“Prefiero acoger a un bebé peludo que crear una nueva vida”, dice Lynn, una mujer de 35 años que está muy contenta con su perro de compañía. Muchos se hacen eco de este pensamiento, como demuestra una encuesta realizada en 2023 por USA Today y OnePoll en la que el 67% de los encuestados de entre 18 y 26 años optaron por tener un perro en lugar de tener un hijo.
Las estructuras familiares están cambiando rápidamente y las mascotas se consideran con frecuencia equivalentes y, en algunos casos, mejores que tener hijos. En consecuencia, la gente está optando por convertirse en “padres de mascotas”, asumiendo un papel parental y teniendo en cuenta a sus animales de compañía en decisiones importantes sobre su carrera profesional, elección de vivienda y relaciones románticas.
A pesar de enfrentarse a la presión social de continuar con su linaje y hacer las cosas de forma más convencional, las personas que optan por ser padres de mascotas suelen retrasar el momento de tener hijos o eligen no tenerlos en absoluto.
Acá tenés cuatro razones por las que la gente prefiere ser padres de mascotas, según las investigaciones.
Las mascotas ofrecen compañía con flexibilidad
Las personas sopesan varios factores a la hora de elegir entre la compañía de las mascotas o la de los chicos, como las demandas profesionales, las consideraciones económicas, las limitaciones de tiempo y la comodidad. La encuesta de USA Today y OnePoll reveló que más del 80% de los propietarios de perros consideraban que cuidar de ellos era más fácil y, en consecuencia, optaron por no tener hijos.
Un estudio de 2017 publicado en Sociological Inquiry descubrió que la mayoría de las mujeres que participaron en el estudio disfrutaban de la gratificante compañía de su mascota y se deleitaban con la flexibilidad que les proporcionaba ser madres de un animal de compañía.
Emma, una joven de 24 años con dos perros, citó su vida social y su preferencia por pasar tiempo a solas con su marido como sus razones para no tener “hijos humanos” por ahora. Su floreciente carrera la había hecho recelar de los posibles desafíos de tener un hijo.
"Si les prestás atención, son buenos el resto del día, no traen problemas. Podemos seguir haciendo lo que queramos, pero tenemos a estos adorables peluditos que están deseando vernos cuando llegamos a casa. Ahora mismo no tengo ganas de tener un bebé gritón. Preferiría tener un perro ladrador", dijo Emma. Sus pensamientos fueron reiterados por otros participantes, resaltando el valor que tienen las mascotas como compañeros que no traen grandes complicaciones.
Las mascotas satisfacen el deseo de ser padres
Muchas personas se enfrentan a desafíos cuando intentan concebir. De hecho, las tasas de fertilidad fueron desplomándose en todo el mundo en las últimas décadas. La tasa de fertilidad mundial se situó en 2,3 en 2021, lo que supone un marcado desplome con respecto a la tasa de fertilidad mundial de 5,3 observada en 1963.
Las parejas que no pueden concebir experimentan con frecuencia un vacío que los lleva a analizar alternativas a la crianza de un hijo. Para las parejas limitadas por las circunstancias, tener un animal de compañía puede proporcionar una alternativa significativa a tener hijos, ofreciendo esperanza, consuelo y una sensación de plenitud.
Las mascotas satisfacen necesidades evolutivas
Optar por ser padres de mascotas en lugar de tener hijos parece un rompecabezas evolutivo, ya que los individuos están renunciando a su directiva biológica de reproducirse. Sin embargo, un estudio de 2021 concluyó que los individuos que optan por retrasar o renunciar a este impulso interno son capaces de satisfacer su necesidad de criar haciéndolo con mascotas en su lugar.
Los investigadores sugieren que un rasgo humano clave es el “cuidado aloparental”, o cuidado parental hacia una cría que no es la descendencia directa del individuo. De hecho, los humanos pueden cosechar los beneficios de la aloparentalidad de una especie diferente a través de campañas y productos de adopción de animales.
Además, si la crianza en lugar de la paternidad es una necesidad fundamental, puede ser satisfecha por los animales de compañía sin los demandados a tiempo completo de la descendencia biológica. Los individuos pueden elegir satisfacer sus necesidades de crianza en función de la disponibilidad de recursos, las redes de apoyo y la elección personal.
“Sin tener un hijo que criar, me da ese cuidado por algo que de otro modo no tendría. Y creo que no me di cuenta de lo útil que sería para mí hasta que tuve a Sam”, dijo Hannah, una mujer de 36 años, resaltando el amor que siente por su perro.
Las mascotas mejoran la salud mental
Las mascotas tienen un impacto positivo en la salud mental de sus dueños. Una encuesta realizada en 2024 por la Asociación Americana de Psiquiatría descubrió que las mascotas provocaban que:
- el 84% de los encuestados experimentaran una salud mental positiva
- el 62% de los encuestados experimentaran una reducción del estrés y la ansiedad
- el 62% de los encuestados se sintieran tranquilos
Las mascotas tienden a ofrecer consuelo, reducir los sentimientos de soledad y regular la intensidad de las emociones negativas. Su presencia también actúa como una fuente constante de apoyo emocional. Las mascotas no son sólo nuestras amigas que mueven la cola, sino custodios de un amor incondicional.
En última instancia, la decisión de convertirse en padre de una mascota en lugar de tener hijos es una elección personal que debe considerarse detenidamente. Aunque la crianza de mascotas ofrece recompensas únicas, no está exenta de desafíos. Considerá detenidamente las dos caras de la moneda y elegí el camino que mejor se alinee con sus valores, estilo de vida y aspiraciones.
*Con información de Forbes US.