Los primeros en adoptar la IA generativa ya están viendo el retorno de la inversión de las aplicaciones que incorporaron, según descubrió Google Cloud en una encuesta que se compartió en exclusiva con Forbes. 

Google habló con 2.508 ejecutivos de alto nivel de todo el mundo y encontró una variedad de resultados positivos: un 74% de los directivos ya ve algún tipo de retorno de la inversión. Casi la mitad de los que implementaron la IA generativa para la productividad (45%) dijeron que se duplicó. Más de tres cuartas partes (77%) vieron una mejora en los clientes potenciales y la captación de nuevos como resultado de la IA generativa. En cuanto a los ingresos, el 86% recibió un impulso del 6% o más.

¿Cómo tienen tanto éxito estos pioneros? Oliver Parker, vicepresidente de Global Generative AI Go-To-Market para Google Cloud, que trabaja diariamente sobre la adopción de la IA en las empresas, compartió la clave para implementar esta tecnología y ver resultados. 

¿Cuál fue la conclusión más importante del estudio?

Parker: Pienso que lo que hizo la diferencia es el nivel de directivos. El patrocinio de la C-suite, y su compromiso. Se puede observar de formas distintas, pero la red que forma el patrocinio y el engagement de los altos cargos en el uso de esta tecnología en una organización es increíblemente evidente. Cuando se ve el éxito, ése es uno de los ingredientes clave.

El segundo, del que me encargo desde que empecé en este puesto a principios de enero, es hacer un montón de reuniones con clientes. Encontramos diversos casos de uso y ejemplos, es necesario repasarlos y definir los casos de uso que van a tener el mayor impacto (al menos cuando una organización se pone en marcha) y los que tienen un ROI realmente sólido. ¿Cuáles son las métricas clave con las que vas a medir la oportunidad? ¿Se trata de ahorro de costos? ¿Se trata del crecimiento de nuevos ingresos? Hay que definir realmente el caso de negocio que realmente apoya la implementación del caso de uso.

Para mí, lo que fue muy gratificante es que el éxito viene a través de la adopción profunda y el compromiso de la C-suite. No es sólo el patrocinio ejecutivo, sino que representa un cambio cultural que se empuja hacia abajo en la organización. Y la segunda consecuencia es el retorno de la inversión que está empezando a surgir de algunos de estos casos de uso que entran en producción. Si bien aún estamos en las primeras fases de esta industria, es algo que perdurará absolutamente a largo plazo, y estamos empezando a ver algunos de los ingredientes del porqué.

¿Cómo definís la implicación y el compromiso de los directivos? ¿Cuánto tiempo llevan estas empresas comprometidas con las soluciones de IA?

Cuando estas herramientas empezaron a aparecer (ChatGPT fue una de las que salió primero) realmente tenía esa sensación de consumidor, buscando la forma más fácil de interactuar con ellas. Entonces la gente empezó a utilizarlas para hacer su trabajo diario, y tanto las C-suites como todos nosotros como consumidores, nos convertimos en grandes interesados en esta transformación.

Lo que creo que realmente sobrealimentó el cambio no fue sólo el valor que se podía obtener de estos grandes modelos lingüísticos y de los asistentes que se basan en ellos, sino (lo que es igual de importante y representa casi el lado negativo de las cosas) el aspecto de la seguridad. Todos nos emocionamos mucho viendo las infinitas posibilidades.

La otra cara de la moneda son las organizaciones y las empresas tradicionales. ¿Qué información subieron a estas plataformas? ¿Y cómo aseguran este tipo de capacidades para que todo el mundo pueda aprovecharlas, pero dentro de las cuatro paredes de la organización? 

Ocurrieron dos cosas. Esta experiencia fue alucinante para muchos de nosotros como consumidores, al darnos cuenta de que podía ayudarnos en nuestro trabajo. Eso combinado con las empresas, que tienen información confidencial que quieren introducir en estos sistemas, buscando impulsarse. 

"Junto a los asombrosos conjuntos de capacidades que están desbloqueando nuevas oportunidades, este cambio también va acompañado de la gobernanza, el riesgo y los datos".

