Cómo fomentar una "cultura de experimentación" y retener talento
Implica crear un ambiente de gran confianza, en el que los empleados no sólo puedan expresar sus ideas, sino que se los anime a cometer errores.

Imaginá un lugar de trabajo en el que asumir riesgos no solo se fomente, sino que se espere. Un lugar donde los empleados se sientan autorizados a compartir sus ideas audaces, sus puntos de vista diferentes e incluso sus preocupaciones sin miedo a ser descartados. Una cultura de la experimentación es más que una frase de moda: es una estrategia de supervivencia.

Como dijo Steve Jobs: "La innovación es la capacidad de ver el cambio como una oportunidad, no como una amenaza", una mentalidad crucial para las empresas que quieren seguir siendo competitivas en el panorama actual, en rápida evolución. 

Fomentar este tipo de cultura es más fácil de decir que de hacer, así que ¿Cómo pueden los líderes crear un entorno en el que prospere la experimentación?

 

 

¿Por qué fomentar una cultura de experimentación?

 

1. Para seguir siendo competitivos


En su artículo Building a Culture of Experimentation, Stefan Thomke describe cómo Booking.com se mantiene a la cabeza experimentando continuamente. No esperan a que aparezca la próxima gran novedad; prueban y ajustan constantemente, descubriendo lo que funciona. Por el contrario, ceñirse rígidamente a un plan sin adaptabilidad es como conducir con los ojos cerrados.

Dan Rogers, director general de LaunchDarkly, destaca esta necesidad, haciendo hincapié en la importancia de integrar la experimentación en el propio proceso de desarrollo. 

"¿Qué pasaría si se pudieran unir los experimentos y las características del software, permitiendo a los gestores de productos, a los responsables de marketing y a los científicos de datos tener visibilidad y participar en el proceso? En última instancia, sin embargo, el control sobre la característica permanece en el nivel del software", explica. Este enfoque impulsado por los desarrolladores mantiene la competitividad de las empresas, ya que les permite probar nuevas características sin problemas y adaptarse rápidamente.

 

 

2. Retener a los mejores talentos

 

Nadie quiere trabajar en un lugar donde la creatividad se siente sofocada. Una cultura de experimentación fomenta un entorno de gran confianza, en el que a los empleados no sólo se les permite sino que se les anima a cometer errores. Este tipo de atmósfera hace que el trabajo sea emocionante, significativo y mucho más divertido. A las empresas que adoptan este enfoque les resulta fácil retener a sus talentos más brillantes.

Como señala Rogers, "La respuesta a cómo crear la experimentación como cultura dominante es llevarla al ámbito donde reside la función". Esta democratización de la experimentación ofrece a los empleados de todos los departamentos (sean desarrolladores, jefes de producto o responsables de marketing) la posibilidad de participar en el proceso.

 Al hacer que la experimentación sea más inclusiva y accesible, las empresas no sólo fomentan la creatividad, sino que también crean un entorno en el que los mejores talentos quieren quedarse.

 

 

Cómo crear una cultura de experimentación


1. Creá un entorno psicológicamente seguro


Imagina una reunión en la que todo el mundo se sienta libre para hablar, incluso si su idea parece poco convencional. Ese es el poder de la seguridad psicológica. Si tu equipo tiene miedo a ser rechazado, nunca desbloqueará todo su potencial. Amy Edmondson, en su libro The Right Kind of Wrong, señala cómo el trágico desastre del Challenger podría haberse evitado si las personas adecuadas se hubieran sentido cómodas al hablar. 

La seguridad psicológica es clave para la experimentación: la gente necesita sentirse lo suficientemente segura como para asumir riesgos y aprender de ellos.

 

 

2. Fracasá con inteligencia, no con fuerza


Fracasar con inteligencia no significa ser imprudente. Se trata de asumir riesgos calculados y aprender de los errores. Dan Rogers habla de esta mentalidad diciendo: "La velocidad y la ejecución son la clave: mantener un ritmo constante de innovación, lanzando software rápidamente". 

LaunchDarkly lanza entre 60 y 70 actualizaciones diarias, probando continuamente y recogiendo comentarios en tiempo real. Esta rápida iteración les permite "fallar de forma inteligente", es decir, aprender de pequeños fallos manejables y mejorar rápidamente.

 

 

3. Confiá en los datos


La experimentación no consiste en tirar cosas contra la pared para ver qué se pega. Los datos deben guiar tus decisiones. En palabras de Adam Savage: "En el espíritu de la ciencia, realmente no existe tal cosa como un experimento fallido. Cualquier prueba que arroje datos válidos es una prueba válida". La experimentación a gran escala sólo funciona cuando se miden los resultados.

 

 

La doble ventaja competitiva


Las empresas que adoptan la experimentación no sólo se mantienen por delante de la competencia, sino que también crean equipos que quieren quedarse para el viaje. Es como conseguir una oferta de dos por uno en tu negocio favorito, sólo que esta vez, el premio es tanto el éxito empresarial como la retención de los colaboradores. ¿Quién no busca eso?

Nota publicada en Forbes US.