En 2015, a sus 16 años, Isaac Galarza acompañó a su hermana a una tienda de telas en Ambato. Ella necesitaba revisar qué se vendía ya que estaba postulando a un concurso de belleza. En el aburrimiento, y viendo con más detalle la tienda, Galarza vio una tela que le llamó la atención. Era de flores y de licra. Le preguntó a la vendedora: “¿Puedo hacer una camisa con esto?”, a lo que ella le respondió: “Puedes hacer una camisa con la tela que sea y se sienta bien para ti”.

Esa frase lo marcó y le abrió las puertas al joven Isaac, que hacía años que no se sentía identificado con lo que vestía, no se sentía él mismo. Luego de la respuesta de la vendedora de telas, con los 20 dólares que tenía en el bolsillo, compró un metro y medio de la tela con diseño de flores y caminó unas tres cuadras hacia el Parque 12 de noviembre, donde había un pequeño taller de un adulto mayor, quien le tomó las medidas a Galarza y le tejió la camisa con tela de vestido.  

Días después, Galarza estrenó su ansiada camisa en una fiesta de 15 años que le invitaron. En esa ocasión, varios amigos le alagaron su prenda de ropa, y le preguntaron dónde la consiguió. Ahí, a Galarza se le ocurrió vender a los amigos interesados, y les dijo que la había comprado en Canadá y se la había traído un familiar, para darle un plus a la camisa.  

Así comenzaron los primeros años de IZZI Designs (aunque aún no tenía el nombre), hacía camisas o distintas prendas a pedido, y le compraba la materia prima a la misma señora que le vendió la primera tela, y la llevaba donde el mismo adulto mayor que tenía una tienda cerca del Parque 12 de noviembre. Mientras tanto, aún seguía creando y diseñando prendas para él mismo, y se empezó a vestir con la ropa que él mismo diseñaba. Esto “hizo que me sintiera finalmente identificado, me sentía contento y cómodo usando algo mío y no una marca creada por otra persona”.  

En 2017, al salir del colegio, Galarza se fue de intercambio a Inglaterra, y ahí también a las personas les llamó la atención su forma de vestirse, y preguntaron de dónde sacaba las prendas. “Cuando volví sabía que nunca se trató de que la gente me compraba por ser mis amigos, sino porque en serio las prendas le gustaban a la gente”. 

Ese año, a los 19 años, Galarza registró su marca IZZI Designs. “Esto lo hice porque en el colegio la gente me llamaba Isi, y le agregué dos “z” estilo Zara, las escribí en Paint un día en la universidad, y me gustó cómo quedó”, rememora Galarza. Tras graduarse del colegio, estudió Marketing en la Universidad San Francisco de Quito.  

Emprender para crecer 

Además de emprender en el mundo de la moda, Galarza en sus tiempos de universitario comenzó a apoyar la producción de eventos. En 2019, Isi, como le dicen sus amigos, se dio cuenta que las fiestas de Ambato se habían cancelado porque no consiguieron un buen lugar en donde realizarlas, además de que en 2018 no les fue muy bien. 

“Ahí me di cuenta que el mercado quedó 100% abierto, entonces hice una fiesta. Pero no quería tener que sacar permisos y todo, entonces la preparé en mi casa, en un recinto privado, y se me ocurrió la idea de venderles algo a mis amigos y conocidos, y por comprarme eso, yo les facturaba como ropa y al mismo tiempo les invitaba a mi fiesta”, confiesa Galarza. 

Al evento concurrieron más de 200 personas, entre ellas la entonces reina de Ambato, Vanessa Lozada, lo cual atrajo más invitados. Al día siguiente, Galarza fue a tomar desayuno con su novia, quien le hizo notar que dos de cada tres mesas tenía gorras con su marca en la frente, una cosa que no había pasado antes. 

“En esta ocasión se generó una externalidad de red en el que la gente dijo 'debo tener esa gorra' y la marca agarró un vuelo que terminó de reventar cuando hice un vídeo tutorial de TikTok que se hizo viral”, recuerda Galarza.  

