La demanda, presentada en el Tribunal Superior de California en San Francico, establece que el 5 de octubre de 2022, Sebastian encendió el calentador de agua del baño para ducharse. Debido a lo que una investigación policial brasileña reveló fue un conducto de escape dañado e instalado incorrectamente, el calentador de agua comenzó a emitir niveles peligrosamente altos de monóxido de carbono en el baño.
Según la demanda, el cuerpo de Mejía fue encontrado al día siguiente, desnudo. Estaba tumbado en la ducha, boca arriba, con el agua corriendo.
El calentador de agua caliente se instaló incorrectamente dentro del baño, que carecía de la ventilación adecuada, alega la demanda. Esto fue una violación de los códigos de construcción aplicables.
Sebastián Mejía de Miami, Florida, era un joven maestro y erudito prometedor. Su familia, originaria de Colombia, descendía de los pueblos Muisca y Panche. Sebastián comenzó a investigar sus raíces indígenas a una edad temprana. Después de recibir su título de licenciatura summa cum laude del estado de Florida, recibió una beca departamental en NYU y comenzó sus estudios de posgrado en su Centro de Estudios de América Latina y el Caribe. Al momento de su muerte, estaba investigando sobre pueblos indígenas en Brasil en conexión con una beca Fulbright.
Además de la muerte de Mejía, se han reportado varias muertes por envenenamiento con monóxido de carbono en propiedades en la plataforma de Airbnb. Informé sobre la muerte de tres jóvenes estadounidenses por envenenamiento con monóxido de carbono el 30 de octubre de 2022 aquí y aquí . Se alojaban en Airbnb con una instalación de calentador de agua defectuosa supuestamente similar. En diciembre, las familias de las víctimas anunciaron que planeaban demandar a Airbnb.
“A pesar de los esfuerzos de marketing de Airbnb para posicionarse como un proveedor de seguridad, se niega a exigir el uso de detectores de monóxido de carbono simples”, afirma un comunicado de prensa presentado por Ferraro Law Firm, con sede en Miami, y Wisner Baum, con sede en California, abogados de Sebastián Mejía.
El problema, como lo expresó en diciembre la experta en la industria de la hospitalidad Katherine Doggrell, es que Airbnb es "una plataforma, no una empresa de hospitalidad". Doggrell es el autor de Check Out: What the Rise of the Sharing Economy Means for the Future of the Hotel Industry .
"Airbnb ofrece mucha orientación sobre cómo le gustaría que hospedaras, muchos consejos sobre lo que le gustaría que hicieras y muchas mejores prácticas. Compare esto con el acuerdo de 25 años que tiene un operador con una empresa hotelera. ”
A raíz de la última tragedia, Airbnb compartió con nosotros una declaración de política similar a la que publicó en diciembre.
“Nuestros equipos globales trabajan todos los días para promover viajes seguros para nuestra comunidad. Llevamos a cabo un programa global de detectores, regalando detectores combinados de humo y CO sin costo alguno para todos los Anfitriones elegibles. Hasta la fecha, más de 200 000 Hosts en todo el mundo han pedido un detector a través de este programa”.
“Nuestros equipos globales trabajan todos los días para promover viajes seguros para nuestra comunidad. Llevamos a cabo un programa global de detectores, regalando detectores combinados de humo y CO sin costo alguno para todos los Anfitriones elegibles. Hasta la fecha, más de 200 000 Hosts en todo el mundo han pedido un detector a través de este programa”.
La declaración agregó: “Alentamos a todos los anfitriones a confirmar que tienen instalado un detector de humo y CO, y las casas que informan tener un detector están claramente marcadas, para que esta información sea visible para los huéspedes. Los invitados también pueden filtrar listados por casas que reportan tenerlos. Si un huésped reserva una lista en la que un anfitrión aún no ha informado de la presencia de detectores, lo señalamos para que esté al tanto y pueda tomar las medidas de precaución necesarias”.
Las tragedias del monóxido de carbono no se limitan a Airbnb. Esta semana, una joven pareja estadounidense fue encontrada muerta en un resort de lujo en las afueras de Cabo San Lucas, México, operado por Hyatt. Los primeros indicios apuntan a una intoxicación por monóxido de carbono.
Pero varios huéspedes han muerto por envenenamiento con monóxido de carbono en propiedades de Airbnb, además de las tres muertes en México, dicen los abogados de Mejía. En 2013, una mujer canadiense de 35 años murió en una propiedad de Airbnb en Taiwán. En 2018, una pareja de Nueva Orleans murió en una propiedad de Airbnb en México. En abril de 2019, un residente de Florida murió en una propiedad de Airbnb en Colombia. Y en mayo de 2019, seis turistas de Brasil murieron en una propiedad de Airbnb en Chile. En diciembre de 2021, una californiana de 25 años murió mientras se duchaba durante su estadía en una propiedad de Airbnb en México.
Solo en los Estados Unidos, el Centro para el Control de Enfermedades dice que el monóxido de carbono es la principal causa de muertes por envenenamiento accidental, lo que provoca más de 430 muertes y 50,000 visitas al departamento de emergencias cada año. Los expertos en viajes dicen que llevar un detector de monóxido de carbono a pilas de bajo costo puede alertarlo sobre una acumulación peligrosa de CO.
En diciembre de 2022, señaló proféticamente el autor Doggrell. “A medida que estos accidentes continúan ocurriendo, es probable que todos los viajeros comiencen a pensar en las implicaciones de seguridad de quedarse en la casa de un extraño”.
Un portavoz de Airbnb dijo: “Nuestros pensamientos permanecen con los seres queridos de Sebastian tras su trágica pérdida, y nuestros corazones están con ellos durante este momento difícil”. Airbnb dijo que no podía hacer más comentarios sobre este asunto ya que ahora se encuentra en un litigio activo.
Daniel Mejía, el hermano de Sebastián, no fue tan conciliador. Dijo, en relación con el lanzamiento de la demanda> "La muerte de Sebastián no es un accidente. Airbnb ha optado intencionalmente por ignorar las medidas básicas de seguridad en favor de las ganancias y debido a esto, varias familias han perdido seres queridos en los alquileres de Airbnb. Esperamos esta demanda arroja luz sobre esta negligencia sistémica y promulga cambios para que los inquilinos estén mejor protegidos y no se pierdan otras vidas".
Con información de Forbes US
