Confiesa que alguna vez se inspiró en el chocolate para armar la colección de un desfile. “Pero todos los diseños estaban confeccionados a partir de géneros y bordados no comestibles. Ahora, la idea fue hacer un homenaje al talentoso y creativo Paco Rabanne, de pensamiento tan transgresor para su época, y decidimos hacer un vestido de chocolate. Sí, literalmente de chocolate”, dice con énfasis la diseñadora de alta costura Verónica de la Canal, que con su estilo barroco, romántico y un toque siempre escenográfico conquistó las pasarelas de todo el mundo.
Su creación inédita no tiene como marco la Semana de la Moda en París ni el Fashion Week de Milán, sino que formará parte de la apertura de La Chocolaterie, la única feria especializada en el mundo del chocolate, que se realizará en La Rural a partir de hoy y hasta el próximo domingo, y donde se podrá disfrutar de este producto en todas sus formas: desde bombones, tabletas apto vegano, pastelería, cacao fino, en grano, productos para profesionales como equipos, accesorios, materia prima y hasta vestidos comestibles 100% chocolate, confeccionados por Verónica de la Canal y el diseñador Luis Palacios.
Un tablero de ajedrez con efecto 3D
En esta ocasión, de La Canal -la primera diseñadora en la historia argentina en presentar su colección en Galerías Lafayette de París-, se unió con el maestro chocolatero José Luis Elías y la fábrica Fénix. Por su parte, Luis Palacios -ganador del reality Corte y Confección- se lució con otros dos modelos. El primero, en colaboración con los maestros chocolateros Matías Dragún y Nestor Reggiani, del equipo Pampa y el laboratorio Fleibor, que trabajaron sobre el Oso Pampa, un vestido que remite a la infancia. Para la segunda pieza, Palacios trabajó con el famoso dúo de chocolateros Yanina Bloch y Emanuel Altuna, en la que diseñaron una obra con un registro lúdico de efecto 3D, y que representa el jaque mate, la maxima jugada del ajedrez.
En esta tercera edición, que concentra todas sus actividades en el pabellón Ocre de La Rural, los visitantes podrán participar de charlas con profesionales sobre el universo del cacao, talleres de pastelería, demostración de pintura en chocolate, maridajes de vinos y chocolates, ritual del cacao, elaboración de bombones, templado, cascada de chocolate al 70 %, chocolate en rama y otras actividades lúdicas y profesionales. Además del recorrido por los diversos stands, en el escenario principal del pabellón, abierto al público, habrá clases demostrativas en las que se realizarán diferentes preparaciones con chocolate, de la mano de reconocidos chocolateros, cocineros y pasteleros como Osvaldo Gross, Isabel Vermal, Gustavo Nari, Felicitas Pizarro, Matías Dragún y Néstor Reggiani -miembros del equipo Pampa-, Yanina Bloch y Emanuel Altuna, Valu Ramallo, Emiliano Strático, Diego Irato, Ariel Segesser, Cecilia Griguol, Mariana Corbetta; así como otras charlas de especialistas en cacao.
Un vestido que no se derrita
“Había que tener en cuenta que el vestido no se derrita -dice entre risas de la Canal-. Un diseño donde el verdadero protagonista fuera el chocolate”, asegura la artista, y cuenta que el proceso con los chocolateros fue muy fluido, y donde se animaron a probar con diferentes aromas, texturas y colores. La parte más difícil, admite ella, fue la de la tentación. “Mejor dicho el esfuerzo para no dejarse tentar a cada minuto. El chocolate Fenix es delicioso y hasta llegar a la decisión final hubo que hacer muchas pruebas. El mayor desafío fue no probar todas las muestras”.
En el trabajo de realización, también participó la mano de obra de un orfebre, ya que según la diseñadora había que tener un sostén para apoyar las tabletas de chocolate. “Opté finalmente por una base de chocolate blanco con vetas de chocolate oscuro, que hacen una especie de efecto marmolado y le dan ese toque artístico tan propio de mi obra y de mi forma de abordar la moda”, explica de la Canal.
El maestro chocolatero José Luis Elías cuenta que conocía a Verónica de la Canal tanto por la calidad de sus diseños como por su trabajo en televisión, pero nunca se habían cruzado personalmente. “Desde el primer encuentro donde debatimos ideas, la relación fue sobresaliente -revela Elías-. Hace muchos años que hago arte en chocolate, y me encanta hacer locuras nuevas. Con el chocolate me llevo tan bien que cuando me proponen algo enseguida trato de pensar en la mejor forma de conseguir el objetivo”.
Al ser un producto “tan noble”, Elías asegura que se puede hacer cualquier cosa que uno imagine. “El mundo del chocolate es único. Es el mismo producto el que te va guiando, el que te avisa cuándo está listo para enfriarlo, para que lo cortemos, para desmoldarlo. Nos avisa de todo. Solo hay que conocerlo bien, y si algo sale mal es porque no respetamos sus tiempos. Suena raro -reconoce el chocolatero-. Pero es la pura verdad”.
¿Cuántos kilos de chocolate se utilizaron?
Elías no precisa peso ni cantidades, pero cuenta que siempre hace más de lo que se necesita, porque suelen sumarse accesorios (en este caso fueron unas botas de chocolate) y otras piezas que se pueden necesitar para cualquier tipo de imprevisto. “Siempre hay que tener un plan B por cualquier eventualidad, pero el objetivo es lograr que la modelo pueda lucir el vestido de la manera exacta en que lo imaginaba la diseñadora”, dice Elías.
Saber el valor del vestido es algo difícil de evaluar, porque según explica el maestro chocolatero, se trata de una obra de arte y no es posible determinar un precio real de mercado. “Amo el chocolate y puedo hacer todo lo que me gusta con él, pero en este caso no sabría qué precio ponerle a ese hermoso vestido”, confiesa.
Un mundo de trufas, cascadas, lingotes y esferas… de chocolate
Durante la feria, además del inusual desfile, se podrá probar el chocolate en todas sus versiones: tabletas, trufas, fondue, bombones, cascada de chocolate, macaron, chocolate caliente, alfajores, cookies, mousse, lingote de chocolate, pastelería fina, chocolate en rama, waffles, licores, helados, cerveza con cacao, esferas de chocolate, chocolate vegano y otros productos realizados con cacao. También se realizará el ritual del cacao, una experiencia sensorial que invita a conocer su uso ancestral y sus beneficios.
Para los aficionados de la realidad virtual, se podrá viajar y transportarse hacia el fantástico mundo de la producción del cacao. En tanto, para los enófilos, el invitado franco-argentino Emiliano Strático, sommelier y profesor en la Escuela de Vinos de Burdeos, en Francia, dictará una master class exclusiva de maridajes de vinos y chocolates.