Los Juegos Olímpicos son un momento decisivo para los atletas de todo el mundo. Pero, ¿qué sucede cuando se apagan los aplausos y estos individuos de alto rendimiento, por una cuestión de edad o el motivo que fuese, deben buscar nuevos horizontes en sus carreras? ¿Encuentran su lugar en el mundo corporativo?
Es cierto que los olímpicos enfrentan diferentes desafíos al hacer la transición al mundo corporativo. Uno de ellos es ajustarse de un entorno altamente competitivo y estructurado de entrenamiento olímpico a la naturaleza más colaborativa y menos definida de los roles corporativos. Mike Donohue, Vicepresidente Senior de Ventas Globales en Gupshup, ofrece una perspectiva única sobre el tema.
Donohue, exremero de nivel olímpico con formación en la Universidad de Columbia, el Centro de Entrenamiento Olímpico y tres Campeonatos Mundiales, logró transformar su destreza atlética en una exitosa carrera empresarial. Hoy, lidera la estrategia de ventas en Gupshup.
Por qué las ventas son una opción natural para los deportistas
Según Donohue, las ventas y los deportes comparten un hilo conductor: un equilibrio entre la excelencia individual y el trabajo en equipo. Las ventas no se basan únicamente en el rendimiento individual, sino en crear un entorno en el que se eleve el nivel de todos los que nos rodean.
La preparación olímpica también es una clase magistral sobre cómo fijar objetivos a largo plazo. Donohue aplica este principio a las ventas, centrándose en los planes anuales y las acciones diarias necesarias para alcanzarlos. También destaca el valor de un entrenador, que es vital para el éxito de un equipo y, en una organización, el director ejecutivo es el entrenador más importante.
Más información sobre el viaje de Donohue
La experiencia de Donohue ofrece cuatro lecciones para los aspirantes a profesionales, entre ellas:
- El poder de los mejores jugadores: Rodearte de los mejores talentos es esencial, creando una cultura de excelencia donde todos se esfuerzan por dar lo mejor de sí.
- Pensamiento basado en primeros principios: dividir los procesos complejos en pasos fundamentales permite una mejora y una optimización específicas.
- Entradas > Salidas: Concentrarse en actividades de alta calidad (entradas) conduce naturalmente a resultados excepcionales (salidas).
- Diversión obligatoria: crear una cultura de equipo sólida a través de experiencias compartidas fuera del trabajo mejora la colaboración y la resiliencia.
La importancia del coaching y la mentoría
El último consejo de Donohue es identificar a los mejores entrenadores para ti. Afirma, “En la universidad y en el equipo nacional, tuve la oportunidad de interactuar con entrenadores principales de Harvard, Syracuse, Washington, California Berkeley y el equipo olímpico de EE. UU. que dirigían muchos de nuestros campos de entrenamiento.
Los mejores remeros eran verdaderos científicos del deporte, que constantemente hacían preguntas sobre la técnica, la configuración del aparejo y el ángulo de la pala, tratando de aumentar sus conocimientos y obtener una ventaja en la competencia.
Y los mejores entrenadores te empujaban mucho más allá de lo que creías que eras capaz de hacer. Tomar una parte de cada uno de los diferentes valores y fortalezas que tenían estos entrenadores y cómo dirigían a los equipos moldeó significativamente mi comprensión del deporte, especialmente porque los entrenadores de remo varían mucho, ya que algunos se centran en los aspectos técnicos y otros en la aptitud fisiológica”.
De la misma manera, es fundamental identificar a los mejores entrenadores en ventas. “Tuve el privilegio de trabajar con Todd Rulon-Miller, que fue miembro del directorio de una empresa mía anterior. Trabajó directamente para Steve Jobs en NeXT Computers y fue vicepresidente sénior de ventas en Netscape durante su oferta pública inicial. Una de mis citas favoritas de Todd es: 'Si venís a mí con datos, tenés una oportunidad; si venís a mí con una opinión, la mía siempre ganará'. Identificar a este tipo de 'entrenador' en un puesto de ventas es crucial y puede ser beneficioso para ambas partes. Animo a todos los líderes de ventas a que encuentren un gran entrenador o mentor de la misma manera que lo hace un atleta, y que no tengan miedo de pedirles su tiempo”, declara.
La trayectoria de Mike Donohue, que pasó de ser remero olímpico a convertirse en líder de ventas, demuestra las habilidades transferibles y la mentalidad ganadora que los atletas pueden aportar al mundo empresarial. Su historia es un testimonio del poder de la disciplina, el trabajo en equipo y la concentración incansable en el logro de objetivos.