En una semana ya difícil, Coinbase sufrió otro golpe cuando la agencia de calificación crediticia S&P Global dijo en una nota este jueves que la perspectiva para el gigante de las criptobolsas era "negativa".
S&P Global redujo la calificación crediticia de emisor a largo plazo de Coinbase y las calificaciones de deuda sénior no garantizada a BB desde BB+, citando "ganancias débiles y presión competitiva".
"El riesgo competitivo se ha intensificado en el sector de las criptobolsas, y la participación de mercado de la empresa ha disminuido este año", escribió S&P Global.
"Creemos que, como resultado de la erosión de la participación de mercado y un mayor riesgo de compresión del margen, las variaciones cíclicas (cambios de pico a mínimo en los ingresos, EBITDA y margen de EBITDA) para Coinbase han superado nuestras expectativas anteriores, lo que nos lleva a revisar nuestro evaluación del riesgo financiero”.
La agencia de crédito dijo que su evaluación también reflejaba “incertidumbres sobre la duración del actual mercado bajista de criptomonedas y ”el potencial de un mayor deterioro de la cuota de mercado".
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Las acciones de Coinbase cerraron el jueves a US$ 84 por acción, una caída de más del 10%. Sus acciones alcanzaron un máximo de más de US$ 350 el otoño boreal pasado.
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La nota de S&P llega dos días después de que Coinbase informara una disminución de casi el 30 % en el volumen de operaciones, de US$ 309 millones en los primeros tres meses de 2022 a US$ 217 millones en su segundo trimestre, y no alcanzara las expectativas de ingresos del consenso.
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El intercambio registró una pérdida neta de US$ 1100 millones durante el trimestre, frente a una pérdida de US$ 430 millones en el primer trimestre.
En su informe trimestral, Coinbase reveló que los reguladores de valores de EE. UU. están investigando sus procesos de listado de tokens, así como sus programas de participación y productos generadores de rendimiento.
