Derek Saul Redactor
Elon Musk, el hombre más rico del mundo, se volvió todavía más rico este miércoles, después de que las acciones de Tesla (su empresa automotriz) se disparen tras la presentación de resultados del primer trimestre.
Aunque los números financieros no trajeron buenas noticias, lo que sí generó entusiasmo en los inversores fue algo que esperaban hace meses: Musk volvió a comprometerse con Tesla, tras dedicar casi todo su tiempo a la Casa Blanca.
Un salto multimillonario gracias a un cambio de rumbo
El patrimonio neto de Musk creció en 9.800 millones de dólares y alcanzó los 371.400 millones, según las últimas estimaciones de Forbes, lo que amplió a 170 mil millones la diferencia con el segundo empresario más rico del mundo, Jeff Bezos, fundador de Amazon.
El salto se dio luego de que las acciones de Tesla crecieron un 7% hasta los 254 dólares, impulsadas por el informe del martes a última hora, que en términos financieros fue flojo: tanto las ganancias como los ingresos quedaron por debajo de las expectativas y marcaron mínimos de varios años.
La reacción del mercado
Tesla también se benefició de un repunte generalizado del mercado, vinculado a la decisión del presidente Donald Trump de bajar el tono en su conflicto comercial con China y a su marcha atrás en la amenaza de despedir al titular de la Reserva Federal, Jerome Powell.
El Nasdaq, dominado por empresas tecnológicas, subió un 3%. Pero el impulso más importante vino de Musk, que reafirmó su compromiso con la firma.
El "Mea culpa" del CEO
El CEO de Tesla adoptó un tono reflexivo durante la conferencia con inversores, según los analistas de Evercore ISI liderados por Chris McNally. En ese sentido, Musk aseguró que va a "asignar mucho más" de su tiempo a Tesla a partir del mes que viene.
Eso fue música para los oídos de muchos inversores y analistas, que venían mostrando preocupación por el tiempo que Musk le dedica a su rol como jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), y por el impacto negativo que su exposición política tiene en la imagen de Tesla, generando rechazo en posibles compradores.
Además de su vuelta al foco en Tesla, el anuncio de que el robotaxi (el modelo sin conductor) será lanzado en junio, y que ya arrancó la producción de autos eléctricos de bajo costo en la primera mitad del año, también empujaron la suba de las acciones, según el analista Ronald Jewsikow, de Guggenheim.
Musk se queda cerca del poder
"Voy a seguir dedicando uno o dos días por semana a temas de gobierno, mientras el Presidente quiera que lo haga", afirmó Musk durante la llamada con inversores.
Si bien describió a Tesla como "la automotriz menos afectada" por los aranceles de Trump, el asesor presidencial volvió a dejar en claro que no está de acuerdo con esa política comercial. "Lo dije muchas veces: creo que los aranceles bajos son, en general, una buena idea para fomentar la prosperidad", sostuvo Musk. Reconoció que esa "decisión depende fundamentalmente de Trump". Y agregó: "Voy a seguir abogando por aranceles más bajos, no más altos, pero eso es todo lo que puedo hacer", y se encogió de hombros.
Las acciones de Tesla siguen casi un 40% abajo en lo que va del año, mucho más que la caída del 8% del índice S&P 500, en medio de la incertidumbre generada por los constantes cambios en la política arancelaria de Trump y el temor a una recesión.
Musk donó 288 millones de dólares a las campañas de reelección de Trump, convirtiéndose en el mayor aportante de la campaña presidencial de 2024. Su rol como jefe de DOGE (desde donde impulsó recortes masivos de gasto público y despidos en el gobierno federal) generó fuertes críticas a Tesla, cuyos números de ventas globales cayeron mientras crecían las protestas y los actos de vandalismo.
Además de sus cargos en DOGE y Tesla, Musk también dirige la compañía aeroespacial SpaceX, la startup de inteligencia artificial generativa xAI, y otras empresas más.
Previo a la reconfirmación del compromiso de Elon Musk con Tesla, la compañía estaba en una situación de "código rojo", según advirtió el analista Dan Ives, de Wedbush.
Nota publicada en Forbes US.