El gigante farmacéutico suizo Roche anunció el lunes la compra de Telavant, una empresa de inmunología que desarrolla un prometedor tratamiento para la enfermedad inflamatoria intestinal, en una operación valorada en más de 7.000 millones de dólares, en un momento en que la compañía trata de reforzar su cartera de medicamentos tras una serie de sonados fracasos en las últimas fases el año pasado.
El acuerdo asciende a 7.250 millones de dólares, según Roche, con un pago inicial de 7.100 millones y hasta 150 millones de dólares en concepto de pago por hitos a corto plazo.
El acuerdo otorgará a Roche los derechos de desarrollo, fabricación y comercialización en Estados Unidos y Japón del anticuerpo experimental de Telavant RVT-3101, que se reveló prometedor como posible tratamiento de enfermedades inflamatorias intestinales como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn.
La mayor parte de Telavant (75%) es propiedad de la empresa estadounidense de desarrollo de fármacos Roivant Sciences, fundada por el aspirante a la candidatura presidencial republicana Vivek Ramaswamy, y del gigante farmacéutico estadounidense Pfizer (25%), conservando este último los derechos de comercialización para el resto del mundo.
Las palabras del CEO
Thomas Schinecker, que tomó las riendas como director ejecutivo de Roche el año pasado, dijo que la terapia de anticuerpos tiene "el potencial transformador de marcar una diferencia significativa para los pacientes que viven con la enfermedad inflamatoria intestinal", y añadió que la compañía espera "hacer que esté disponible para los pacientes tan pronto como sea posible."
Roche se comprometió a iniciar un ensayo clínico de fase 3 de la terapia "lo antes posible", refiriéndose al ensayo de gran envergadura que constituye la fase final de desarrollo antes de que los organismos reguladores consideren un nuevo producto, tras los datos prometedores de ensayos anteriores.
En su anuncio, Roche dijo que también planea trabajar con Pfizer para desarrollar una terapia de anticuerpos de "próxima generación" para la enfermedad inflamatoria intestinal. Según la empresa, el tratamiento se encuentra actualmente en la fase inicial de los ensayos clínicos.
Schinecker confía en que la terapia pueda beneficiar algún día a pacientes que no sólo padecen enfermedades inflamatorias intestinales. Dado que la terapia se dirige tanto a la inflamación como a la fibrosis, podría aplicarse a muchas otras enfermedades, según Roche.
Estuve muy interesado en engrosar la cartera de productos en desarrollo de Roche tras una serie de sonados fracasos durante las últimas fases de desarrollo el año pasado, incluidos los esfuerzos por sacar al mercado dos medicamentos contra el Alzheimer y una inmunoterapia contra el cáncer.
Los contratiempos se produjeron mientras la empresa perdía miles de millones en ingresos por la disminución demandada de sus productos Covid-19 para el diagnóstico y la terapia de la pandemia.
En septiembre, Schinecker declaró que la empresa está abierta a grandes adquisiciones si tienen sentido desde el punto de vista financiero y científico.
Un medicamento con potencial
Algunos analistas creen que, si el RVT-3101 tiene éxito en la última fase de los ensayos y supera las pruebas de los organismos reguladores, Roche podría tener entre manos un medicamento que podría convertirse en un éxito de ventas, según los informes de prensa, en referencia a un selecto grupo de productos que generan unas ventas anuales de 1.000 millones de dólares o más.
8 millones. Ese es el número de personas diagnosticadas en todo el mundo con trastornos gastrointestinales crónicos, según Roche. En esta categoría, que incluye a quienes padecen enfermedad inflamatoria intestinal, alrededor del 80% de las personas no experimentan una remisión duradera, señaló Roche.
*Con información de Forbes US
