Tengo 36 años, soy cuencano y me mudé a Seattle en 2007, cuando tenía 21 años, para estudiar animación en el Art Institute. Este sueño fue posible gracias al apoyo de mi abuela materna. Así empieza la conversación con Amaru Zeas-Sigüenza, el ecuatoriano que desde su niñez y adolescencia mostró una inclinación por el arte, así como por los videojuegos y la animación digital.
Vive desde hace casi un año en Austin, Texas. Está casado y trabaja para Amazon Web Services, una de las líneas de Amazon, el gigante de internet. Fanático de los juegos de video y de la Fórmula 1 este ecuatoriano supo que para cumplir sus metas debía esforzarse y hacer varios sacrificios. Siempre cuento que mi recorrido ha sido complicado. Migrar, aprender un nuevo idioma, estar lejos de la familia y de los amigos fue muy duro.
En una conversación a distancia, Zeas-Sigüenza recuerda que luego de la secundaria estudió, un año y medio, Ingeniería de Sistemas. No se sintió a gusto en esa carrera y decidió buscar suerte fuera de su tierra natal. Su primer destino en EE.UU. fue Seattle, ubicada al noroeste, una ciudad bastante fría y oscura. Allí estudió animación en el Art Institute. Me gradué cuando Estados Unidos atravesaba una severa crisis económica, entre 2008 y 2010.
Bajo ese contexto, la búsqueda de un primer trabajo no fue sencilla. Le tomó casi dos años encontrar una oportunidad. Me contrataron para una pasantía, en la que solo organizaba las revistas de la oficina y hacía algunos mandados, pero no tocaba una sola computadora. Entonces supe que debía crear mis oportunidades. Me fascina aprender y mientras arreglaba la oficina observaba mucho lo que se hacía en esa empresa y eso me sirvió. Era el inicio de su carrera en el mundo de la animación 3D.
Tras terminar la pasantía, Zeas-Sigüenza empezó un trabajo de hormiga. Envié más de 100 mails con mi hoja de vida, pero solo dos empresas me respondieron y me dijeron que no. Seguí intentando, sabía que encontraría una puerta que se abriría. Luego de dos años de trabajos como freelance y con la humildad y la persistencia como sus banderas, este cuencano fue contratado en 2015 por Microsoft. Les había enviado correos durante un año y lo logré. Eso fue fruto de la dedicación y de creer en uno mismo. En Microsoft estuvo en la división de juegos de video desde 2012 a 2015, en las oficinas de Seattle.
Luego vino una nueva etapa. Este ecuatoriano pasó a Ten Gun Design una empresa 'pequeña' de diseño y marketing donde tuvo un cargo más alto: Senior 3D Artist. Allí estuve dos años y aprendí muchísimo. Fue una experiencia muy valiosa y quedé muy agradecido con el equipo y ellos conmigo, lo dice sin falsa modestia. En Ten Gun Design estuvo entre 2015 y 2017, con lo que estaba listo para un nuevo salto profesional.
En octubre del 2017 fue contratado por Amazon Games Studios. Allí estuvo dos años aplicando todo lo aprendido y mostrando su talento para la animación. Como consecuencia de su esfuerzo, en 2019 pasó a ser parte de Amazon Web Services (AWS), donde hoy se desempeña como Director de Arte Senior. La experiencia en Amazon. Ha sido muy buena, es una compañía enorme, casi un millón de empleados. Le veo como una gran nación, cada equipo de trabajo es un estado. Además hace mucho en temas de diversidad e inclusión. Es una empresa con muchas oportunidades.
En AWS este cuencano es parte de un equipo de 12 personas con experiencia en animación. Todos muy talentosos. Usamos tecnología de vanguardia en temas de animación, usamos la nube.
Para salir adelante tuvo el apoyo de sus padres. Ellos me dieron herramientas de vida, muchos valores. Además Zeas-Sigüenza se apoya en cuatro valores o pilares: pasión, consistencia, dedicación y propósito. La pasión es la que me permite atreverme. La consistencia y la dedicación son resultado de la primera. Y el propósito es lo que me hace buscar impactar en los demás. Con esas cuatro bases sabía que iba a crecer, siempre trabajé duro y nunca le dije que no a nadie, ni a nada.
Al hablar de Picchu, el cortometraje premiado este año en los Paris Animation Awards como Mejor Film Animado, Zeas-Sigüenza dice que crear y dirigir un cortometraje fue algo inolvidable, un proceso de tiempo y dedicación. La producción nos tomó nueve meses y el trabajo que lo hicimos con el equipo tuvo que que ser aprobado por varios niveles en Amazon. Tras esa experiencia, este ecuatoriano dice que está descubriendo un nuevo camino profesional y personal Quiero compartir lo aprendido y usar la tecnología para crear impacto social, dice este artista digital que hace ejercicio, medita, escucha TedTalks, mira videos motivacionales y escucha mucha música para distraerse. (I)