Una 'semilla' hecha con inteligencia artificial. Esa alegoría se aplica a Muyu una edtech creada por un ecuatoriano que descubrió su espíritu emprendedor en Chile.
"Muyu, cuyo nombre en quichua significa semilla, es una app móvil que permite a los profesores grabar su clase en tiempo real, inmediatamente el algoritmo con inteligencia artificial procesa la grabación y en cuestión de segundos entrega un resumen, destaca los puntos claves, analiza cuanto habló el profesor, cuánto los estudiantes y finalmente proporciona técnicas y herramientas para mejorar" dice con entusiasmo Daniel Crespo, un educador por accidente.
Este quiteño de 37 años recuerda que durante su época de estudiante en el colegio Intisana siempre cuestionaba el modelo educativo tradicional, donde el profesor era el protagonista del aprendizaje. Esto le significó algunas llamadas de atención.
Tras obtener su título de bachiller Crespo ganó una beca parcial para estudiar en la Universidad de los Andes, en Chile. "Quería ser odontólogo, pero poco tiempo antes de viajar me informaron que la beca no aplicaba para esa carrera. Con tal de no perder la oportunidad de estudiar en el exterior me incliné por comunicación".
En 2006 llegó a Santiago lleno de ilusiones, sin saber que sería su casa por los siguientes 15 años. Durante sus primeros años consiguió tres trabajos para cubrir la diferencia de la beca: como ayudante de cátedra le pagaban US$ 15 la hora; vendiendo seguros; y como promotor de productos en supermercados, donde ganaba US$ 25 al día.
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Entre risas recuerda que tenía que disfrazarse de galleta, león o vaca, según el producto que estaba promocionando. "Casi ningún mes lograba cubrir todo el pago, pero en el área de finanzas me aceptaban abonos. Mis padres siempre nos enseñaron que teníamos que labrar nuestro propio camino".
Viendo hacia atrás, reconoce que esas experiencias formaron su personalidad emprendedora, innovadora y resiliente. Durante su época universitaria creó la rama de escalada deportiva. "No sé cómo conseguí que un empresario me diera US$ 10.000 con lo que construí el muro, pero no me alcanzó para las colchonetas, entonces improvisé una mesa y una alcancía para recibir donaciones. Pero a ese ritmo me tomaría por lo menos dos años obtener el dinero. Un día el rector pasó frente a mí y autorizó la compra de las colchonetas".
Se califica como un luchador por naturaleza y un innovador. En 2010 fundó la revista Diálogos UC de la Universidad Católica de Chile y en 2012 se desempeñó como director editorial del Instituto Res Pública, un centro de formación que promueve el interés por los problemas sociales y políticos. Pero fue en 2014 cuando la educación tocó sus puertas. ¿Accidente? "Cinco años fui profesor de filosofía y me hechizó. Decidí darle con todo a la educación. Obtuve un Master en Dirección y Gestión Educativa de Calidad".
En los siguientes años trabajó en diversos roles en el ámbito educativo que le permitieron entender la evolución de la educación, sus falencias y necesidades. "Fui coordinador nacional de apoyo a la mejora educativa en el Ministerio de Educación de Chile y viceministro en Ecuador, por lo que volví a Quito, dejando una vida de 15 años en Santiago".
Al terminar su paso por el sector público, tenía claro que uno de los mayores desafíos de la educación era la falta de capacitación de los profesores. Con esta inquietud que estuvo dando vueltas largo tiempo en su cabeza nació Muyu Education. Con su hermano mayor, Santiago, invirtieron US$ 15.000 para comenzar.
Poco después, Cristina Rivadeneira se unió al equipo. En agosto de 2023, Crespo, como capitán del barco, empezó a tocar puertas en colegios de Quito. Un mes después cinco le dieron el sí. Contra reloj puso a punto la plataforma ya que las clases estaban comenzando. "Con técnicas mínimas, el cambio que experimentan los profesores es inmenso. La docencia es una profesión de ejecución, no teórica. Los maestros necesitan retroalimentación constante, accesible y contextualizada. Ahí entra la IA para escalar y poder llegar a más personas. En 2023, con cuatro meses de funcionamiento, terminamos con una facturación de US$ 30.000. Participamos en el programa Dare to scale de Endeavor, fuimos uno de los cinco proyectos que llegamos al Demo Day ante más de cien inversionistas. Conseguimos US$ 50.000 de un inversor ángel de Nueva York. La empresa fue valorada, por el inversor en US$ 5 millones y en diciembre cerraremos la ronda de inversión por US$ 400.000".
Fanático del fútbol y admirador de Messi explica que el modelo de Muyu es híbrido, porque nunca deja de estar en territorio con coaches, que van alimentando la app en tiempo real. Actualmente trabajan con 12 colegios: cuatro en Guayaquil, dos en Cuenca y seis en Quito. "Creamos una fundación para apoyar a colegios que no pueden pagar. En Ecuador hay 200.000 profesores, de los cuales 800 están utilizando nuestra plataforma. Somos como una 'Alexa' para maestros, integrando tecnología a los salones de clase. Usamos notificaciones push, al estilo Duolingo, y motivamos a los usuarios a implementar mejoras, por más pequeñas que sean. El siguiente paso será la creación de avatares, imágenes asociadas a una identidad. Este año conseguiremos una facturación de US$ 300.000".
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¿Cuál es su diagnóstico sobre el sistema educativo y la implementación de la IA en la preparación de las futuras generaciones? La respuesta fue tajante: "La educación en Ecuador y Latinoamérica tiene un rezago de hasta 10 años, siete de cada diez niños no entienden lo que leen según un reporte del Banco Mundial. La Unesco señala que cuatro de cada cinco niños menores de 10 años tienen dificultades para leer un titular y según el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineval) tres de cada cuatro estudiantes al terminar el colegio no pueden resolver un problema matemático simple. Es una de las profesiones más difíciles y la oferta formativa es muy teórica y deficiente. Los profesores no pueden dejar de capacitarse y actualizarse constantemente".
Cuando haces un buen piso, el techo no existe es el lema con el que se maneja. En 2025 pisará el acelerador a fondo para romper todos los esquemas y abrirá una nueva ronda de inversión por US$ 3,5 millones para su expansión internacional. "Comenzaremos con 200 colegios en Chile y proyectamos abrir en México en el segundo semestre. Esto nos permitirá superar el millón de dólares".
Para Crespo, una de las claves para emprender con éxito es tener confianza en uno mismo y en el producto que se ofrece. (I)