Ferrari presentó el F80, el superdeportivo más potente de la compañía hasta la fecha, con una potencia combinada de 1183 caballos de fuerza gracias a su motor de gasolina y eléctrico. El F80 incorpora ingeniería, tecnología, materiales y conceptos derivados directamente de la Fórmula Uno y del Ferrari 499P, que consiguió victorias en los últimos dos años en las 24 Horas de Le Mans.
Para cubrir todos los detalles de ingeniería de este superdeportivo híbrido haría falta un libro, y estoy dispuesto a apostar que si comprás uno de los 799 F80 que se producirán en Maranello, estará acompañado por un libro y un video que expliquen todo sobre el auto. El F80 sigue la tradición de superdeportivos de vanguardia como el 288 GTO, F50, Enzo y La Ferrari.
Considerando la tecnología del F80, es difícil decidir por dónde empezar, pero el corazón del asunto siempre es el motor, o en este caso, su sistema de propulsión híbrido de gasolina y eléctrico. El F80 tiene un motor V6 turboalimentado de 3.0 litros y 120 grados, que produce 887 caballos de fuerza, o 900 cv en la medida preferida por Ferrari, el Cheval Vapeur. Es el mayor rendimiento específico de cualquier motor de auto de carretera de Ferrari hasta la fecha.
La expresión "rendimiento específico" puede sonar como algo esotérico, solo relevante para nerds e ingenieros, pero es una métrica crítica que se puede entender fácilmente. Rendimiento específico significa que este motor produce más potencia por litro, más potencia por centímetro cúbico de cilindrada, que cualquier otro motor de auto de carretera de Ferrari hasta la fecha.
Pensalo de esta manera: el motor turboalimentado del F80 tiene la mitad del tamaño (la mitad de la "cilindrada") y la mitad de los cilindros del V12 de Ferrari con aspiración natural (sin turbo), pero aun así produce más potencia. En el boxeo, a esto lo llamaríamos "golpear muy por encima de tu peso". O, para tomar prestada una frase del Bardo: "Aunque sea pequeña, es feroz", como describe la pequeña pero poderosa Hermia en Sueño de una noche de verano, Acto III, Escena 2, de Shakespeare. Este es un motor pequeño pero feroz.
Con 120 grados, este es un V6 de "ángulo amplio", diferente de los V6 de 60 o 90 grados que se encuentran comúnmente en sedanes convencionales. No es exactamente un motor plano de 180 grados como los de cierta compañía de autos deportivos en Stuttgart, pero es similar a los V6 de carreras Dino de principios de los años 60, que ganaron un campeonato mundial para Ferrari con el estadounidense Phil Hill al volante. Estos primeros Dino también tenían un ángulo en V de 120 grados.
Más relevante para el siglo XXI, sin embargo, es que este motor tiene muchos componentes derivados del motor del 499P, el hypercar híbrido de carreras de Ferrari que ganó las 24 Horas de Le Mans en los últimos dos años.
Este es, sin duda, un auto de carretera que incorpora los más recientes avances del automovilismo de alto nivel, prueba de que las carreras siguen siendo relevantes y no solo entretenimiento para mecánicos. El único comparable al F80 en el mundo es el Mercedes-AMG ONE.
La "planitud" del motor, es decir, su relativa falta de altura, es crucial para la aerodinámica altamente estudiada del F80, ya que tanto el motor como la caja de cambios no solo son de baja estatura, sino que también están inclinados ligeramente hacia arriba en la parte trasera para encajar en el chasis de fibra de carbono y aleación, sin interferir ni obstruir el eficiente flujo de aire bajo o a través de la parte trasera del auto, lo que lleva a una mayor estabilidad a altas velocidades.
Solo en los autos deportivos más puros se observa este nivel de reflexión sobre cómo cada sistema y subsistema impacta y se integra con los demás sistemas.
A continuación, sumamos los tres motores eléctricos, dos en la parte delantera y uno en la trasera. Ferrari ya demostró este enfoque fundamental con el SF90 Stradale y lo lleva un paso más allá en este modelo. Cada motor eléctrico compacto en la parte delantera impulsa una rueda, lo que permite que las computadoras apliquen potencia de manera independiente a cada rueda, mejorando el agarre y la agilidad en las curvas.
Estos motores son los primeros diseñados y desarrollados completamente por Ferrari en su propia casa, un paso crucial mientras los ingenieros de Maranello miran hacia superdeportivos totalmente eléctricos en el futuro.
Uno solo puede imaginar la naturaleza compacta de los motores eléctricos, ya que el frente del F80 es una obra maestra en formas aerodinámicas complejas, con un S-Duct construido en un lugar donde uno podría pensar en colocar algunas piezas de equipaje blando.
Tener un S-Duct masivo y dos motores eléctricos es una gran hazaña de diseño. El tercer motor eléctrico está incorporado en la parte trasera del auto.
Para usar un término favorito del mundo del arte, el F80 es una obra de medios mixtos. El núcleo central del chasis está construido a partir de una mezcla de fibra de carbono y otros compuestos. A ese núcleo se le acoplan subchasis delanteros y traseros de aleación (piensa en ellos como grandes vigas) que sostienen el sistema de propulsión y la suspensión. Los subchasis están hechos de aleación extruida, "pegada" químicamente con juntas de aleación fundida. La carrocería, que en gran parte es una envoltura aerodinámica altamente compleja, está hecha completamente de fibra de carbono. Ferrari producirá solo 799 ejemplares del F80.
*Con información de Forbes US
