El profesor y empresario de la Escuela de Medicina de Harvard, Tim Springer, quien se convirtió en multimillonario como resultado de su inversión inicial en el fabricante de vacunas Moderna, ha donado US$ 210 millones al Instituto para la Innovación de Proteínas (IPI), una organización de investigación sin fines de lucro con sede en Boston centrada en la ciencia de las proteínas.
El instituto anunció el regalo el miércoles, aunque Springer, su esposa Chafen Lu y sus hijos hicieron la donación en diciembre de 2020. Springer, de 75 años, es un inmunólogo que lleva 46 años en Harvard, donde es profesor de química biológica y farmacología molecular. Tiene un valor de US$ 1.9 mil millones según las estimaciones de Forbes y cofundó el IPI en 2017 al cual previamente donó US$ 40 millones.
"Fundé IPI con la premisa de que una fundición de herramientas de proteínas y, lo que es más importante, de anticuerpos, ayudaría a los científicos a hacer descubrimientos, y posiblemente nuevas terapias, en los años venideros; mi donación ayudará a hacer realidad esta visión", dijo Springer en un comunicado. Y agregó al respecto: "IPI es mi proyecto heredado y reconoce el papel que los anticuerpos monoclonales han jugado en mi descubrimiento e investigación básica".
IPI se enfoca en proporcionar anticuerpos y herramientas basadas en proteínas a la comunidad científica. La organización crea proteínas y anticuerpos sintéticos (en lugar de utilizar anticuerpos adquiridos de ratones y animales de laboratorio) y los vende a investigadores científicos.
Con US$ 5 millones, Springer fue un inversionista fundador en Moderna, y cuando la compañía se hizo pública en diciembre de 2018, poseía poco más del 5% de sus acciones. Un esfuerzo empresarial anterior le había proporcionado a Springer los fondos para invertir en Moderna. Fundó la empresa de biotecnología LeukoSite en 1993, la hizo pública en 1998 y la vendió a Millenium Pharmaceuticals al año siguiente por 635 millones de dólares en acciones. Springer obtuvo alrededor de US$ 100 millones en acciones de Millenium del acuerdo.
Springer decidió lanzar el instituto después de una beca posdoctoral en la Universidad de Cambridge, en Inglaterra, con César Milstein, un bioquímico argentino que recibió el Premio Nobel por su trabajo con la tecnología de anticuerpos. Springer continuó construyendo sobre sus descubrimientos una vez que regresó a los Estados Unidos, pero dice que la tecnología solo estaba disponible en empresas con fines de lucro, lo que lo inspiró a expandirse al sector sin fines de lucro.
El presidente y director ejecutivo de IPI, Ken Fasman, llama a la donación "transformadora" y agregó que la organización ahora "podrá abordar problemas más desafiantes en la ciencia de las proteínas que la academia y la industria no pueden o no".
Springer, que forma parte del directorio de IPI, ha estado involucrado durante mucho tiempo en la industria biotecnológica. Además de su participación fundadora en Moderna, posee participaciones en Selecta Biosciences, Scholar Rock y Morphic Therapeutic. También es el fundador e inversor de dos empresas privadas, Seismic Therapeutics y Tectonic Therapeutics.
IPI no es el único esfuerzo filantrópico de Springer ya que también ha creado cátedras en la Escuela de Medicina de Harvard, el Hospital Infantil de Boston y la Universidad de California, Berkeley.
Springer es uno de los pocos profesores seleccionados que se han convertido en multimillonarios. Robert Langer, profesor de ingeniería química del MIT, también se convirtió en multimillonario en 2020 gracias a su inversión en Moderna. David Cheriton, profesor de informática en la Universidad de Stanford, se convirtió en multimillonario como resultado de una inversión inicial en Google .
*Nota publicada originalmente en Forbes Estados Unidos.