A través de un tweet, Bill Ackman, el multimillonario a cargo de Pershing Square Capital, uno de los fondos de cobertura más importantes del mundo, explicó cuáles fueron sus tres mejores inversiones y qué aprendió de ellas.

“Las mayores oportunidades para el descubrimiento, la innovación, la comprensión y los beneficios a menudo existen en los caminos inexplorados, las preguntas no formuladas ni respondidas, y en las posibilidades improbables”, expresó el inversor.

Posteriormente, detalló que sus mejores negocios fueron en las acciones de una empresa de bienes raíces en quiebra, apostando a que una compañía con calificación triple A era insolvente y especulando con que “un virus en China” causaría un cierre económico mundial.

Según se informó en documentos oficiales, Ackman ganó US$ 800 millones en 2009 en la apuesta contra la empresa de propiedades, obtuvo US$ 1.400 millones luego de vender en corto a la mayor aseguradora de bonos MBAI ese mismo año y convirtió US$ 27 millones en US$ 2.600 millones al apostar a que la pandemia de coronavirus haría colapsar al mercado de valores en 2020.

“Cada una de estas inversiones fue recibida con escepticismo extremo en el momento en que se realizaron. En cada caso, nosotros fuimos los ingenuos cuando hicimos estas inversiones. No éramos inversionistas en quiebra, expertos en aseguradoras de bonos o swaps de incumplimiento crediticio, ni sabíamos algo sobre virus o pandemias”, comentó Ackman.

Y añadió: “He aprendido por experiencia que los expertos, el gobierno y la sabiduría convencional a menudo se equivocan. 'La inflación es transitoria'. 'C19 no escapó del laboratorio de Wuhan'. 'Ucrania caerá en menos de una semana'. 'No es posible porque no se ha hecho antes o porque no ha sucedido antes'…”.

“A menudo, es el atípico sin experiencia en un campo el que desafía el statu quo, el que hace el descubrimiento importante, el que tiene la visión única o crea la innovación transformadora”, concluyó el gestor de fondos.