El nivel de desechos que se produce a nivel mundial se ha acelerado en las últimas décadas, pero los paises no dan una respuesta adecuada a ese problema. Así lo denuncia un informe reciente de la organización británica Verisk Maplecroft, que alerta de una "creciente crisis" en el manejo de basura.
El grupo especializado en análisis de riesgo reveló que, a nivel mundial, se producen más de 2.100 millones de toneladas de desechos cada año, lo que podría llenar más de 800.000 piscinas olímpicas. Tan sólo un 16%, es decir 323 millones de toneladas de esa basura, es reciclada.
¿Qué pasa en Ecuador?
Según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), el 96% de la basura se entierra y solo se recicla el 4%. De lo que se pone bajo tierra, el 66,5% es orgánico y el 33,5% restante corresponde a desechos inorgánicos. Cáscaras de frutas, de huevos, verduras, hojas, semillas, legumbres, suero de leche, entre otros pueden ser transformados en abono, su aprovechamiento es una opción para evitar que la generación de basura continúe aumentando.
En el país se manejan algunas alternativas, una de esas nació en pandemia. Dos jóvenes emprendedores empezaron a recopilar los residuos orgánicos producidos por empresas, cultivos y hogares para convertirlos en biofertilizantes líquidos, a través de un sistema 100% amigable con el ambiente y así nació Biotrend.
El concepto es devolverle a la tierra, lo que se extrae de ella, nos cuenta Katia Suárez, una convencida de la importancia de cuidar el medio ambiente y añade que únicamente, el 1% de los desechos orgánicos son reutilizados.
¿Cómo funciona?
Biotrend es una start up, que nació con un capital inicial de US$ 50 mil. Los desechos recogidos, incluída la majada de vaca, es sometida a una pasteurización industrial, en donde todos los gases que se emiten en la propia descomposición son utilizados para el funcionamiento de la misma planta industrial y al residuo lo convierte en bio fertilizante líquido concentrado, que debe ser diluido en agua para su utilización.
El producto final no contiene gérmenes ni bacterias y no es contaminante. Los desechos orgánicos utilizados deben ser libres de químicos en su producción, de acuerdo a las normas de Agro Calidad.
En Quito, en el primer trimestre del 2021 se recogieron 182 mil toneladas de residuos sólidos, según información de la Empresa Pública Metropolitana de Aseo de Quito (EMASEO). De acuerdo con los datos proporcionados por el INEC, es la segunda ciudad con más residuos solidos, luego de Guayaquil, en tercer lugar se ubica Cuenca. (I)