Si usted es el padre de un adolescente (o tal vez un preadolescente), entonces probablemente comprenda lo que viene en este ensayo. Tengo un hijo de quince años que usa remeras con capucha de manga larga en medio de este caluroso verano de Georgia (Estados Unidos). Recientemente tuiteé sobre esto en mi Twitter, y muchas personas intervinieron catárticamente.
Soy el ex presidente de la Sociedad Meteorológica Estadounidense (AMS) y un científico del clima. Sé un poco sobre el calor, por lo que esta observación me ha molestado por un tiempo. Decidí usar mi curiosidad y entrenamiento científico para explorar si hay alguna base científica detrás de por qué los adolescentes usan remeras con capucha en plena ola de calor.
Por contexto, el clima se está calentando y es probable que los veranos se vuelvan más calurosos. Escribí un artículo en Forbes detallando cómo han cambiado las distribuciones de temperatura. Los valores de calor extremo de hace unas décadas son cada vez más "normales" en la actualidad.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos proyecta que la mayor parte del país experimentará temperaturas "por encima de lo normal" la mayor parte de agosto, justo cuando muchos distritos escolares de todo el país están comenzando las sesiones. Sin embargo, sospecho que el calor no detendrá a las remeras con capucha.
Como científico, mi primera inclinación fue explorar lo que hay ahí fuera. Mi primera parada no fue una revista académica. Fue un ensayo de Ian Lecklitner en Mel Magazine en línea. El ensayo se titulaba “Deja de molestar a las personas que usan remeras con capucha durante el verano”. Continuó exponiendo varias razones, entre ellas:
- Protección contra la radiación ultravioleta (UV) que causa cáncer
- Armadura contra molestos mosquitos
- Más bolsillos
- Preocupaciones sobre la imagen corporal
Francamente, todo esto tiene sentido para mí. Mi propio hijo incluso dice que hace frío en algunas de sus aulas. Una explicación que realmente me llamó la atención fue consistente con muchas de las explicaciones del Tweet. Lecklitner escribe: “....las remeras con capucha brindan más que comodidad física; también administran consuelo emocional, similar al de una manta con peso”. Ah, aquí es donde entra en juego la literatura científica.
Corrí hacia el amigo de todos los investigadores académicos de Ivory Tower: Google Scholar. Ingresé el término "manta con peso" en la barra de búsqueda. Sorprendentemente (al menos para mí), existen estudios sólidos y de larga data sobre el uso de mantas pesadas para apoyar a las personas en el espectro del autismo, que sufren de insomnio o que se enfrentan a la ansiedad o hiperactividad.
Lecklitner planteó la hipótesis en su ensayo de que quizás las remeras con capucha cumplen una función similar a las mantas con peso. Sé que esto ha existido durante años, pero personalmente lo noté más después de la pandemia de Covid-19. Si bien es especulativo, la pandemia ciertamente fue un estímulo emocionalmente discordante para esta generación.
Mike Benge escribió recientemente en la revista Trailrunner: “Mientras que el verano para algunos es el momento de usar atuendos para salir del sol y salir disparados, un número cada vez mayor de corredores de senderos se están dando cuenta de los beneficios de las remeras con capucha de manga larga súper livianas por su protección solar, versatilidad y comodidad”.
Mi propia investigación ha cambiado mi perspectiva sobre este tema, y dejaré de molestar a mi hijo. Si se siente cómodo (y no sucumbe a la enfermedad del calor), estoy listo para irme. Con suerte, esta generación de "remeras con capucha" también está ayudando a erosionar los sesgos sociales o las percepciones exhibidas hacia los jóvenes de color que también usan sudaderas con capucha.
*Con información de Forbes US.