Si estás luchando con esta cuestión de conciliación de la vida personal y profesional, estos sencillos pasos te ayudarán enormemente.
1. Administrá tu tiempo eficientemente
Realizá las tareas más difíciles primero. En su popular libro Eat That Frog !, Brian Tracy cita a Mark Twain diciendo: Si comés una rana para desayunar, lo más probable es que sea lo peor que vayas a tener que hacer en todo el día.
La cita sugiere que si hacés tus tareas más difíciles primero, incluso si no completás todo en tu lista de tareas, aun te sentirás satisfecho. Dedicar tiempo a las tareas más importantes es la clave. Y para hacer esto, necesitás un horario planificado. Nunca empieces tu día sin un plan; establecer plazos para las tareas y atenerse a ellos es fundamental para concentrarte en tareas importantes y urgentes.
2. No siempre decir que sí
Tu compromiso con tu trabajo es admirable, pero para obtener un equilibrio entre el trabajo y la vida, necesitás aprender a decir que no. Eileen Carey, directora ejecutiva de Glassbreakers, lo expresó así: Es importante decir que no en el trabajo porque te hace ganar respeto. Si no se te paga por hacer algo, y la tarea te quitará el tiempo de lograr lo que te pagan por hacer, diciendo que no demostrás tu compromiso con tu rol y el valor de tu tiempo.
3. Priorizar y luego delegar
El camino más seguro para que un ejecutivo se boicotee a sí mismo es negarse a aprender cómo, cuándo, y en quién delegar el trabajo, dijo James Cash Penney, fundador de la cadena minorista J.C. Penney. Mientras estás en el trabajo, muchas cosas exigirán una parte de tu tiempo. Pero para encontrar el equilibrio, es necesario priorizar y delegar de manera efectiva.
En palabras de John Kovacs, CEO de TorcUP, hacerlo todo uno mismo no sirve a tu deseo de equilibrio. Cuantas más tareas delegues, más tiempo tendrás para centrarte en lo que es importante, y la implicación es más tiempo para otras pasiones personales.
4. Vivir sano y en forma
La esencia del trabajo es hacer una vida sana; necesitás estar sano para ejecutar los proyectos de envergadura. Establecé metas de salud de la misma manera en que establecés metas de trabajo. Hacer ejercicio regularmente no sólo te ayudará a reducir la grasa corporal y alcanzar mejor aspecto, sino que también ayudará a prevenir otras enfermedades cardiovasculares, y aumentará tu resistencia y nivel de energía general.
5. Pedí ayuda
No tengas miedo de pedir ayuda cuando la necesites. Si necesitás un asistente para ayudarte a devolver correos electrónicos y recibir llamadas, contratá a uno. Preguntales a tus compañeros de trabajo, amigos o incluso a la familia para que te ayuden con una tarea si es necesario.
*Nota publicada en Forbes España