Este hub de entrenamiento factura US$ 500.000 al año con atletas de 19 países
Bet Human Performance trabaja con 500 personas que pagan por su plan de manera mensual, semestral o anual. Este año proyecta crecer un 20 % este año y para esto se apoya en inteligencia artificial.

En el sector de Lumbisí, al este de Quito, una oficina moderna, funcional y donde se respira deporte es el centro de operaciones de Bet Human Performance. Esta empresa halló un nicho en 2017: deportistas que quieren mejorar su desempeño en disciplinas como el triatlón, ciclismo de montaña y de ruta, corredores de trail running o de maratones, entre otras.

Su fundador y director es Pablo Vallejo, quien antes de emprender en este sector había estudiado animación multimedia y tuvo un patio de autos. Sin embargo, el deporte siempre fue una de las prioridades de este emprendedor de 44 años. En el colegio y en la universidad disfrutaba de competir con sus amigos y compañeros, y todo el tiempo estuvo enfocado en mejorar su performance.

“A través de comunicación, servicio personalizado y tecnología garantizamos el rendimiento de los atletas que confían en nosotros, estén donde estén”, cuenta Vallejo. Hoy la empresa cuenta con un grupo de 14 entrenadores y alrededor de 500 atletas que están repartidos en 19 países como Alemania, Canadá, España, Chile, Ecuador, etc. Algunos de los deportistas que se entrenan con Bet Human Performance han alcanzado podios y clasificado a mundiales de ironman o trailrunnig, por mencionar dos ejemplos.

Para lograr esos y otros objetivos, Vallejo empezó desde cero. Recuerda que hace siete años detectó una problemática con grupos de personas que disfrutaban del deporte, aunque no todos tenían el mismo nivel. A esto se sumó una condición cardíaca que tiene Vallejo. Con esos antecedentes este coach se dio cuenta de que todo entrenamiento debe ser personalizado. “No tenía las mejores condiciones para hacer deporte, lo que yo quería era ganarles a mis amigos. Entonces, luego de recibir el alta médica, empecé a practicar triatlón, pero llegó un momento en el que me estanqué. Para salir se eso me capacité en Estados Unidos y España para ser entrenador, y me di cuenta de que mucho más me gustaba ayudarles y darles consejos, según lo que iba aprendiendo en mis capacitaciones. En una hoja de cálculo armaba planes de entrenamiento para mis amigos”. Así Vallejo encontró una oportunidad atada a su gusto por el deporte.

Las rutinas que proponía Vallejo se fueron propagando por el boca a boca. Un día este emprendedor y deportista empedernido le propuso a un amigo que le acompañe en esta aventura y así nació Human Bet Performance. A los 14 entrenadores se fueron sumando nutricionistas y fisiólogos, así como un equipo administrativo. Entre todos suman 19.

¿Cuándo se dio cuenta de que su servicio ya era una empresa con un valor agregado? “En 2019, luego de dejar el patio de autos que tuve por 14 años y con el que repartía mi tiempo. En ese tiempo llegaba a casa en las noches a revisar los planes de entrenamiento y a revisar lo que hacían mis pupilos. También entrenaba porque yo creo mucho en la ciencia y en la experiencia”.

El tiempo pasó y los programas de Bet Human Performance han servido para unos 1.500 atletas desde hace siete años. Hoy en día esta empresa trabaja con 500 personas que pagan por su plan de manera mensual, semestral o anual. En 2023 Bet Human Performance superó los US$ 500.000 en ingresos y proyecta crecer un 20 % este año.

Vallejo también recuerda que al inicio apeló a la fórmula básica del emprendimiento: prueba y error. Hoy hemos encontrado en el extranjero empresas que tienen un concepto similar. Ahora, para seguir creciendo, la empresa apela a la capacitación permanente (ha invertido cerca de US$ 110.000 en este tema) y a la inteligencia artificial. “Desde hace un año venimos desarrollando un proyecto en el que la inteligencia artificial guía a las personas a empezar a caminar una hora, correr unos cinco kilómetros o hacer cosas a las que no estaban acostumbrados. Este programa con inteligencia artificial tiene un costo menor que el de un entrenador. Es una nueva forma de crecer”.

Vallejo tiene claro que cada individuo es un todo y cada uno tiene un plan. “Muchos de los clientes son ejecutivos muy enfocados y obsesivos en algunos casos. Como les va bien en la empresa también quieren que les vaya bien en el deporte. Tenemos ejecutivas y ejecutivos ecuatorianos, pero también de firmas tecnológicas en el extranjero”, añade al finalizar la entrevista y antes de seguir revisando los logros de los atletas con los que trabaja a diario. (I)