La asociación Consumer Reports instó el lunes a cuatro productores de chocolate a comprometerse para el Día de San Valentín a reducir las cantidades de plomo y cadmio en sus productos de chocolate amargo, luego de que las pruebas revelaran niveles nocivos de metales pesados.
En cartas a Hershey Co, Mondelez International Inc , Theo Chocolate y Trader Joe's, Consumer Reports dijo que la exposición a largo plazo a los metales puede provocar problemas del sistema nervioso, supresión del sistema inmunológico y daño renal.
Dijo que el peligro era mayor para las mujeres embarazadas y los niños pequeños debido al riesgo de problemas de desarrollo. Las cartas iban acompañadas de casi 55.000 firmas de peticiones.
El mes pasado, Consumer Reports dijo que 23 de las 28 barras de chocolate oscuro que probó incluían niveles potencialmente dañinos de plomo, cadmio o ambos para las personas que comen más de una onza de chocolate al día.
Cinco tenían niveles elevados de ambos metales: dos de Theo y uno de Lily's, propiedad de Hershey, Green & Black's, propiedad de Mondelez, y Trader Joe's.
Consumer Reports dijo que muchos consumidores comen chocolate amargo por sus posibles beneficios para la salud y sus niveles de azúcar relativamente bajos, pero "no hay nada saludable en ingerir metales pesados".
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Los fabricantes de chocolate no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
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La Asociación Nacional de Confiteros, un grupo comercial norteamericano, dijo que las pautas de salud de California que Consumer Reports usó y consideró "las más protectoras disponibles" "no son estándares de seguridad alimentaria" y que el chocolate sigue siendo seguro para comer.
Los consumidores norteamericanos han demandado a Trader Joe's al menos nueve veces por su chocolate amargo desde que Consumer Reports publicó su estudio.
Hershey's y Mondelez también han sido demandados por los hallazgos de la revista, al igual que otros fabricantes de chocolate, incluidos Godiva y Lindt .
- Información de Jonathan Stempel en Nueva York; editado por Jonathan Oatis y Deepa Babington para Reuters
