El mundo emprendedor está compuesto de actores que operan dentro del mismo sector y mercado, como empresarios, organizaciones de apoyo organizaciones, donantes, filántropos e inversores. A estos se suman el entorno económico y político que los rodea. Como resultado, la naturaleza de los ecosistemas puede variar según el sector o propósito, lo que significa que los factores de éxito dentro de ellos también pueden diferir.
En este contexto, Endeavor Insight, la división de investigación de Endeavor, con el apoyo de la Fundación Argidius, realizaron “Self Propelling Ecosystem Development”, una investigación que estudia cómo desarrollar un ecosistema emprendedor hasta que se vuelva autopropulsado.
El estudio analiza 6 principios que los responsables de la toma de decisiones deben tener en cuenta para fortalecer sus ecosistemas. El foco está puesto en sectores tecnológicos y en emprendedores de alto impacto, es decir, aquellos con empresas en crecimiento que están transformando sus industrias. Sin embargo, muchas de las conclusiones también pueden aplicarse a una gama de contextos más amplia.
Cómo desarrollar un ecosistema emprendedor
De acuerdo a la investigación, para fortalecer un ecosistema emprendedor los responsables en la toma de decisiones deben basarse en seleccionar, apoyar y sostener:
1. Centrarse en la escala y en las capacidades locales
Para lograrlo, es clave identificar a los fundadores consagrados que han escalado sus negocios y utilizar su experiencia de primera mano para entender las limitaciones y oportunidades locales.
2. Alinear la acción con los objetivos
En otras palabras, adecuar los criterios de selección y otras intervenciones a los resultados, como la creación de empleo o el aumento de los ingresos. También, ser claros con los fundadores sobre cómo los servicios de apoyo están diseñados para la concreción de esos objetivos.
3. Aumentar el apoyo a las soluciones basadas en pruebas
Dar prioridad a los tipos de servicios de alta calidad que están respaldados por las pruebas y las experiencias de los fundadores, en lugar de centrarse en la cantidad de programas.
4. Adaptar el apoyo a la innovación
Adaptar el apoyo en función de los modelos de negocio de empresas innovadoras y proporcionar apoyo específico para las necesidades de los fundadores en sus diferentes etapas de crecimiento.
5. Fomentar la reinversión de los fundadores
Fomentar e incentivar fundadores consagrados a reinvertir en su ecosistema, por ejemplo, como mentores o inversores.
6. Permitir el desarrollo local autoimpulsado
Priorizar el apoyo a los fundadores locales y animar a los fundadores expatriados a invertir en en el desarrollo de la capacidad local para crear un ecosistema autopropulsado.
En línea con lo anterior, uno de los principios que más destaca el estudio es la importancia de que los fundadores devuelvan su conocimiento para apoyar a otros emprendedores. A este proceso se lo conoce como efecto multiplicador. Como resultado, este enfoque permite que el éxito de cada empresa tenga un impacto duradero en su ecosistema.
Por último, La investigación incluye entrevistas con cientos de empresarios y docenas de expertos como inversores, ejecutivos de programas de apoyo y responsables de programas de las principales organizaciones de financiación. Además, se incluye una rúbrica para determinar la madurez de los ecosistemas emprendedores locales, así como casos de estudio que ejemplifican los seis principios.