La Electronic Entertainment Expo, o E3, ya no existe, ya que la icónica convención de videojuegos que en su día fue el mayor evento del sector, no pudo en su lucha por recuperarse de la pandemia del Covid-19 y mantenerse al día de los cambios de la industria en la forma en que las empresas de videojuegos interactúan con los clientes.
La Asociación de Software de Entretenimiento, la organización comercial de la industria del videojuego, anunció en un comunicado que había decidido poner fin al E3, pero que seguiría centrándose en “defender a las empresas miembros de la ESA y a la mano de obra de la industria que alimentan el impacto cultural y económico positivo cada día”.
La Asociación ya había cancelado el evento de 2023 en medio de señales de problemas, ya que los nombres más importantes del sector del videojuego -incluidos Microsoft, Nintendo y Sony- planeaban saltarse la convención.Pero el anuncio del martes supuso la primera confirmación oficial de la ESA de que el evento desaparece para siempre.
El evento no se ha celebrado en persona desde 2019 debido a la pandemia del Covid-19.
"Sabemos que es difícil decir adiós a un evento tan querido, pero es lo correcto dadas las nuevas oportunidades que tiene nuestra industria para alcanzar a fans y socios", dijo el presidente de la Entertainment Software Association, Stanley Pierre-Louis, en una entrevista con el Washington Post, que fue el primero en dar la noticia.
Antecedentes
Durante más de dos décadas tras su edición inaugural en 1995, el E3 fue el mayor escenario de los videojuegos, con frecuencia el anfitrión de algunos de los mayores anuncios de la industria, desde la revelación de nuevas consolas como la Nintendo Wii hasta la aparición sorpresa de Keanu Reeves en 2019 para promocionar su aparición en Cyberpunk 2077. Pero las señales de problemas aparecieron por primera vez en 2018, cuando Sony PlayStation anunció que se saltaba el evento.
66,100. Ese es el número de personas que asistieron al E3 en 2019, la última convención presencial
La convención se canceló en 2020 en medio de la pandemia y volvió a un formato sólo virtual durante los dos años siguientes. A principios de este año, tanto Microsoft como Nintendo anunciaron que se unirían a Sony para saltarse la convención de 2023, y la ESA canceló posteriormente el evento.
Pero persistieron los interrogantes sobre su futuro, sobre todo porque las compañías de videojuegos encontraron sus propias plataformas para mostrar sus principales anuncios. Nintendo y Sony, por ejemplo, producen sus propias videoconferencias y eventos con anuncios de nuevos juegos y consolas, que generan una gran euforia y especulación.