El engagement acelerado de los directivos de las empresas es exponencial. A veces, los ciclos tecnológicos pueden durar dos años. Ahora mismo, creo que estamos trabajando bajo ciclos tan comprimidos relacionados a cómo las C-suites se están involucrando. Ven el valor (ya sea el crecimiento de nuevos ingresos o el ahorro de costos) que este tipo de capacidades, si se introducen correctamente, pueden aportar a la organización.

¿Qué están haciendo las empresas con la IA? ¿Por dónde están empezando, por lo más sencillo de implementar o pensando en el retorno de la inversión?

Hay gente que está muy interesada en las funciones cotidianas. Empresas donde los trabajadores aplican la IA para hacer mejor su trabajo, producir mejor calidad en un periodo más corto de tiempo. Directores financieros que esperan una gran automatización back-office que puede reducir los costos. Otras que la utilizan para analizar grandes volúmenes de documentos buscando segmentar pólizas de seguros. Podemos hacer todo esto a través de un modelo de IA. 

Diferentes partes de la organización están observando y analizando las posibilidades, que cobran vida cuando el CEO expresa: 'Este es un nuevo paradigma tecnológico que se convierte en un diferenciador estratégico'. Hay muchos puntos de influencia. Hay culturas de trabajo que se están modificando, apoyos que surgen desde la cima hacia las bases, o desde el medio, conjuntos de habilidades y capacidades en ingeniería y tecnología que saben cómo aprovechar la IA y crean plataformas acordes a una empresa, haciéndola segura, para administrarla con responsabilidad y seguridad. 

Se necesita esta confluencia de actividades, además de un apoyo muy sólido: el conjunto de tecnologías, si se aplica correctamente, se convertirá con el tiempo en un elemento diferenciador para nosotros como empresa. Y luego la intención se refuerza con la adopción cultural: vayan a buscar experimentos, a construir casos de uso, realicen hackathons.

El estudio mostró que el 74% de las empresas que utilizan IA generativa ya están recibiendo un retorno de la inversión, y el 86% están viendo un aumento de los ingresos del 6% o más. ¿Cambiará esto dentro de 12 meses?

Para las personas que están poniendo estos sistemas en producción, esa parece ser la curva correcta. Lo que podría suceder en el futuro es que el volumen de personas que lo están haciendo va a ser exponencialmente mayor. Yo afirmaría que en el futuro los que ya tuvieron su primer o segundo caso de uso verán mucho más a partir del tercero, cuarto, quinto, sexto, séptimo, octavo y noveno.

La pregunta es si se están divirtiendo o lo están tomando en serio. Hay una fase intermedia. Tenemos la experimentación, la producción y después la producción a escala: en lugar de tener uno o dos casos de uso que realmente aporten valor, podés tener cientos de casos Creo que esto es lo que empezamos a ver. Si entrevistáramos a todos esos 2.500 directivos dentro de un año, sería fascinante ver la explosión de casos de uso que ahora están en producción.

El 74% que ve el ROI me parece correcto. Van a ocurrir dos cosas: los que ya lo están utilizando van a liderar, y va a ser una enorme bola de nieve con más casos de uso. Luego va a haber todo un nuevo grupo de empresas que se sumen. La pregunta para los nuevos es: ¿son las plataformas donde pueden ver un mejor ROI más rápido, o van a seguir la misma trayectoria de los que llegaron 12 meses antes? Mi sensación es que va a estar en algún punto intermedio, pero con un volumen mucho mayor. Los que ya lo utilizaban van a ver un valor exponencial, que se convierte en un salto por encima de los nuevos que llegan.

Según el estudio, el 84% de las organizaciones con sistemas de IA implantados pudieron pasar de la fase piloto a la de producción en seis meses. ¿Qué está permitiendo que se genere esta rápida adopción?

La tecnología es tan increíblemente potente. No se trata de una infraestructura, como cuando nació Internet y se estaba construyendo. Se pensaba que iba a cambiar las condiciones de juego, pero pasó un tiempo antes de que alguien pudiera aprovecharlo. La IA es increíblemente obvia y valiosa para el usuario muy rápidamente. Es un salto tan grande en la capacidad de las plataformas que pasan a ser así de inteligentes. Sólo la capacidad bruta está llevando a un tipo diferente de curva de adopción.

