Crece la demanda de aplicaciones, en un escenario en que las organizaciones se ven obligadas a responder dinámicamente. Y precisamente con las plataformas low-code es posible desarrollar aplicaciones (fundamentalmente apps, móviles, sitios web, productos SaaS) e integraciones funcionales más rápidamente, con equipos más pequeños y con presupuestos más bajos.
“Estas plataformas permiten que los “desarrolladores ciudadanos” colaboren en la creación de herramientas para las empresas en las que se desempeñan. Hacen posible que las personas que trabajan en funciones específicas puedan guiar el desarrollo de las herramientas que desean y necesitan” explican desde Accion Point.
Un estudio reciente de la consultora Gartner prevé que para 2025, el 70% de las nuevas aplicaciones desarrolladas por las organizaciones utilizará tecnologías de código bajo o sin código, frente a menos del 25% en 2020. Según el informe, el auge de las plataformas de aplicaciones de código bajo “está impulsando el aumento del desarrollo ciudadano, y, en particular, la función de los tecnólogos comerciales que informan fuera de los departamentos de TI y crean capacidades tecnológicas o analíticas para uso comercial interno o externo”.
En 2021 el mercado global de plataformas de desarrollo de código bajo se valoró enU$S 7610 millones. Y se espera que en 2027 supere los U$S 36 mil millones, registrando una tasa anual de crecimiento compuesto de casi 30% entre 2022 y 2027.
Mayor agilidad
El low-code facilita un tiempo de comercialización más rápido e impulsa la transformación digital. Colabora para mejorar las experiencias de los usuarios, automatizar procesos y actualizar sistemas clave. Aunque estas plataformas requieren cierta comprensión de cómo codificar, reducen significativamente el tiempo y el esfuerzo necesarios para crear nuevas aplicaciones.
Básicamente porque utilizan interfaces gráficas de usuario “de arrastrar y soltar”, lo que facilita el desarrollo. Esto hace que las organizaciones puedan responder más velozmente a las condiciones cambiantes del mercado. Y les aporta más capacidades de innovar.
En la actualidad el low-code tiene un dominio creciente sobre la industria del software. Las empresas incrementaron su adopción para profundizar su transformación digital, mejorar su ventaja competitiva y continuar el proceso de integración de tecnologías digitales.
El low-code hoy se emplea para desarrollar diferentes tipos de aplicaciones orientadas al cliente (por ejemplo, permiten crear sitios personalizables para múltiples dispositivos desde una única plataforma).Y además se utiliza para ayudar a mejorar las funciones básicas de las empresas (como el procesamiento de datos financieros, distintos procesos de RR.HH. y actividades de automatización de marketing).
El caso GeneXus y Globant
Tal es la importancia de las plataformas low-code que por ejemplo recientemente Globant, una compañía unicornio de Argentina dedicada a la innovación y al desarrollo de software, anunció la compra de GeneXus.
Gracias a esta adquisición ahora cuenta entre su portafolio con una plataforma de desarrollo low-code que es utilizada por más de 1.700 organizaciones en América Latina y Asia, que cuenta con funcionalidades de inteligencia artificial y que tiene una interfaz amigable para crear, desarrollar y dar mantenimiento a soluciones digitales para todo tipo de dispositivos.
“Las plataformas low-code impulsan la reinvención de empresas e industrias, ya que permiten a las organizaciones crear nuevas aplicaciones y soluciones más rápido. Esto es absolutamente crítico en esta era donde la tecnología evoluciona para satisfacer las expectativas de los usuarios finales”, destacó al respecto Martín Migoya, CEO y cofundador de Globant.
