Estefanía Yánez Schmidt tenía 19 años cuando decidió crear Áurea Brands, una marca que ofrece un conjunto de soluciones de diseño digital y propuestas de arquitectura. Estaba en segundo año de la Universidad Católica de Guayaquil y su primer trabajo fue para Fulgore, una tienda de ropa, de una amiga. Le quedaban horas huecas, mientras estudiaba diseño de interiores, así que decidió emprender en su proyecto personal.
Ahora, con 29 años, es la CEO de Áurea Brands y lidera un equipo de siete profesionales. Todas son mujeres, cinco son arquitectas, una diseñadora gráfica y una experta financiera. De ellas, una estudia una maestría en Suiza, otra trabaja desde Venezuela y el resto está en Ecuador laborando en línea. La firma tiene un portafolio en ejecución de 28 proyectos en el país y otros de la región. En lo que va de 2022 ha facturado US$ 70.000 y proyectan cerrar el año con US$ 200.000. Eso significa un crecimiento de 51,25 %, en relación a un periodo similar de 2021. Y el año anterior ya tuvieron un despegue en ventas del 85,13 %. Ahora buscan levantar US$ 6 millones de capital para invertir en un plan de expansión antes que finalice 2023. Uno de los objetivos: llegar a México y Brasil.
Áurea Brands tiene otros aliados que prestan servicios. Son 30 familias con talleres donde se elabora el mobiliario y las piezas para la tienda en línea Home and Pets. La mayoría de artesanos es jefe de familia y a su vez sostiene a sus hijos que son padres jóvenes, en pandemia llegamos con la propuesta, les entregamos el manual completo de ejecución, cumplieron los estándares de calidad y se quedaron con nosotros, señala Yánez. Ella fue seleccionada para el Young Leaders of Americas iniciative, un programa que busca fortalecer las capacidades de los emprendedores, promover sus ideas empresariales y contribuir al desarrollo de sus comunidades.
El Departamento de Estado de Estados Unidos la escogió entre 1.800 líderes jóvenes que aplicaron de 37 países. Está entre los 280 mejores emprendedores emergentes, que comenzarán el programa en julio próximo, con la fase inicial en línea de charlas y capacitación de liderazgo. Le dan la oportunidad a jóvenes empresarios latinoamericanos líderes que estén causando impacto social y económico, con mucho énfasis pospandemia.
¿Qué le enganchó al jurado para seleccionarla? La propuesta tiene 10 años, comencé a los 19 años y ha sido un camino de recorrido sólido, mientras manejo la empresa he estado involucrada en otras organizaciones. Luego, en 2019, se involucró Nathalie Briones, como socia financiera y CFO, y con ella comenzamos a construir una Áurea Brands más robusta. Crecimos de dos personas a ocho, en 10 meses.
Estefanía tiene sus claves como una líder joven para manejar un emprendimiento. Nunca verlo como un emprendimiento sino una multinacional, por más pequeño que uno empiece, eso me permite poner los números en orden, hacer estadísticas, proyecciones, tomar decisiones con base en los números, no me deja pensar que 'si el número es bajo no voy a crecer', mientras si tengo todo en orden desde el inicio, voy a tener más oportunidades, crecimiento y proyecciones. Siempre confío en el equipo con el que trabajo. Jamás pienso que voy a pagar algo bajo y obtener un buen resultado, todas son profesionales excelentes y no hemos escatimado en eso. Y la clave del equipo es el equipo.
La pandemia fue el punto de quiebre y la gran oportunidad para el despegue. Durante los primeros años, se habían mantenido en línea, visitaban clientes, presentaban los diseños, daban asesorías. Hasta que en enero de 2020 decidieron abrir físicamente. Alquilaron una oficina en el norte de Guayaquil y luego de una mega inversión empezaron a atender. Estábamos ilusionadas, con buenas expectativas del año, sin embargo, llegó la pandemia, y nos obligaron a cerrar la oficina sin dejar de pagar. Todo se vino abajo, fueron unos meses duros, nadie invertía en diseños, las construcciones estaban paralizadas.
No podíamos entregar los productos de la línea de hogar, no podíamos hacer nada. Fue cuando dijimos no puede seguir así, tenemos que cambiarlo y hacer todo digital. Es ahí cuando surge la idea de transformar esta experiencia física, porque la construcción es muy física, pero existe un proceso de planificación y diseño previo que podemos manejarlo a distancia.
Hace tres meses entregaron un proyecto de residencia de un cliente en Uruguay y un diseño inmobiliario para un bar en Chile. En Ecuador han diseñado gimnasios, centros educativos, con la vuelta a clases presenciales, diseño de retail. Y particularmente, diseño de iluminación para residencias y oficinas, en lo que se especializa Estefanía. Negocian en línea, hacen los diseños, pero no ejecutan. Desde Ecuador exportamos diseño y arquitectura, que es ejecutable mundialmente. Nuestra propuesta de valor es el diseño y recomendamos estudios arquitectónicos o constructoras que estén localmente en cada mercado. Eso lo hace más eficiente, ya que el cliente no tiene que pagar costos extras de exportación.
Actualmente trabajan con dos partners en Maryland y Chicago, en Estados Unidos. Ambas son empresas de bienes raíces y dentro de su portafolio ofrecen diseño de interior y arquitectura, desde que se asociaron con Áurea Brands. Además de vender una casa, le venden una solución visual, explica.
El plan de expansión incluye la inversión en un equipo propio de desarrollo para incrementar las soluciones dentro de la web, de acuerdo a la demanda de Áurea Brands. También montar un taller propio en Ecuador para exportar mobiliario y buscar tiendas en línea con experiencias en Estados Unidos para mostrar los productos y servicios. La empresa también diseña muebles y equipamiento de hogar y para mascotas. (I)