Con la reciente difusión de su marca, Galarza comenzó a producir en serie, sin cambiar de productores, y empezó a buscar dónde vender. Llegó a decenas de multitiendas pequeñas, también emprendedoras, que vendían distintas marcas de diseñadores ecuatorianos. La mayoría quedaban en Quito. También, por la forma de sus prendas de ropa, empezó a auspiciar el Quito Polo Club y el club de equitación del Arrayanes Country Club.  

Allí conoció a Rafaela Rocha, diseñadora de modas que hacía unos meses había empezado con su propio emprendimiento: Rocha Home, un salón donde vende sus diseños y entrega espacio para otros diseñadores. Ella le propuso vender sus diseños en este espacio. La propuesta era tentadora: sólo por comisiones y porcentaje de ventas, entonces Galarza aceptó. 

Rocha Home un mes después se convirtió en la multitienda que más productos de IZZI Designs vendía, y a Galarza junto a Rocha se les ocurrió abrir una tienda exclusiva de esta marca. Así, con una inversión de US$ 30.000 en construir y diseñar la tienda, más US$ 40.000 en mercadería, abrió su local en la calle San Ignacio, en el Sector La Floresta de Quito.  

“La tienda abrió el 18 de diciembre pasado, sólo hasta el 31 de ese mes facturamos un poco más de US$ 30.000 en este espacio, en general por haber sido temporada navideña y las difusiones que realizamos en redes sociales, a eso se le suman otros US$ 20.000 que facturamos con las otras multitiendas en todo diciembre”, comenta Galarza, mientras disfruta de una copa de espumante dentro de su nueva tienda. 

En 2021, IZZI Designs facturó US$ 20.500, en 2022 llegaron a los US$ 48.000, y todo el 2023 vendieron US$ 116.000.- “Al saber los números de la tienda en diciembre, proyectamos que este 2024 podremos duplicar las ventas, que es algo que prácticamente se ha ido dando con el tiempo”, planifica Galarza. Con eso, este 2024 podrían llegar a facturar más de US$ 300.000, de los cuales proyectan que US$ 100.000 sean sólo en diciembre, por la temporada festiva.  

“De hecho de lo que marcó mucho la razón de que en 2023 crezcamos no solo fue por la presencia de la marca, sino porque todo el tiempo anterior dividía mi cabeza y mi tiempo con la universidad, y ahora no, entonces podemos ir al 100%, entonces me despierto y me duermo pensando en esto”, analiza Galarza.

La tienda es 100% ecuatoriana. Galarza ahora tiene diversos proveedores ecuatorianos que le ayudan con los textiles, los zapatos, los acolchados y costuras. Directamente con él solamente trabaja Rafaela Rocha y piensa en este 2024 contratar más vendedores. Indirectamente, desde su bolsillo le brinda sueldo a 50 personas que le ayudan con la producción, almacenamiento y venta de las prendas que diseña. 

Apoyado en el mesón de ventas de su nueva tienda, vestido con una camisa celeste de su marca, Galarza señala que “cuando alguien piensa en algo ecuatoriano, no piensa esto, entonces más valor y orgullo le da que sea 100% de nuestro país”. 

Como mensaje a los jóvenes y a quienes piensen en emprender, Galarza enfatiza en que “siempre se tiene que hacer las cosas que a uno les gusta y hacerlas bien. Sólo trabajar para vivir bien. Antiguamente yo muchas cosas que hacía giraban en torno a la búsqueda de trascender, pensando en quién voy a hacer después de muerto, pero me he dado cuenta que después de muerto eres sólo una indiscutible pieza de lo efímero es decir, inexistente. Ahora hay que hacer las cosas súper bien y disfrutar mi vida, no mi muerte. O sea, estoy seguro que hay mucha gente que opera pensando en quién va a ser después de morir, pero definitivamente quien vas a ser es nadie en un millón de años”. 

IZZI Designs abre de lunes a sábado de 10:00 a 19:00 horas y los domingos de 10:00 a 15:00 horas. Venden gorras, zapatos, buzos, calcetines, camisetas, hoodies, chaquetas y chalecos diseñados por Isaac Galarza, todo pensado con tallas unisex. Este año, el dueño piensa subir el precio de sus productos. (I)