La reciente oferta de trabajo de Netflix, que dispone de hasta 900.000 dólares para un gerente de producto centrado en IA mientras más de 9.000 escritores están en huelga, envía un mensaje audaz sobre la fuerza laboral actual: la adaptabilidad y el aprendizaje continuo son primordiales.
A finales del siglo XVIII y principios del XIX, la Revolución Industrial fue testigo de la sustitución cada vez mayor del trabajo manual por maquinaria, lo que generó entusiasmo y miedo. Un avance rápido hasta el día de hoy, y la creciente prominencia de la IA en la fuerza laboral incita emociones similares. Si bien la automatización de numerosas tareas amenaza muchos puestos de trabajo, al mismo tiempo abre nuevas oportunidades para quienes prestan atención.
Este es el mensaje subyacente de la audaz oferta de trabajo de Netflix en medio de una importante huelga de escritores: “El mundo del trabajo está cambiando”. La IA no es sólo una tendencia pasajera, sino una parte valiosa del equipo que llegó para quedarse. Su integración en industrias está dando lugar a la creación de posiciones estratégicas, destacando su importancia como jugador de equipo.
Nike lo reconoce con su búsqueda de un director de ingeniería de IA/ML durante la temporada para "liderar y hacer crecer equipos de ingenieros de aprendizaje automático". El salario ofrecido de hasta 340.000 dólares subraya la importancia de la IA para su visión de futuro.
Mientras tanto, Disney está aprovechando el potencial de la IA para mejorar la experiencia del espectador. Están contratando a un ingeniero de software líder en aprendizaje automático para innovar y amplificar la publicidad de Hulu y Disney. Este puesto, con un salario de hasta 209.000 dólares, muestra el valor de la IA para perfeccionar el entretenimiento.
En esencia, empresas como Nike y Disney están señalando una tendencia: la IA no se trata sólo de tecnología, sino de remodelar el panorama laboral con roles nuevos y de alto valor.
Se pagará una prima por especialización.
Durante la Revolución Industrial, las habilidades especializadas, como el manejo de máquinas, se volvieron invaluables. Hoy en día, la experiencia en IA y campos relacionados exige un reconocimiento similar. El impulso no es sólo para capacidades generales de IA sino para habilidades especializadas, y las empresas están dando mucha importancia a ese talento.
Tanto Nike como Disney, con sus respectivos roles en AI/ML, ejemplifican esta tendencia. Además de esta lista, Walmart está contratando actualmente para un puesto de científico de datos de personal - Experimentación de IA. Según su publicación, esta no es una oferta de trabajo más; es una invitación a "ser parte de su historia de éxito de AI/ML". Estos roles indican que el futuro no se trata sólo de tener experiencia en IA, sino de dominar sus numerosos matices.
Siempre habrá necesidad de ingenio humano
Si bien las máquinas dominaban las tareas en aquel entonces, la creatividad humana seguía siendo vital; De manera similar, la resistencia actual a la IA en la creatividad resalta la naturaleza irremplazable de la intuición y la originalidad humanas.
Aunque la IA ha logrado avances significativos, sus capacidades están limitadas por los datos que proporciona, lo que puede introducir sesgos y a menudo pierde la chispa genuina de la creatividad humana. Un ejemplo destacado de este potencial de sesgo es el algoritmo de contratación de Amazon, que sin darse cuenta favoreció a ciertos grupos demográficos sobre otros debido a los prejuicios subyacentes en sus datos. Esto demuestra que, sin una supervisión cuidadosa, la IA puede perpetuar los prejuicios sociales y socavar la igualdad de oportunidades.
En el frente creativo, si bien la IA puede imitar el arte o la música reconociendo patrones, no puede replicar la profundidad de la inspiración humana extraída de las emociones, las experiencias o la intuición. Los artistas combinan elementos de maneras innovadoras, evocando sentimientos o contando historias, un tipo de originalidad y resonancia emocional que la IA realmente no puede captar.
En esencia, tanto los sesgos involuntarios de los algoritmos como las limitaciones inherentes a la imitación de la creatividad genuina subrayan que la IA, aunque poderosa, no puede reemplazar la comprensión matizada, el juicio ético y la chispa creativa intrínsecos de los humanos.
La IA no va a desaparecer, y los humanos tampoco. Por lo tanto, la fuerza laboral actual debe girar para adoptar la inteligencia artificial, adaptarse a los cambios y adoptar una nueva forma de trabajar. Con este panorama en evolución en mente, profundicemos en pasos viables para que tanto los empleadores como los empleados garanticen que prosperen y sigan siendo relevantes en la era de la IA.
Consejos para empleadores
Invertir en formación: ya no basta con buscar talentos con habilidades preexistentes en IA. Las empresas deben invertir activamente en la formación de su fuerza laboral actual, dotándola de las habilidades necesarias para trabajar junto con la IA.
Planificación estratégica: la IA no es simplemente una herramienta; es una estrategia. La integración exitosa de la IA requiere una hoja de ruta que detalle su implementación en varias facetas comerciales.
Gestión del cambio organizacional: un componente fundamental de un plan de gestión del cambio eficaz es una estrategia de comunicación sólida. Al involucrar a los empleados de todos los niveles, presentar diversas perspectivas y fomentar la retroalimentación abierta, pueden garantizar adaptaciones duraderas, menos pasos en falso y un enfoque holístico para adoptar la evolución impulsada por la IA.
Consejos para empleados
Adopte el aprendizaje continuo: según el Informe de riesgo global 2020 del Foro Económico Mundial, el 42% de las habilidades básicas necesarias para realizar los trabajos existentes cambiarán. Por lo tanto, los empleados que mejoren proactivamente su competencia en IA liderarán el grupo. Los recursos en línea modernos ofrecen a todos la oportunidad de comprender los conceptos básicos de la IA y más.
Las habilidades interpersonales importan: incluso cuando la IA se vuelva omnipresente, las habilidades centradas en el ser humano como la creatividad, la inteligencia emocional y la resolución de problemas tendrán un valor significativo.
Abogar por el uso ético de la IA: así como los trabajadores del pasado presionaban por condiciones de trabajo seguras, los empleados de hoy deben defender el uso ético de la IA, garantizando que la tecnología amplifique el potencial humano sin infringir derechos ni límites éticos.
En retrospectiva, mientras el clamor de la maquinaria de la Revolución Industrial remodeló el mundo, los silenciosos algoritmos y las redes conectadas de la IA están preparando el escenario para el próximo cambio monumental en la forma en que trabajamos. La audaz oferta de trabajo de Netflix es más que una simple oferta lucrativa: es un toque de atención que se hace eco de las profundas transformaciones de épocas pasadas. Y al igual que aquellos que prosperaron durante la Revolución Industrial, el éxito en esta era impulsada por la IA pertenecerá a aquellos que reconozcan los vientos del cambio y ajusten sus velas en consecuencia.
*Nota publicada originalmente en Forbes EE.UU.
