el MEP que llega a $960. Por su parte, el CCL se contrae un 2,25% y opera a $991,25.
En tanto, las acciones del Merval caen hasta un 10% y los ADRs argentinos en Wall Street se contraen hasta un 6% con casos como los de YPF (-6,18%) y Central Puerto (-6,29%). Los bonos, por su parte, también registran fuertes caídas de hasta el 12% con el movimiento inverso del riesgo país que sube hasta los 2582 puntos básicos.
“Es una reacción lógica a un resultado que no estaba en los precios. Tuviste una corrida del peso argentino por miedo a que, si Milei ganaba, dolarice a cualquier valor y muchos de esos activos habían subido por eso. Ya sea dólares, bonos linked, acciones o bonos en dólares. Cualquier cosa que te cubra de una dolarización. Como ese escenario se alejó, hoy tuviste el mercado corrigiendo expectativas”, indicó el analista Christian Buteler.
El analista Francisco Uriburu interpretó que “los mercados están muy asustados porque Massa ha demostrado un manejo económico ineficiente para detener la hiper estanflación en curso. Ante la ausencia de planes de estabilización o nuevas medidas, el mercado reacciona negativamente”.
De la misma forma, el analista subrayó que la plaza local también se vio afectada “el proceso de ajuste internacional debido a la reunión de la FED que podría devenir en otro aumento de tasas de interés que impactaría de forma directa a la Argentina por el tamaño de su deuda”.
Fuentes del mercado que operan en otros distritos como Uruguay y Estados Unidos contaron a Forbes que durante la mañana recibieron múltiples llamados de inversores argentinos que, desanimados por el panorama político, buscan radicarse en el exterior.
“La economía argentina sigue estando totalmente rota. Vos seguís teniendo los mismos desequilibrios que tenías hasta el viernes y ahora, con un triunfo de Massa, no tenés ningún incentivo a corregir esos desequilibrios”, dijo Buteler.
Algo menos pesimista, Sebastián Maril, de Latam Advisors, aseguró que “los inversores piensan que Massa es más de Alberto Fernández y yo creo que se equivocan. Massa puede darles suficientes motivos para cambiar la tendencia”.
En la misma línea, el consultor Rubén Ullúa manifestó que “esta reacción negativa no altera la tendencia positiva de fondo. Yo sigo siendo optimista independientemente de quién vaya a ser presidente. Sigo pensando que, aun cuando tengamos un mes de indefiniciones, lo que está ocurriendo es algo temporal y el mercado va a volver a una tendencia alcista”.
No obstante, de cara al ballotage y hasta que asuma el nuevo Gobierno y muestre acciones concretas, según Ullúa, “van a venir jornadas de volatilidad y van a depender mucho de lo que diga Massa”.