Historia de superación: De mesero y bartender a director de proyectos en Accenture, en EE.UU.
Daniel Bernal llegó a Estados Unidos hace casi 20 años. Su pasión por la tecnología y la informática lo transformaron en un ejecutivo y hoy es director de proyectos y forma parte de las filas de la multinacional Accenture, una consultora estratégica que emplea a más de 700.000 personas en 120 países.

Daniel Bernal es guayaquileño. Desde pequeño, cuando tenía 11 años, su tío paterno influyó en sus gustos por la computación, los sistemas y la informática. "Él también hacía lo mismo, me enseñó a ingresar comandos y me llamaba la atención los juegos rústicos de esa época".  Así empezó su pasión por este mundo tecnológico.

Al cabo de unos años, su madre le compró su primera computadora y, en el colegio, a Bernal lo buscaban para realizar trabajos sencillos, desarrollar aplicaciones y demás. 

Su historia de cómo llegó al primer mundo parte de un divorcio y la creación de una nueva familia. "Vengo de una familia humilde y un hogar roto. Mi mamá se casó nuevamente y mi padrastro -a quien considero mi padre- la llevó a vivir a Estados Unidos. Ella iba y venía, mientras gestionaba nuestros papeles".

Bernal reconoce que en su adolescencia no fue muy aplicado con los estudios, pero que esto de los números y la computadora era un gusto innato. En la universidad comenzó a estudiar Ingeniería en sistemas. Desde este periodo, tenía pequeños trabajos y proyectos en donde realizaba programas y aplicaciones. "Mis amigos me ponían de referencia. Veía documentales, me autoeducaba. En mis 20, cuando estuve en Guayaquil, trabajé para pequeñas compañías como Expresito Carga", cuenta. 

En el 2003, su residencia en Estados Unidos fue aprobada y había llegado el momento de cambiar el rumbo. Bernal siempre tuvo en sus planes salir del país. "La verdad en Ecuador no tenía muchas oportunidades, sobre todo con lo que hacía y me gustaba, no tenía una dirección", enfatiza. Además, su padrastro le había ofrecido terminar sus estudios en una universidad en Port Washington, Nueva York.

Bernal llegó al primer mundo lleno de expectativas y con un propósito, cambiar su futuro. ¡Qué difícil es ser migrante! Su realidad era parecida a la de muchos. Su padrastro trabajaba como mecánico y conductor de camiones y su madre era niñera. 

Bernal comenzó su vida laboral en una estación de gas. También fue mesero, bartender y estuvo en varios trabajos más. "Cuando llegas a un país nuevo, no conoces cómo funcionan las cosas. No había un network para buscar un trabajo apegado a la tecnología", comenta. 

Su meta, al llegar, fue centrarse en terminar sus estudios pero para eso tenía que conseguir recursos. En un inicio, atravesó por un community college, para luego seguir en la universidad y conseguir un Bachelor Degree. Luego de obtener su título, Bernal continuaba trabajando en un restaurante y veía el panorama complicado. "No me salían trabajos. Aplicaba y no conseguía algo. No me apegué a ningún contacto de la universidad. Llegué a pensar que nunca me saldría nada", relata. 

¿Cómo se conectó con el mundo de la inteligencia artificial? "Creo que además del esfuerzo, de la ganas, de las habilidades. A veces se necesita suerte y encontrarte con las personas ideales". Luego de varios intentos, Bernal consiguió una capacitación gratuita de SharePoint, una plataforma de colaboración empresarial que es usada por el 85 % de la compañías Fortune 500 en Estados Unidos, de acuerdo a Microsoft. 

Esta capacitación tenía una duración de dos meses y en su finalización, Bernal sería promocionado en varias empresas para dar sus servicios. Y así fue. La primera llamada que recibió fue la de un ecuatoriano, un quiteño. Era la persona que lo llamaba para trabajar en una startup y a quien él consideró ideal y de suerte para iniciar su carrera, se convirtió en su mentor y en su gran amigo. 

Así inició su trayectoria en Nimbo, una startup que hacía consultorías en cloud (la nube). Allí se quedó un par de años y ocupó el cargo de director de integración, arquitecto de la nube y arquitecto de SharePoint, hasta que la empresa sufrió algunos cambios y Bernal decidió seguir otro camino. Es cuando su ángel de la guarda, su amigo volvió a aparecer en su vida.

Este ecuatoriano, que innovaba y buscaba más en el mundo de la inteligencia artificial llegó a Accenture, gracias a su mentor. Esta es una empresa que ofrece a sus clientes servicios en las áreas de estrategia y consultoría, interacción digital, tecnología y operaciones. Además, está ubicada en el listado de las 500 mayores empresas estadounidenses. 

Desde la división de Avanade, Bernal inició como Manager en la región noreste. En este cargo lideró el diseño y la implementación de plataforma e-commerce como parte de una iniciativa digital que buscaba revitalizar una franquicia de restaurantes de comida rapida. Además, lideró equipos de hasta nueve consultores onshore (US) y cinco offshore (India).

En 2018, este ecuatoriano recibió un ascenso a Group Manager, y sus responsabilidades se basaban en la entrega y dirección técnica de proyectos. Además, cada proyecto supervisado por este guayaquileño tenía ingresos de entre  US $10 a 12 millones. También tuvo a a cargo a más de 40 consultores del área. Allí permaneció hasta finales de 2023. 

Actualmente, ocupa el cargo de director de proyectos en la misma región. Su función es crear nuevas líneas de servicios (service offering) y optimizar las existentes con énfasis en fusiones y adquisiciones. También coordina la asignación de recursos a proyectos con adquisición de talento y centros de tecnología avanzada en India, Europa del Este, y Latinoamérica. Además, supervisa ventas que se aproximan a los US $9 millones. 

Para Bernal, la ganas de salir adelante y tener una realidad diferente fueron los motivos de su resurgimiento. Las batallas y las oportunidades "hay que sacarles provecho y aprovecharlas". En este país, creó su hogar y su futuro. (I)