Creo que tener una cultura de empresa que esté fomentando la experimentación, que esté pidiendo a los trabajadores su aporte en casos de uso en los que creen que puede ser valiosa, que esté haciendo hackathons, eso hace una diferencia.

Por la generalización de la computación en nube, muchas organizaciones con las trabajamos se enfocaron en torno a los datos: transformaciones de datos, racionalización de su patrimonio de datos y limpieza de los entornos de datos dentro de sus empresas. Esa fue una gran iniciativa para muchas empresas en los últimos tres a cinco años. Disponer de los datos en una mejor posición también está acelerando la adopción de la IA generativa. Observamos en los clientes que tuvieron transformaciones de big data cómo se acelera un valor increíble de la IA generativa porque su patrimonio de datos también está en orden.

¿Cuáles son algunas de las necesidades de reinversión más apremiantes para las empresas que ven el retorno de la inversión de los sistemas de IA?

Las empresas que vieron valor en esto, volverán a invertir directamente en talento. Se trata de personas con habilidades, ya sean técnicas, de marketing o que sepan cómo utilizar estos productos en su día a día. También estarán invirtiendo de nuevo en el trabajo en sus plataformas de datos. Pensarán en tener sus datos en orden para este caso de uso específico. Verán el valor y decidirán enfocarse en ordenar el resto de su patrimonio.

El concepto de bola de nieve es muy evidente. Quienes lograron un montón de ROI con esta tecnología, ahora van a recargarlo y avanzar hacia el concepto de producción a escala, donde llevan muchos más casos de uso a la producción. Si ven el ROI, van a reinvertir, especialmente si creen que pueden aplicarlo en muchos otros lugares de su organización.

Muchos de los clientes que respondieron a la encuesta no tienen miles de casos de uso en producción. Probablemente tienen un puñado que aportan un valor realmente fuerte, pero saben que con el tiempo quieren llegar al millón, porque entonces tenés la IA en el núcleo de cómo se gestiona toda la empresa. A medida que estos sistemas son cada vez mejores, el valor que se hereda se convierte en mayor y mayor.

¿Qué consejo le darías a una empresa que aún no tiene ninguna aplicación de IA en producción, pero que está trabajando para conseguirla en el futuro?

Creo que debe hacer la tarea, pensar sobre la forma en la que puede hacer una diferencia para la organización. Simplemente poner en marcha algo que ayude con los correos electrónicos podría ser útil, pero puede que no sea lo suficientemente específico como para mostrar un verdadero retorno de la inversión. Hay que fijarse realmente en los imperativos estratégicos de la empresa. 

Con nuestros clientes, vamos a ver sus ganancias trimestrales. Nos preguntamos: ¿cuáles son las prioridades? Entonces nos sentamos y trabajamos con ellos. Si su prioridad es la optimización de la cadena de suministro, hablemos de cómo es su cadena. Tiene que aplicarse al negocio y a los imperativos estratégicos de cada cliente. Eso es lo primero.

Lo segundo vuelve a lo que conversamos antes. No es una sorpresa que el éxito y el retorno de la inversión provengan de clientes que cuentan con el apoyo de la alta dirección. A menudo se trata de un líder tecnológico, pero cada vez veo con más frecuencia un liderazgo que llega hasta el CEO, y también a nivel del consejo de administración. 

Contar con un liderazgo de alto nivel es absolutamente decisivo. Alinearlo con los imperativos comerciales de la empresa es súper importante, porque entonces, cuando te sientes con el director financiero y le pidas inversiones en estas nuevas capacidades, te estarás alineando con un imperativo estratégico de la empresa.

En tercer lugar, contar con los conocimientos técnicos y el talento interno es realmente importante. Las empresas a las que les va muy bien tienen capacidad técnica dentro de su departamento de ingeniería o IT.

Por último, comenzando desde la cima de la organización hay que infundir una cultura de experimentación. Estás construyendo un conjunto de músculo y capacidad donde la gente siente que puede experimentar y ser creativa con este tipo de herramientas para ayudarlos. Algunas personas fracasarán o cometerán equivocaciones, pero de eso se trata. Tenemos que pasar por este proceso de error para tener éxito al mismo tiempo.

Esta conversación ha sido editada en aras de la longitud, la continuidad y la claridad.

Nota publicada en Forbes US.